Junto al río Támesis (Emma Watson y Rupert Grint) [Grintson]

El ganador

-Will...

-¿Qué?

-¿Estás despierto?

-Ahora sí. ¿Pasa algo, Helena?

-Yo...

-Si no quieres que duerma contigo, dímelo.

-No es eso...

-¿Entonces?

-Pues... Quería que me besaras antes de dormir.-Dijo colorada.

Él sonrió y se acercó a darle un beso.

-¿Sabes qué hora es?

-Falta poco para que sean las diez. Tenemos que levantarnos...

-Pero...

-Tampoco yo quiero levantarme, Helena, pero Julie dijo que a las diez debíamos desayunar. Y si se le ocurre venir a bucarte a ti y a Ryan y nos ve a ambos aquí tendremos problemas.

-Está bien.

Él sonrió y volvió a besarla.

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-Mmm...

-¿Vas a seguir ignorándome? Si no te vistes morirás de hipotermia, Emma. Estás helada. Ven aquí.-Rupert la abrazó y comenzó a frotarle los brazos y la espalda.

Ella no abrió los ojos, sólo sonrió y se acurrucó más en sus brazos.

-¿De veras piensas seguir ignorándome?

-Tal vez...

-Te dije ayer que ya estás grande. Tienes, o tendrías, que vestirte tú sola. No debería meterme. Pero no sé por qué lo hago... Debe ser porque estoy irremediablemente enamorado de ti.

Ella sonrió e intentó besarle los labios, pero sólo rozó su mentón.

-¿Hace mucho que no te afeitas?

-¿Qué, te molesta?

-Un poco. Es muy extraño...

-Tal vez si abrieses los ojos en vez de intentar ignorarme y adivinar dónde estoy al mismo tiempo, no te molestaría la barba.

Ella rió.

-No puedo abrir los ojos.

-Sí que puedes, tienes que despegar los párpados.

-Muy gracioso. Hablo en serio, no puedo hacerlo. Es como si los tuviera pegados.

-¿En serio? Déjame ver...

Rupert se acercó a su rostro. Emma aprovechó para tomarlo por las mejillas y besarlo.

-Emma, tus ojos...

-Creo que se curaron mágicamente. Mira-Dijo ella abriendo sus ojos y mirando los labios de Rupert antes de lanzarse a por ellos de nuevo.

-Eres muy mentirosa. Mi mentirosilla.-Dijo Rupert sonriendo y acariciando su nariz.

Ella sonrió.

-Te traeré algo de ropa.

Rupert buscó en los bolsos y sacó unas prendas de ropa para Emma. Se las lanzó a ella y se sentó a su lado.

Emma sonrió y lo miró haciendo un puchero.

-¿Qué?

-¿No vas a ayudarme?

-Em, tienes veintiséis, ya estás grande para...-Emma lo tomó de la nuca y lo besó.

Rupert rió.

-Tal vez pueda ayudarte un poquito...

Ella sonrió.

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-Yendo al grano, quien encuentre el tesoro será el ganador. Will y Helena han dicho que ellos quieren ocultarlo, para que nadie que esté en el juego sepa dónde está.-Dijo Julie.-El tesoro es un simple papel donde está escrito que si lo lees es porque eres el ganador. ¿Comenzamos?

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-¡A la derecha! ¡Allí, sobre el árbol!

-Aquí está. La última pista. 'DONDE ESTÉ TU TESORO ESTARÁ TAMBIÉN TU CORAZÓN'. ¿Eso qué quiere decir? Es una frase de Harry Potter. ¿Cómo se supone que nos guía a una pista?

-Tienes que reflexionar sobre ella. Pensemos... tesoro, corazón, amor... ¡Lo tengo!-Dijo Emma.-¿A quién aman?

-A Oliver.

-A Domhnall.

-A Mark.

-A Dan, Will, Arthur y Daphne.

-A Dan, Bonnie y Will.-Dijeron los pequeños.

-A ti y a Rupert. Y a Helena.-Dijo Ryan.

-Y yo amo a Rupert y a Helena y Ryan. ¡Es muy obvio! ¿Cómo no pensé en eso antes?

-Emma, haz el favor de explicarnos a los simples mortales de qué demonios estás hablando.-Dijo Bonnie.

-Los chicos. Ellos son nuestro tesoro. Ellos son nuestro corazón. El tesoro está oculto con ellos. La fogata. El claro. Allí hay que ir. Abrimos nuestros corazones allí, cuando pedimos los deseos para el nuevo año. Allí está el tesoro.

-Vamos, entonces.

Las chicas hallaron el tesoro entre los leños apagados de la fogata.

-¿Han vuelto a ganar?-Preguntó Dan, saliendo de entre los árboles.-Chantaje puro. ¿Quién les dio la solución?

Los demás hombres salieron de la espesura. Las chicas se acercaron a ellos.

-Ustedes. Nuestros tesoros. Nuestros corazones. Ustedes son la respuesta. Ustedes son la solución.-Dijo Bonnie antes de besar a Dan, y que sus compañeras la imitaran con sus respectivos novios.

Will y Helena observaban desde un árbol. Estaban orgullosos. Su familia había adivinado.

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Lo crean o no, el juego de atrapar la bandera ocurrió exactamente igual a la primera vez, con lo que los chicos perdieron.

-Y, como convocadoras oficiales de la reunión Weasley, nos autodeclaramos campeonas.-Dijeron Bonnie y Julie.

Todos rieron, incluso los hombres. Lo habían pasado muy bien. Tenían que juntarse más seguido. Nuevas noticias y parejas se habían conformado allí. Todo era muy bello y armónico en la maravillosa familia pelirroja. Y ahora ocurriría algo que haría que todo cambiase: La boda de Rupert Grint y Emma Watson.