Pasó un largo silencio.
Lee Sa-young miró fijamente la mano extendida hacia él, una mano endurecida por los callos, una mano que una vez se había derretido por el veneno pero que no mostraba signos de recuperación. Los labios secos preguntaron:
"¿Puedes hacerlo?"
La respuesta llegó inmediatamente.
"Lo haré."
“…”
“Ya he fracasado dos veces, pero creo que de los fracasos se puede aprender algo”.
“…”
—Estoy seguro de que tampoco quieres que tus esfuerzos sean en vano, ¿verdad?
“…”
“Entonces ayúdame.”
Lee Sa-young no respondió, pero pude adivinar lo que estaba pensando.
Esta es una persona que se aferró al mundo en busca de una tercera oportunidad. No querría desperdiciar esta oportunidad que apenas tuvo. En silencio, Lee Sa-young inclinó la cabeza. No parecía tener la intención de agarrar la mano, por lo que Cha Eui-jae la retiró torpemente.
“Respóndeme sólo una cosa.”
"¿Qué?"
—En ese mundo, ¿por qué crees que él tenía dolor?
“…”
“Nunca me dio una respuesta. Ni siquiera en el momento de la muerte…”
La razón por la que estaba tan enfermo en el segundo mundo. La mente de Cha Eui-jae cambió. Hong Ye-seong lo había dicho antes. Que en el primer mundo, Cha Eui-jae era tan poderoso que incluso después de usar el reloj, no se rompió.
Curiosamente, Cha Eui-jae sintió que sabía la respuesta. No, la sabía. Como si alguien hubiera grabado el conocimiento en su mente, un hecho que no conocía salió a la superficie. Abrió la boca sin darse cuenta.
“Cuando rebobiné el tiempo en el primer mundo, me convertí en el eje”.
“…”
“Una persona que se convierte en el eje está atada por limitaciones hasta que el mundo anterior es completamente aniquilado. Su esperanza de vida se va reduciendo hasta que el mundo es destruido. Esa fue la penalización del reloj”.
“…”
“Aun así, gracias a mi poder, aguanté más… pero moriría en cuanto regresáramos. Por el rebote.”
…¿Eso fue todo?
“Ajá…”
Lee Sa-young dejó escapar un leve zumbido y bajó la cabeza. Se cruzó de brazos y murmuró.
“Eso es lo que quiso decir Hong Ye-seong cuando dijo que lo arregló…”
Hmm, ¿supongo que sí?
Cha Eui-jae recordó los fragmentos dispersos que de repente surgieron. Los recuerdos, algunos propios y otros no, estaban mezclados y desordenados. Lee Sa-young parecía estar a punto de decir algo, por lo que Cha Eui-jae rápidamente levantó una mano para detenerlo.
—¡Oye, oye! Espera, quédate en silencio un segundo.
Normalmente, si alguien se convirtiera en el eje del mundo...
“…”
Debería haber algún tipo de pista, ¿no? Cha Eui-jae rápidamente comenzó a ordenar sus recuerdos. Desafortunadamente, la mayoría de ellos parecían recuerdos triviales y desordenados que podían descartarse.
ESTÁS LEYENDO
The hunter's gonna lay low
FantasíaEl cazador quiere vivir tranquilo Sinopsis: El cazador Cha Eui-jae, quien fue enviado a sellar una grieta que apareció sobre el Mar del Oeste, fue arrojado cuando cerró la grieta y recuperó el sentido en un vertedero de basura. Sintiendo un hambre e...
