The crown in between

Capítulo 73

— ¿Estás segura que no podemos hablar de esto luego?

— No, tiene que ser ahora.

Decidí ceder y cerré la puerta a mis espaldas antes de ofrecerle sentarse en uno de los sillones que se encontraban allí, yo me senté frente a ella.

— Esta bien, cuéntame.

— Antes que nada debes saber que estoy contigo y me quedaré en Cressida tanto como me necesites. ¿Está bien?

— Lo sé, Thebe, pero me estás asustando y honestamente prefiero que vayas al punto.

— Vale — respiró profundamente —. Esta es una teoría que  he tenido desde el minuto en el que me contaste de los ataques, y la he estudiado desde entonces, pero no te había dicho nada porque sería preocuparte de algo que tal vez fuese falso, y aún le digo teoría, pero hermana, honestamente no te lo diría si no estuviera tan segura.

— Okay.., ¿y qué es? — empezaba a sentir incertidumbre.

Venía de una montaña rusa de emociones de la que apenas me intentaba bajar y ya me estabas subiendo a otra.

— Cada hilo suelto me lleva a lo mismo, cada pregunta tiene su respuesta en el mismo lugar, cada una de ellas se resuelve en Damaris.

— ¿Damaris? Estas mal, Thebe, Damaris no tiene nada que ver con esto.

— Yo espero lo mismo, pero todo es muy claro, Al. Piensa un poco, puede que sea coincidencia, pero todo inició en cuanto Christopher se mudó a Cressida y ellos han sabido dar en puntos muy exactos, como los protocolos de seguridad, toda la información que se ha filtrado, la amenaza en el muro el otro día con la frase que insinuaba que yo estaba viva ¿quién sabe todas esas cosas? ¿Quien tiene acceso a los protocolos de seguridad del palacio y a quien le has contado todo con lujo de detalles?

— No no, Thebe. Se te fue la cabeza, no tiene ningún tipo de sentido lo que dices, Christopher lo único que ha hecho es amarme y a mi familia.

— En este momento te pido que dejes de ser la esposa de alguien, la hija de alguien o la hermana de alguien y solo seas la reina de Cressida, por favor, Alya, piensa bien, ¿no tiene ningún sentido?

Me quede en silencio a la vez que sentía mi sangre detener su curso, cada instante llegó a mi cabeza en milésimas de segundos, cada una de las veces donde Christopher me pedía perdón por lo que me había sucedido en la pierna, de todas las cosas que le dije y coincidencialmente eran las mismas que se usaban en nuestra contra, él nunca salió lastimado en ningún ataque...

Pensaba en la posibilidad porque me lo pedía mi hermana, pero creérmelo era otro tema, Christopher era la persona que amaba y sabia que me amaba, confiaba en él, además sería el futuro padre de mi hijo.

— Creo que son muchas coincidencias, Thebe, pero no creo que tengas fundamento suficiente para defender una teoría de esa magnitud.

— Lo entiendo, la razón por la que te lo digo es para pedirle autorización a la reina investigar la teoría, además no se si tenga que ver, pero a nivel público de la niñez de Christopher se sabe poco o nada, no hay fotos de él más pequeño, su primera aparición importante fue seis meses después de mi supuesta muerte y a partir de ahí ha sido el centro de atención en todo Damaris hasta que te conoció.

— No, es una pérdida de tiempo, Damaris no tiene nada que ver con esto, mucho menos Christopher, de su niñez no se sabe mucho porque no hay mucho que decir, fue tan normal como la tuya o la mía, además él tiene una relación complicada con su familia.

— ¿Cuando fue la última vez que fuiste a Damaris?

— Nunca he ido.

— ¿Nunca haz ido al país natal de tu esposo? ¿Ni a visitar su familia?