Proyecto "SON" (Michaeng)

70

—¿Cómo que su novio está aquí?—Chaeyoung dijo levantándose del sofá para luego mirar a Mina que dormía profundamente en la camilla.

—Si señora. Y dice que no se irá de aquí hasta verla.—Informó Jiu desde la recepción del hospital privado.

Chaeyoung soltó un suspiro.

Supuso que Mina lo llamó. Era lógico, era su pareja, su futuro esposo. El hombre con quien podía refugiarse de cualquier cosa.

—Esta bien. Tráelo...—Respondió acercándose hasta la camilla donde su amor no correspondido dormía—Mina...—Habló por lo bajo—Mina...—A su lado dijo intentado despertarla.—Mina...—Su hombro movió con cuidado.

—Mmmm—La japonesa se removió hasta abrir los ojos encontrándose con la mirada de su jefa. — ¿Chaeyoung?—La  frente arrugó extrañada de verla allí. Cuando se quedó dormida, era Siyeon quien estaba en la habitación.—¿Estás aquí?—Los ojos se frotó. Según había dicho Somi, ella dos estarían juntas esa noche.

—Por supuesto que estoy aquí.—Sonrió levemente para ella al ver su reacción—¿Que creíste?—

—Ah, es que... o-olvídalo...—Ojalá le hubiese dicho que la rubia estadounidense estuvo allí diciéndole estupideces, estupideces que ella se creyó —¿Que sucede?—

—Ah... Eh,—la garganta se aclaró transformando su rostro a uno serio y frío—Tu... tu novio está... aquí...—

—¿¡Que!?—Los ojos abrió sentándose de un golpe.

—Hey, cuidado...—

—¿Co-Como que Dylan está aquí?—Vaya sorpresa la que se llevó.

—¿Tu no le pediste venir?—

—No.—Negó con la cabeza arrepintiéndose en ese instante ya que le dolió por el movimiento—Ni siquiera sabe lo qué pasó... ¿o si?—

—Pues al parecer lo supo de algún lado.—

—No puede ser.—

—Jiu lo está trayendo en este momento.—

—Ay Dios...—Y Justo en ese momento la puerta se abrió dejando ver al joven extranjero pálido como un papel.

—Amor...—Chaeyoung tuvo que retroceder un par de pasos con la mandíbula apretada. Dylan hasta ella llegó y abrazó fuerte, tal como la empresaria lo hizo horas antes.—Gracias al cielo...—Jiu y Siyeon entraron detrás del chico.—¿Que te pasó?—Su rostro tomó entre sus manos. Sus ojos mostraron lo angustiado que se encontraba el pobre. Había pasado horas de sufrimiento sin saber nada de su amada.

—Nada. Estoy bien...—Intentó tranquilizarlo al ver el terror en los ojos claros del chico.

—No sabes la angustia que pasé cuando vi las noticias.—Entonces todos entendieron como es que él estaba allí.—Dios, no me hagas esto...—Dijo con la voz quebrada. Y antes de que Mina pudiese responderle algo, éste sus labios reclamó en un beso ansioso, un beso que le devolvió el alma al cuerpo. El también quiso sentirla viva, allí a su lado.

Chaeyoung un paso dio al frente con los puños apretados dispuesta a cualquier cosa, pero Jiu la sostuvo del brazo con firmeza y negó con la cabeza como diciéndole (No lo hagas. No ahora). Si la mirada que le lanzó Chaeyoung a Jiu en ese instante hubiese sido una bala, la líder ya estaría en el piso muerta desangrándose.

Chaeyoung miró la escena frente a ella con dolor y rabia. Sus puños apretó y su corazón se encogió en su interior.

¿Cómo podía Mina besarlo a él cuando ese día se entregó dos veces a sus labios con tanto fervor?