Capitulo 95

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—Como yo los veo, más que soldados todos ustedes son víctimas. Víctimas de una guerra innecesaria creada por un hombre cegado por su propio ser. Quiero que miren a su alrededor y se pregunten, ¿Todo esto era necesario? ¿Valió realmente la pena sacrificar tantas vidas por un puñado de armas? ¿Solo para alimentar la insaciable hambre de poder de un solo hombre y aún así fracasar?

Liliana señaló a los miembros de su familia.

—Miren bien. Aquí está la prueba del verdadero hombre que es vuestro rey. El hombre al que le juraron lealtad para "mantener y preserva* la paz y seguridad del reino... Los abandonó a ustedes, a sus propios hombres y a su propia familia. Los vendió a todos para conseguir tiempo de escapar. Por culpa de un hombre así, todos ustedes perdieron hijos, hermanos, amigos, padres. Ahora mismo yacen regados por todo el campo de batalla o incluso en el fondo del mar. ¿Realmente valió la pena tanto esfuerzo por nada?

Liliana suspiró y negó con la cabeza. Una vez más miró a los soldados.

—Seguramente muchos ya me habrán reconocido ya, lo notó en sus caras. "La princesa demonio" es como todos me conocen. La verdad es que los únicos demonios que yo veo son los que están aquí detrás de mí. —Liliana se giró y miró con clara molestia a los miembros de su familia presos.

Liliana se volvió a girar hacia los soldados Gliderianos

—Quiero que les quedé a todos muy claros. Aunque me gustaría, no puedo devolverles a sus familiares o amigos perdidos, incluso sus partes corporales perdidas. Pero, puedo prometerles una cosa. Vuestro sacrificio y esfuerzo no será en vano, pues gracias a esto me he dado cuenta de lo podrido que está el reino realmente.

Liliana tomó aire y se enderezó con firmeza.

—¡Soy la princesa Liliana Lancaster, cumpliré con lo que mi título conlleva por el bien del pueblo! ¡Me convertiré en la nueva reina de Glideric, y juro por mi honor y por los dioses, que no permitiré que la sangre derramada en este día sea desperdiciada! ¡Me aseguraré de que el responsable de esta masacre pague como es debido y cuando lo haga, dirigiré el reino hacia un futuro mejor! ¡El futuro que este país merece! ¡Un futuro próspero, seguro y duradero...! ¡Y si alguien, quien quiera que sea se quiere impedir que cumpla con mi palabra, que quede claro que yo misma lo mataré por traición! ¡No traición hacia mí, sino hacia mi pueblo! ¡Ustedes! ¡Todos aquí presentes! ¡Los que me escucharon son mis testigos, los dioses sabrán que hacer con mi alma si no cumplo con ello!

Aunque no hubo aplausos, ni celebraciones, sus palabras claramente tuvieron un gran impacto en los corazones y mentes de los presentes. Liliana dejó escapar un largo suspiró aliviada terminar, luego se giró hacia su familia y los miró con enojo.

—Todos sabrán lo que de verdad significa ser un monarca... No una mierda que solo quiere más y más para sí mismos. —Dijo casi tan audible para todos la escuchasen.

Liliana se acercó a Arthur, este le dió una pequeña sonrisa.

—Eso estuvo bien. —Dijo Arthur.

—¿De verdad?

Arthur asintió con la cabeza.

—Estoy muy orgullosa de usted, majestad. —Winston asintió con la cabeza.

Liliana suspiró mientras sonreía débilmente. La verdad es que todo esto la tenía cansada, pero se estaba esforzando a sí misma para no parecer débil.

—¿Que hacemos con ellos entonces? —Arthur miró a los miembros arrestados de la familia real.

—Solo arrestenlos, ya veremos qué hacer con ellos más tarde. —Dijo Liliana.

Rey De Reyes - Volumen 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora