Maratón 1/?. Comenten si quieren otro 😉💛🍃.
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Cuando salgo, momentos después, Taylor está esperando en la puerta de la clínica.
-Señorita Sevilla.-saluda formalmente.
-Taylor.-asiento en respuesta, y juntos no dirigimos a la fotocopiadora.
No me siento tan cómoda con Taylor como con Robert. Continuamente me vigila la calle mientras caminamos por la cuadra. En realidad me pone más nerviosa, y me encuentro a mí misma imitando sus acciones.
Busco los folletos en la fotocopiadora de unas cuadras, y regreso a la clínica. Cuándo veo en mi despacho logro ver qué una caja nueva ha llegado y tengo que decirlo, estoy asustada de qué tenga dentro.
Ignoro la existencia de la pequeña caja con un moño en la mesa y me dirijo a la oficina de Benicio, llevando conmigo uno de los panfletos, sus ojos se iluminan, y no sé si es por mí o por el folleto. Escojo creer que es el anuncio.
-Se ven geniales, Karol.-los revisa ensoñadoramente.-Sí, buen trabajo. ¿Verás a Ruggero esta noche?-sus labios se curvan mientras lo menciona.
-Sí. Vivimos juntos.-es casi verdad. Bueno, lo hacemos por el momento. Y he accedido a mudarme, así que no es más que una mentira blanca. Espero que sea suficiente para rechazarlo.
-¿Se negaría a dejarte venir a tomar una copa rápida esta noche? ¿Para celebrar nuestro viaje a Nueva York?
-Tengo un amigo que viene de visita esta noche, y saldremos todos a cenar.-Y estaré ocupada cada noche, Benicio.
-Ya veo.-suspira, exasperado.-¿Quizás cuando volvamos de Nueva York, hum?-levanta una ceja con expectación, y su mirada se ensombrece sugerentemente.
Oh, no.
Sonrío, sin compromiso, ahogando un estremecimiento.
-¿Te gustaría algo de té o café?-le pregunto.
-Café, por favor.-su voz es baja y áspera, como si estuviera pidiendo algo más.
Mierda. No retrocederá. Puedo verlo ahora. Oh... ¿Qué haré?
Dejo salir un suspiro de alivio cuando estoy fuera de su oficina. Me pone tensa. Ruggero tiene razón sobre él, y parte de mí está molesta porque Ruggero tiene razón sobre él.
Me siento en mi escritorio y suena mi iPhone, un número que no reconozco.
-Karol Sevilla.-hablo.
-¡Hola Sevilla!-la voz de Jorge me atrapa justo con la guardia baja.
-¡Jorge! ¿Cómo estás?-casi me atraganto del deleite.
-Contento de estar de vuelta. Estoy repleto de sol y ponche de ron, y mi hermana pequeña enamorada sin remedio del grandote. Ha sido un infierno, Karol.
-¡Sí! Mar, arena, sol y ponche de ron suena como el infierno, Jorge.-río.-¿Dónde estás?
-Estoy en el aeropuerto, esperando mi equipaje. ¿Qué estás haciendo?
-Trabajando. Sí, estoy felizmente empleada.-respondí a su sorpresa.-¿Quieres venir a buscar las llaves? Puedo encontrarte luego en el departamento.
-Suena genial. Te veré en unos cuarenta y cinco minutos, quizás una hora. ¿Cuál es la dirección?
Le di la dirección de la clínica.
-Te veré pronto, Jorge.
-Nos vemos.-dice, y cuelga.
¿Qué? No, ¿Jorge también? Y me doy cuenta de que ya pasado una semana con Michael. Rápidamente envío un mensaje de texto a Ruggero.
Un poco más tarde, mi teléfono vibra. Es Nancy en la recepción.
-Hay un chico realmente lindo que quiere verte. Debemos salir a tomar algo alguna vez, Karol. Seguro conoces hombres guapos.-susurra con complicidad a través del teléfono.
¡Jorge! Tomando las llaves de mi bolso, me apresuro al recibidor. Santa mierda, cabello oscuro y claro por el sol, un bronceado para morir, y una mirada brillante me mira desde el sofá de cuero blanco. Tan pronto como me ve, su boca cae abierta, y está de pie viniendo hacia mí.
-Wow, Karol.-me frunce el ceño mientras se inclina para abrazarme.
-Te ves bien.-le sonrío.
-Tú te ves... wow... diferente. Mucho más sofisticada. ¿Qué sucedió? ¿Cambiaste tu cabello? ¿Ropa? No lo sé, Sevilla, ¡pero te ves ardiente!-me sonrojo furiosamente.
-Oh, Jorge, es mi ropa de trabajo.-digo mientras Nancy mira con una ceja arqueada y una pequeña sonrisa.-¿Cómo estuvo Chile?
-Divertido.
-¿Cuándo vuelve Valen?
-Ella y Michael vuelan el viernes. Van en serio el uno con el otro.-Jorge rueda sus ojos.
-La he extrañado.
-¿Sí? ¿Cómo has estado con el Sr. Millonetis?
-¿Sr. Millonetis?-suelto.-Bueno, ha sido interesante. Nos llevará a cenar esta noche.
-Genial.-Jorge parece genuinamente complacido.
¡Uf!
-Ten.-le doy las llaves.-¿Tienes la dirección?
-Sí, nos vemos.-se inclina y besa mi mejilla.
-¿La expresión de Michael?
-Sí, como que se te pega.
-Lo hace. Nos vemos.-le sonrío mientras toma su gran mochila de al lado del sofá y sale del edificio.
Cuándo giro, Benicio me está mirando de un lado del recibidor, su expresión ilegible.
Le sonrío brillantemente y vuelvo a mi escritorio, sintiendo sus ojos en mí todo el tiempo. Esto comienza a ponerme nerviosa. ¿Qué hago? No tengo idea. Deberé esperar a que vuelva Valen. Pronto idearía un plan. El pensamiento disipa mi humor y tomo el siguiente formulario de paciente.
A las cinco para las seis, mi teléfono suena. Es Ruggero.-Malhumorado aquí.-dice y sonrío. Todavía es el Cincuenta juguetón. Mi subconsciente está aplaudiendo con alegría como un niño pequeño.
-Bueno, ésta es la Loca Sexual Insaciable. ¿Supongo que estás afuera?-pregunto secamente.
-Lo estoy, de hecho, Señorita Sevilla. Deseando verla.-su voz es cálida y seductora, y mi corazón se hincha ampliamente.
-Lo mismo, Sr. Pasquarelli. Saldré de inmediato.-cuelgo. Apago mi computadora, reúno mi bolso y saco color crema.
-Me voy, Benicio.-le informo.
-De acuerdo, Karol. ¡Gracias por lo de hoy, cariño! Ten una gran noche.
-Tú también, Benicio.
¿Por qué no puede ser así todo el tiempo? No lo entiendo.
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CUMPLIENDO TUS REGLAS [TERMINADA]
Fanfiction•~[Contiene temporada 1, 2 y 3]~• "Ella llegó a su vida para darle un giro inesperado y salvarlo de sus sombras, él atropelló sus pensamientos de la vida en la cuidad y ahora tendrán que luchar contra todos para cumplir su objetivo". «Ser felices...