Un Dragón bajo la tormenta

96: Un día difícil

No fue fácil, pero un mes después, Ginny y Ron Weasley fueron llamados al consejo de magos, finalmente, podría ser que no hubiera muchas pruebas en contra de ellos por el deseo, pero si, con Hermione como testigo del ataque de Ginny hacia ella…

Con mucho pesar, se habían reunido muchas cosas, entre ellas, se había descubierto que Ron había sido el que se había llevado el libro de la piedad que tenían guardado en el Ministerio…

Hermione no se quedó mucho tiempo dentro, comenzando a sentirse mal, no era fácil para ella recordar los hechos, solo Draco, Blaise, Tatum estaban dentro, mirando con ojos de puñales a los pelirrojos, Harry también estaba con el consejo de magos… sintiéndose descorazonado

Al menos, ni Ginny ni Ron negaron nada… al contrario, contaron absolutamente todo lo sucedido, hasta lo del deseo… hasta la muerte de Pansy a manos de esos espíritus de fuego que consternó a todos y que por supuesto, se investigaría al pensar en cierta instancia que ellos tuvieran que ver

Afuera de donde el juicio se llevara a cabo, estaban las mujeres, curiosamente no todas se sentían bien, Hermione había tenido que ir al baño por estar con mareos y fue a mojarse la cara acompañada por Luna

Al salir del baño, Luna observó que Blaise había salido un momento y se encontraba rodeado de las que eran madrinas de los Malfoy, al mirarlo rodeado de esas mujeres, Luna sintió una inexplicable punzada de celos y entornó los ojos, como que aquello no era la primera vez, su esposo estaba muy sonriente con ellas

-Oye Hermione, esas mujeres…

-¿Eh? – Masculló Hermy mirando a un costado apoyándose en la pared, aún no se sentía bien - ¡Ah! ¿No las recuerdas? Son las madrinas de mis hijos…

-Si pero… como que tienen muchas confiancitas ¿No?

-¡Ah! No, no… son inofensivas, no pienses mal de ellas, me han ayudado mucho, nos queremos y han fungido con fuerza en el cuidado de mis hijos

-Pues… no me gustan mucho… es más – tuvo un flash – Una de ellas quería darle un masaje a mi esposo… lo quería desnudo

-¿Cómo?

-Si… he tenido algunos recuerdos… ellas como se le resbalaban mucho a mi esposo

-No, no es eso Luna, son un poco… juguetonas… pero jamás se interesarían en meterse con un hombre con compromiso

-A lo mejor estaban esperando que no apareciéramos – Masculló Luna

-¡Que cosas dices!

-¿Y si es así? ¿Si pretendían quedarse con nuestros esposos?

-¡Por favor Luna, ellas son madrinas de mis hijos, fungieron como sus niñeras!

-Hay niñeras que se enredan con los esposos…

Hermione pensó que Luna estaba un poco exagerando, pero la rubia fue directamente hacia Blaise cruzándose de brazos y mirando a las mujeres, ellas le sonrieron, pero al notar su seriedad, las tres se hicieron a un lado… por aquello de que si mataba a su esposo no las salpicara la sangre

-¿Qué te pasa mi amor? ¿Por qué tan seria?

-¿Qué quieren contigo ellas? ¿Ofrecerte sus servicios como niñeras?

Blaise miró a Luna sorprendido ¡Vaya! Que ella lo celara era cosa de otro mundo, porque nunca lo hacía, al contrario, siempre era tan tranquila, tan calmada, que no pudo evitar sonreír y ella se puso más seria

-¡Blaise!

-¿Por qué estás celosa mi amor? ¡Es tan poco común en ti! ¿Qué te pasa?

-¡Es que recordé que ellas se te andaban resbalando, una de ellas quería verte desnudo!