•CAPÍTULO 20•

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Miro la pantalla de mi ordenador en blanco, aún anonadada. ¿Cómo puedo hacer que entienda? ¡Un email!

De: Karol Sevilla.
Asunto: ¡Por favor, nota el nombre!
Fecha: 25 de Enero de 2018
Para: Ruggero Pasquarelli.

Señor Pasquarelli:

La próxima vez que venga a verme, pide una cita, así al menos puedo tener una advertencia previa de tu megalomanía dominante adolescente.

Tuya, Karol Pasquarelli <----- por favor nota el nombre.

Psiquiátrico Central. Seattle, Washington.

De: Ruggero Pasquarelli.
Asunto: De siete tonos diferentes.
Fecha: 25  de Enero de 2018, 14:34.
Para: Karol Sevilla.

Mi querida Sra. Pasquarelli  (con énfasis en mí)
¿Qué puedo decir en mi defensa? Estaba por la zona.
Y no, no eres un activo, eres mi amada esposa.
Como siempre, me alegraste el día.

Ruggero Pasquarelli.

Gerente General y megalomaníatico dominante, Pasquarelli Enterprises Holdings  Inc.

Está tratando de ser gracioso, pero no estoy de humor para reír. Inspiro hondo y vuelvo a mi correspondencia.

Ruggero está callado cuando subo al coche esa tarde

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Ruggero está callado cuando subo al coche esa tarde.

—Hola —murmuro.

—Hola —responde, cautelosamente, como debería.

—¿Has interrumpido el trabajo de alguien más hoy? —pregunto demasiado dulcemente. El fantasma de una sonrisa cruza su rostro.

—Sólo el de Flynn.

Oh

—La próxima vez que lo veas, te daré una lista de temas que quiero cubiertos —le siseo.

—Parece de mal humor, Sra. Pasquarelli.

Miro fijamente las nucas de Taylor y Sawyer frente a mí. Ruggero se remueve a mi lado.

—Hey —dice suavemente y busca mi mano.

Toda la tarde, cuando debería haberme concentrado en mi trabajo, me dediqué a pensar en qué decirle. Pero me enfadaba más y más a cada hora. Había tenido suficiente de su arrogante, petulante, y estúpidamente infantil comportamiento. Alejo mi mano de la suya, en un estilo muy arrogante, petulante, y estúpidamente infantil.

—¿Estás enfadada conmigo? —susurra.

—Sí —siseo

Cruzándome de brazos protectoramente, miro por la ventanilla. Vuelve a removerse a mi lado, pero me obligo a no mirarlo. No entiendo por qué estoy tan enfadada con él, pero lo estoy. Malditamente enfadada. Tan pronto llegamos a Escala, rompo el protocolo y salgo del coche con mi maletín. Entro en el edificio, sin mirar quién está siguiéndome. Taylor se escabulle conmigo y se apresura para llamar al elevador.

CUMPLIENDO TUS REGLAS [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora