Mi mirada va de Naruto a Sasuke, y luego a Naruto. Cuando me topo con su triste mirada azulada, noto que el brillo que vi la primera vez, desaparece. Las palabras no salen de mi boca y él... sólo asiente con la cabeza y se aleja. Mis piernas no responden y siento un dolor en el pecho. «¿Por qué, si quiero a Sasuke?».
—Ese tonto nos interrumpió —dice Sasuke y sujeta mi mano.
—Ese “tonto” es mi mejor amigo —suelto sin pensar.
Dejo a Sasuke atrás y sigo mi instinto de correr tras mi mejor amigo. Lo alcanzo dos calles después del lugar de nuestro encuentro.
—¡Naruto —lo llamo—, espera!
Él se detiene y llego a su lado. Estamos a mitad de la calle, rodeados de personas. Realmente, preferiría un lugar más privado para hablar.
—¿Qué? —se gira hacia mí con brusquedad.
—Yo...
—¿Por qué lo haces? —me interrumpe—. Hace un mes, prácticamente me dijiste que me querías; ahora, ¡te encuentro besándote con Sasuke!
La gente nos mira y siento una gran vergüenza.
—Vayamos a un lugar más privado, por favor —ruego.
—No, ______ —se niega y más personas nos prestan atención.
—¡Dios mío! —susurra alguien.
—Son esos dos —dice otra persona.
—La hija de la Viajera —me señalan.
—Y el niño del Kyuubi —dice otra persona.
—¿Qué ocurre? —susurra alguien más.
Siento las miradas de todas las personas a mi alrededor. Me señalan y me temen. Siento su odio y el miedo. «¿En serio esto ha sentido Naruto?».
—Dime, ______ —me llama Naruto, haciendo que ignore a los demás—, ¿qué pasa entre tú y Sasuke?
—¡El último Uchiha! —señala una mujer entre las personas que caminan a nuestro lado.
—¿Qué se traerá esa niña?
Las voces que eran silenciadas en el pasado, gritan ahora. ¿Por qué no dejan de resonar en mi cabeza? ¿Qué les he hecho? ¿Por qué me temen?
Cuando ya no soporto los murmullos y la penetrante mirada de Naruto, grito:
—¡Sasuke y yo somos novios!
Los murmullos cesan y pareciera que sólo estamos Naruto y yo, en medio de una calle solitaria, bajo un cielo azul como sus ojos.
—Ya veo —susurra y baja la mirada.
En el suelo, noto que algo cae: una lágrima que escapa de sus ojos.
—¿Cómo es que tus sentimientos por mí desaparecieron?
Siento un dolor en el pecho y no evito decir la verdad:
—En un mes, todo puede cambiar —digo con un hilo de voz.
—Pero no el amor —me mira y noto sus ojos cristalizados.
—¿Por qué dices que no quiero a Sasuke? —me ofendo al entender sus palabras.
—¿Por qué estás con él?
—¡Porque lo quiero!
—¿Ah, sí? —pregunta con incredulidad.
Me toma de la mano y no puedo negarme. Dejo que me lleve hacia el bosque, lejos de las personas; le agradezco en silencio. Pero mis agradecimientos no duran mucho, ya que cuando estamos solos, me toma de la nuca y acerca su rostro al mío. Planta sus labios en los míos. No hago nada para detenerlo. Una corriente eléctrica recorre mi cuerpo y, tengo el impulso de tomar su mejilla, pero me resisto. Cuando se aleja, me mira directamente a los ojos.
—Dime que no sentiste algo con ese beso y te dejaré —dice.
Las palabras no salen de mi boca. No reacciono y, como la primera vez, me encuentro paralizada. Aquella vez donde también me besó de improvisto...
«Se acerca lenta y peligrosamente. Mi corazón late demasiado rápido como para contar los latidos. Cuando está a menos de cinco centímetros, susurra:
—Me gustas.
Y después, planta nuestro primer beso en aquel diminuto cuarto con vista al océano. El beso es inexperto. Él solo mantiene sus labios pegados a los míos mientras que yo evito respirar. Cuando ya no soporto más sin aire, lo alejo de mí. Me mira a los ojos por varios segundos con una sonrisa, pero estoy tan paralizada como para devolverle el gesto. Él, al ver que no hago nada, cambia su alegre mirada por una triste.
—Lo entiendo —dice al cabo de unos segundos en silencio—. Solo no cambiemos, ¿sí?».
Como esa vez, estoy paralizada y no hablo; como esa vez, el beso fue inesperado. Pero esta vez, la razón es diferente. Esta vez, él quiere alejarme de Sasuke. Esta vez, él me demuestra que sólo me quiere para él. Esta vez, no sé qué decir.
—No dejaré a Sasuke —logro articular.
Él se aleja de mí y tira de su cabello, demostrando frustración.
—Lo necesito y él me necesita. Créeme que tú estás bien, solo —afirmo, no muy convencida.
Él asiente y veo otras lágrimas salir de sus ojos. «Como lo vea derramar una más, me estallará el corazón». Decide alejarse y, antes de cruzar y perderse entre los árboles, me dice:
—Necesitar y querer son cosas distintas, así como lo fácil y lo correcto. Define tus conceptos para esas palabras antes que nada.
Sus palabras retumban en mi cabeza aún cuando ya se ha ido. El cielo azul se convierte en naranja y el ambiente se torna más frío. No puedo caminar, así que me dejo caer al césped. Me recuesto y dejo que el gélido aire inunde mis pulmones varias veces. Hasta que mi respiración se altera y se vuelve entrecortada. El dolor en mi pecho se agranda y el nudo en mi garganta se expande. «¿Por qué me siento así? ¿Acaso no estoy con Sasuke porque lo quiero? ¿Qué significa necesitar y querer? ¿Y fácil y correcto? ¿Cuáles son mis conceptos?».
Cierro mis ojos, sin importarme que esté a medio bosque y sola. «Ya no importa», me digo mentalmente.
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Una Llama Congelada
FanficUn tonto. Un amargado. Un impuntual. Tres varones que eran mis personajes favoritos de una historieta. Los tres lograban que mis días tuvieran una pizca de felicidad. Pero, sin saber por qué, mis días no sólo se volvieron plenos de felicidad, sino q...