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Sobre la cama entre la cálida colcha se removió la empresaria esa mañana después de la boda de Jiu y Yoohyeon. Ella sus ojos abrió con lentitud encontrándose con el techo blanco primeramente para luego sentir como u dolor atravesó su cabeza.

La horrible resaca.

—Auch...—Se quejó tomándose la cabeza entre las dos manos. No debió beber demasiadas copas anoche, pensó. Miró a su alrededor y se dio cuenta que no estaba en su habitación en el penthouse entonces recordó que se quedó en su hotel. Recordó cómo Dami Y Gahyeon la había ayudado a llegar ahi. Soltando un bufido sobre el colchón se sentó para luego frotarse la cara con ambas manos.

—Hola.—De pronto oyó la voz de Mina. Al levantar la mirada se la encontró parada en la puerta apoyada sobre el umbral—¿Como amaneciste?—Preguntó ella desde allí con los brazos cruzados.

La chica se encontraba hermosa y radiante como siempre.

—Terriblemente mal.—Se quejó lanzándose de espaldas al colchón con los brazos abiertos. Mina rió por lo bajo. Sabía que eso pasaría. Gracias al cielo ella no bebía.—¡Rayos!—Exclamó la empresaria sentándose de golpe—¿Que hora es?—Preguntó bajándose de la cama.

—Mmmm Las 9 y media creo...—

—Ay no, ay no...—Sus zapatos buscó por el piso—Tenía una reunión importante a primera hora y...—

—Ah, si. Sobre eso.—Chae la miró deteniendo sus movimientos —Me tomé el atrevimiento de avisarle a Dami que no llegarías ya que intenté despertarte temprano, pero nunca lo hiciste.—

—Demonios...—Murmuró sentándose en la orilla del colchón con un zapato en la mano.

—Dijo que le avisaría a Soyeon y que ella se encargaría de eso.—

—¿Como supiste que tenía una reunión?—Quizo saber mirándola.

—Ayer lo mencionaste cuando te dije por segunda vez que ya no bebieras. Me dijiste que estabas bien, que vería como hoy te ibas a levantar muy temprano para tu reunión importante a primera hora.—

—Dios...—A la cama se tumbo de espaldas nuevamente—Gracias. Me has salvado...—

—Está bien. ¿Quieres que te pida algo? No sé, un café o alguna pastilla.—

—Un un café estaría bien.—Contestó tomando su teléfono en sus manos.

—Ah, por cierto, fui a tu casa...—Mencionó llamando la atención de la empresaria—Traje algo de ropa para ti—Señaló una bolsa sobre la cama—Es que ayer regaste vino sobre tu camisa.—Señaló la prenda de la chica. En efecto, Chayeoung tenía una mancha de vino sobre su camisa blanca y es que después de besar a Mina quizo beber el último trago de su copa, pero en vez de echárselo en la boca, se lo echó encima para luego quedarse dormida.

—¿Donde dormiste?—Preguntó tomando la bolsa en sus manos. La última vez que recuerda haber visto a Mina fue cuando esta le puso la colcha encima de allí no recuerda nada. ¿Acaso se fue al penthouse?

—Ah, yo... yo dormí en la cama... contigo...—Contó un poco avergonzada. Una O formaron los labios de la coreana mientras asentía —Y hoy temprano fui a tu casa para cambiarme de ropa y traer algo para ti.—Dijo. La noche anterior pensó que no era bien visto si se iba a casa mientras "su futura esposa" se quedaba sola en la habitación, por lo que optó por quedarse a su lado. Solo había una forma de dormir y era en la misma cama que la coreana, así que un poco titubeante ella a su lado se metió bajo la misma colcha dándole la espalda a la empresaria. Una hora pasó y ella no podía conciliar el sueño gracias al incomodo vestido que cargaba. Dieron las 2 de la madrugada y al
Fin Mina se quedó dormida.

Proyecto "SON" (Michaeng) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora