La venganza de los ex

CAPITULO 27: "El accidente #2"

Observo a Ryan pasar la calle como si fuera un modelo, parece que fuera la propaganda de una loción masculina donde el hombre pasa y todos lo voltean a ver, mi cabeza comienza a imaginar una música electrónica con cada paso de Ryan y cada mirada que le dan.

Que detestable, parece que tuviera efectos secundarios espantamos a Sabrina pero expandimos su lista de conquista. No le va a durar mucho porque yo—

— ¡LEAH! —Grita Alan.

Cuando reacciono lo siguiente que veo pasa muy rápido, estoy parada a mitad de la carretera con un auto blanco viniendo hacia mí.

Alan me pone sus brazos sobre mi estómago y me jala, choco contra su pecho y logro ver el auto que pasa velozmente por encima de mis narices.

Me voltea y me mira molesto— ¿POR QUÉ NO VES DONDE CAMINAS? ¡CASI TE ATROPELLA ESE AUTO!—vocifera.

Pestañeo un par de veces procesando lo que acaba de pasar.

Alan respira hondo —Tal vez... Seguir a Ryan no sea buena idea, estás obsesionada con él. —Dice más calmado.

—Fue un accidente, estaba en las nubes pero no por eso debemos descuidar a Ryan. —Respondo y comienzo a caminar, me aseguro de mirar a ambos lados y cruzo a la calle del frente donde camina Ryan.

Camino rápido para no perderlo de vista, Alan me llama pero no lo ignoro para evitar que cambie de opinión. Ryan cruza en la siguiente esquina.

—Ni siquiera has visto a Ryan con otra chica que no sea Malía. —Dice Alan a mis espaldas.

Cuando volteo me detengo. Un poco más a la distancia Ryan está hablando con una chica de cabello castaño oscuro en la puerta de un salón de belleza.

— ¿Te parece suficiente? —Me dirijo a él y se queda callado.

—Es un cerdo. —Digo. Paso una mano por mi cara —Sabes qué mejor salgamos de aquí —Le digo a Alan y comienzo a caminar.

Camino hasta llegar al parque central, volteo y puedo ver que  Alan  esta al otro lado de la carretera serio y cruzado de brazos. Le hago un gesto para que venga pero no lo hace, entonces doy media vuelta y comienzo a caminar.

El parque tiene 5 entradas y cada una conduce hasta una enorme fuente circular, está decorada con varios tipos de árboles y flores, este obviamente es mucho más grande que el parque que está por mi casa aunque no está muy lejos de este.

Me distraigo observando a un señor con la guitarra, a esta hora hay varios transeúntes pero el parque parece estar vacío, confirmo si Alan esta donde lo dejé pero no hay rastro, comienzo a buscarlo por los negocios que están en la otra calle y lo que observo es a Ryan viniendo hacia mí.

No puede ser...

Camino un poco y me llama pero lo ignoro, unos momentos después ya está corriendo hacia mí.

—Ey tú—Dice cuando está cerca.

No le respondo y sigo caminando. Desde aquí percibo su loción, le da un toque más atrayente de lo que Ryan es.

Camino incómodamente con Ryan, Alan nos alcanza y se hace en medio de nosotros, caminamos en silencio yo hablando conmigo y ellos con la vista al frente.

—Oye Leah, ¿Recuerdas esa banca de allá? —Señala una banca de madera del parque central ubicada cerca de la fuente.

Lo odio.