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¿Cuánto hace que no eres feliz? Y te hablo de esa felicidad que dibuja sonrisas sinceras en tu cara, la que no se puede contener, ni expresar con palabras. La misma que tan solo puedes vivir en la piel, la que te hace brillar los ojos de ilusión, de magia, de alegría. Dime, ¿cuánto hace que no te besan? Pero besar bien, no solo los labios y la boca. Te hablo de besar el alma, de llegar con un beso a lo más profundo de tu ser, de todo lo que escondes detrás de esa mirada triste y gris. Te hablo de esos besos que te elevan hasta la luna, de los que no te dejan tocar el suelo, de los que hacen temblar al reloj y detener el tiempo. Los mismos que te dejan las infinitas ganas de más, de los que te ponen los vellos de punta, de los que llenan y vacían a la vez, de los que son veneno y antídoto al mismo tiempo. De esos besos que hacen que las mariposas de tu estómago salgan a volar, de los que te prometen noches de insomnio, de los que te quitan el apetito. ¿Cuánto hace que no te desnudas ante nadie? Y no, no hablo del simple acto de quitarte la ropa. Eso lo puedes hacer con cualquiera. Tampoco te hablo de tener sexo. Me refiero a cuanto hace que no desnudas tu alma ante alguien y le enseñas todos tus miedos. Háblame de la última vez que hablaste con alguien de todos tus sueños, de tus inquietudes, de lo orgullosa que eres, de tus estúpidas ideas, de lo que necesitas, de lo que olvidas, de lo que recuerdas a diario, de tus errores y aciertos, de tu futuro, de tu pasado, de lo que te hace llorar, de mi, de como eres realmente. ¿Cuánto tiempo hace que no eres tu misma con nadie? ¿Cuánto tiempo hace que dejaste de vivir para empezar a sobrevivir? ¿Cuánto tiempo hace de nosotros? Yo hace tiempo que llegué a la triste conclusión de que después de ti habrán otras chicas. Pero que con ninguna de ellas podré llegar a ser tan feliz como lo fui contigo. Que no podrán ver completamente desnuda mi alma, ni me besarán hasta el rincón más profundo de mi ser. Ni tan siquiera serán como tú, y mucho menos podré ser de nuevo yo mismo.

Poesía para días grises.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora