¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Feli estaba en medio de un stream tranquilo, riendo y conversando con su chat, que ese día estaba particularmente activo. Los seguidores le hacían preguntas sobre su música, sus proyectos, y en general, mantenían una energía animada. Pero de pronto, los mensajes en el chat comenzaron a cambiar de tono.
"¡Feli, ve al insta de Tini!", "Mirá las historias de Tini", "Feli, entrá a ver yaaaaaa", aparecían en repetición constante.
Feli, confundida y con curiosidad, hizo una pausa y leyó los comentarios.
—Gente, ¿qué onda? ¿Qué tiene Tini? ¿Qué subió? —preguntó con una risa ligera.
Sin decir más, abrió Instagram en su teléfono y buscó el perfil de Tini, sintiendo el suspenso que generaba la expectación de sus seguidores. Al abrir las historias, Feli se quedó completamente inmóvil al ver la imagen: su novia, Victoria, abrazando a Tini de una forma más cariñosa de lo que esperaba. Victoria tenía una gran sonrisa y parecía realmente feliz, y aunque Feli sabía que estaban colaborando en algo, ese nivel de cercanía le dolió.
—Ah, miren... —dijo intentando mantener la compostura—. Debe ser una colab, ¿no? Ya saben cómo son estas cosas, gente.
Sin embargo, su voz temblaba apenas perceptiblemente. Y aunque intentó distraerse respondiendo otros comentarios, no podía evitar volver a mirar la foto en su teléfono, repasando una y otra vez la imagen de Victoria y Tini. Su pecho se apretaba, y sus ojos comenzaban a llenarse de lágrimas. "No puedo llorar aquí, no puedo hacer esto frente a ellos", pensó.
Apenas unos minutos después, nuevos mensajes en el chat hicieron que Feli tragara en seco: "¡Victoria subió fotos con los bikinis de Tini!".
Esta vez, la traición imaginaria se sintió aún más pesada. Las imágenes en su cabeza empezaron a girar: Victoria, riendo con Tini, luciendo sus bikinis, mientras ella estaba aquí sola, intentando disimular. Al borde de las lágrimas, Feli forzó una sonrisa frente a la cámara.
—Gente, voy a ir al baño un segundo —dijo en tono despreocupado, tratando de sonar natural.
Se levantó y caminó hacia el baño con pasos firmes, pero al cerrar la puerta y mirarse en el espejo, la máscara cayó. Los ojos se le llenaron de lágrimas que no pudo contener, y una sensación de vacío y celos la invadió completamente.
Después de unos minutos, se recompuso lo mejor que pudo, volvió frente a la cámara y dijo en voz baja:
—Chicos, creo que voy a cortar el stream. No me siento bien, ando con el periodo y... bueno, creo que necesito descansar.
Los seguidores lo tomaron con comprensión, deseándole que se cuidara, y Feli apagó la transmisión. En cuanto cerró la computadora, se dejó caer en la cama, y las lágrimas empezaron a brotar con libertad. Recordaba los comentarios que Victoria solía dejar en las publicaciones de Tini, siempre cariñosos, siempre cómplices, y las respuestas de Tini, igual de amorosas. "¿Por qué tenía que ser así?", pensaba, sintiéndose más insegura de su relación.