BLANCO Y NEGRO - CACHÉ

Capítulo 2

Desperté asustada y sudorosa pensando que se me hacía tarde para llegar a la oficina,- mire el reloj apenas marcaba las 3:30 am suspire profundamente y puse el despertador después de unos minutos logre quedarme nuevamente profunda.

- Abrí los ojos por los lengüetazos que me daba ramón en la cara los cuales me dieron mucha risa, en ese momento sonó mi celular indicando que ya era hora de empezar mi grandioso día.

-Me dirigí al baño me di una ducha rápida Salí de allí y me acerque al closet saque uno de los tantos trajes que uso para la oficina pero esta vez opte por uno gris oscuro que llevaba falda y la combine con una blusa blanca manga larga.

-Seque mi cuerpo me puse mi crema favorita de frambuesa e hibisco, luego me aplique perfume y me dispuse a vestirme viéndome en el espejo de pie que tengo en mi habitación.

-Al estar vestida y con los tacones puestos me quede observando lo bien que hoy se me veía ese outfit ya que la falda me hacía ver más estilizada y realzando mi gran trasero, solté una risa por haber pensado eso, y ramón me miraba confundido.

-Termine de maquillarme los ojos haciéndolos resaltar más que en otras ocasiones luego me prepare un café con tostadas francesas ya que tenía mucha hambre puesto que la noche anterior no comí nada, me acerque a mi hijo para despedirme dejándole bastante agua y comida en los dispensadores ya que no sabía si hoy también llegaría a la madrugada.

-Salí de mi piso y me monte en mi "bólido azulado" de echo fue vale quien le puso así desde el día que me lo dieron suspire al recordar a mi papá y mi pulga.

-Al llegar al edificio donde yo trabajaba me recibió un guarda de seguridad que no me quería dar paso al parecer era nuevo trate de buscar a Raúl por todo lado pero no lo lograba ver, y este señor ya me estaba colmando la poca paciencia que yo tenia.

- Me puse alegar con el guarda y en ese momento sonó mi celular, era mi jefa rodé los ojos y le conteste -hola Judith- buenos días María José me saludó efusivamente al otro lado de la linea con su voz hipócrita (pensé entre mí no sé qué tienen de buenos).

- Veo que no estás en la oficina, le respondí de mala gana lo estaría si este señor que esta acá en la puerta de ingreso que no sé cómo se llama me hubiera dejado pasar hace rato suspiro y me dijo que lo pusiera a él al teléfono lo coloque en alta voz y le dio instrucciones para que me dejara pasar.

-Donde logre escuchar que ella le dijo que yo era su secretaria y su mano derecha abrí mis ojos lo más que pude desde cuándo tan amable conmigo eso sí que es sospechoso sin darle tanta importancia a su comentario me dirigí a paso largo para llegar al ascensor y poder llegar a mi oficina.

-Tan pronto me acerque al escritorio sonó el teléfono lo tome y de nuevo era Judith donde me daba instrucciones que me dirigiera de manera rápida a la sala de juntas y debía de poner las carpetas que organice la noche anterior en cada puesto de la mesa.

-Mi mal genio estaba a tope no le respondí nada y Salí furiosa hacer lo que ella me encargo, después de haber organizado todo en aquel cuarto me devolví a mi oficina donde me encontré a alguien en ella y al verme se abalanzo sobre mí y me apachurro y me lleno de besos la cara mi estado de ánimo mejoro por completo al verlo frente a mí fue tanta la emoción que yo no podía articular una palabra, y vos que parcera no me vas a decir nada.