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Victoria estaba sentada en la cama, con la espalda apoyada contra la pared y las piernas estiradas. Tenía el celular de Feli entre las manos, deslizando el dedo por los chats. No era raro que lo hiciera, pero esta vez había algo que le había llamado la atención: un contacto guardado como "Mi Amor🌹" Sus ojos se estrecharon mientras leía los mensajes: "Te extraño, baby." "Me moría por verte hoy😭" "Sabés que siempre serás mi favorita.💖"
Victoria respiró hondo, tratando de no explotar, pero la tensión en su mandíbula la delataba. Estaba completamente concentrada en descifrar qué significaba aquello cuando escuchó el sonido de la puerta del baño abrirse.
Feli salió con el cabello mojado, envuelta en una toalla corta que apenas cubría sus muslos. Al verla en la cama, con su celular en mano y esa expresión de intensidad, sonrió para sí misma. Sabía perfectamente qué estaba haciendo Victoria. -¿Otra vez revisándome el celular? - preguntó con un tono travieso, caminando hacia la cama. Victoria no levantó la vista. —¿Quién es "Mi Amor🌹"? —preguntó con un tono seco y cargado de celos. Feli rió suavemente, ignorando la pregunta. Subió a la cama y, sin previo aviso, se colocó a horcajadas sobre las piernas de Victoria, inclinándose hacia ella. —Vic, ¿no te cansas de lo mismo? — susurró, acariciándole la mandíbula con los dedos. Victoria apenas reaccionó. Sus ojos seguían fijos en la pantalla. —No me cambies el tema, Feli. -Su tono era serio, pero Feli podía sentir cómo su respiración se aceleraba ligeramente al tenerla tan cerca. Feli decidió llevar el juego un paso más allá. Sujetó el rostro de Victoria con ambas manos y empezó a besarla lentamente, rozando sus labios, dejando pequeños mordiscos juguetones. Pero Victoria, aunque claramente afectada, se negó a ceder.
—Feli, pará... Estoy hablando en serio. -Intentó apartar el rostro, pero las manos de Feli lo mantuvieron en su lugar. —Y yo también, Vic. —Feli sonrió, deslizando sus labios por el cuello de Victoria, dejando pequeños besos húmedos que la hicieron estremecer.
Finalmente, Victoria dejó el celular en la cama y sujetó a Feli por la cintura, obligándola a detenerse. Sus ojos azules ardían de celos y deseo. —No pienso dejar esto pasar. ¿Quién es "Mi Amor🌹"? —preguntó con firmeza, aunque su voz sonaba más ronca de lo habitual. Feli rodó los ojos, divertida. -Es flor, mi hermana por algo hay tremenda flor. —Le dio un beso en la mejilla y agregó-: Siempre nos hablamos así, son bromas.— Victoria la miró con escepticismo. —¿Bromas? ¿Así de cariñosas? —Sí, mi amor. —Feli enfatizó el apodo, divertida por la situación—. Ahora, ¿vas a seguir reclamando o vas a aprovechar que estoy encima tuyo?
Victoria frunció el ceño, pero no pudo evitar que una sonrisa tirara de las comisuras de sus labios. —Sos imposible, Feli. —Y vos sos insoportablemente celosa. —Feli le mordió el labio inferior antes de besarla profundamente. Victoria, finalmente rindiéndose, la tomó por la cintura y la atrajo más cerca. —No puedo evitarlo —murmuró contra sus labios—. Sos mía, y no voy a compartirte con nadie. Feli sonrió mientras sus manos se deslizaban por los hombros de Victoria. —Siempre lo fui, Vic. No tenés nada de qué preocuparte. Victoria no pudo resistirse más. El peso de Feli sobre ella, el calor de su cuerpo y el roce de sus labios la habían llevado al límite. Con un movimiento firme, tomó a Feli por la cintura y la tumbó de espaldas sobre la cama, dejando caer el celular a un lado sin importancia. —¿Así que te gusta provocarme, nena? —murmuró, inclinándose para besarla con intensidad, sus labios reclamando los de Feli con una mezcla de deseo y posesión. Feli dejó escapar un pequeño gemido contra sus labios, enredando los dedos en el cabello largo y rojizo de Victoria. —Me encanta cuando te ponés así, Vic... —murmuró, su voz apenas un susurro que hizo vibrar a Victoria. Las manos de Victoria comenzaron a recorrer su cuerpo, trazando el contorno de su figura con calma, casi como si quisiera memorizarla. La toalla que Feli llevaba puesta cayó con un descuido, dejando su piel completamente expuesta. —Dios... —Victoria susurró, sus ojos recorriendo a Feli con adoración y deseo—. Sos tan hermosa, Feli... No sé cómo me aguantás siendo tan celosa. Feli soltó una risa suave, sus ojos brillando de diversión y deseo. —Porque tus celos me demuestran cuánto me querés —dijo mientras sus manos deslizaban por los brazos tatuados de Victoria. Su tono cambió a uno más juguetón—. Además, me encanta cómo terminamos después de que te ponés así. Victoria sonrió con una mezcla de picardía y ternura, inclinándose para besar su cuello. Sus labios dejaron un rastro cálido y húmedo mientras bajaban lentamente por la clavícula de Feli, arrancándole un gemido más alto cuando encontró un punto especialmente sensible. —Vic... -susurró Feli, arqueando la espalda mientras sus manos buscaban el cuerpo de Victoria, clavando suavemente las uñas en su espalda. —¿Qué pasa, baby? ¿Te gusta esto? — preguntó Victoria con una sonrisa traviesa, mientras dejaba que sus labios y manos continuaran explorando. Feli respondió con un gemido suave, mordiendo su labio inferior mientras sentía cómo el cuerpo de Victoria la hacía temblar. —Sabés que sí... —murmuró, entrelazando sus piernas alrededor de las caderas de Victoria para atraerla más cerca. Las respiraciones se volvieron más pesadas, el cuarto lleno de suspiros y pequeños gemidos que escapaban sin control de los labios de Feli. Victoria, completamente en control, dejó que sus manos bajaran hasta sostener firmemente las caderas de Feli, marcando el ritmo de cada movimiento. Feli se estremeció, soltando un gemido más alto cuando Victoria la besó justo en el lugar donde el cuello y el hombro se encontraban. —No te detengas... -susurró, su voz cargada de deseo, mientras sus dedos se deslizaban por el tatuaje de dragón que recorría la espalda de Victoria, trazándolo como si quisiera grabarlo en su memoria. Victoria alzó la mirada, sus ojos azules llenos de intensidad. —Nunca me canso de vos, Feli... Sos mía. Siempre mía. —Siempre tuya... —respondió Feli entre suspiros, antes de que Victoria volviera a besarla, esta vez más profundo, reclamando cada centímetro de su cuerpo con una mezcla de pasión y ternura. Entre susurros, caricias y gemidos que llenaron la habitación, ambas se dejaron llevar, olvidándose de todo excepto del amor y el deseo que compartían.
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No tengo ideas para mañana así que creo q mañana no hay cap😭 Espero este cap les guste🫶🏻