La batalla contra Muzan

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Parte 2

(Narra Tanjirou)

Me siento mal al no ayudarlo en este momento. Mientras yo me lamentaba en silencio Douma se acercó a la puerta.
El susurro sin que la pilar se diese cuenta.

-No te preocupes, este veneno no me matará.

El se alejo y comenzó a reírse.

-Parece que logré descomponer tu veneno. Creo que tendrás que usar cosas más fuertes que eso.

Pronunció el con burla. El olor de la pilar era de furia pura, de cierto modo parecía como si fuera otra persona.

(Narra Nezuko)

Todos estábamos confundidos por estar dentro de la fortaleza de Muzan.
Estaba en compañía de Giyuu quien siempre estaba al frente quitando a todos los demonios del camino.

-No puedo creer que Giyuu sea tan fuerte.

-Sera mejor que dejes de idolatrarme y trata de concentrarte.

-¡Perdon!.

Al caminar rápidamente en una dirección desconocida que ni siquiera nosotros sabíamos a dónde nos llevaban aquellas paredes.

-¡A dónde vamos Giyuu-san!.

-No tengo ni idea, pero sospecho de algo.

-¡No eres el único!- exclamé -¡Hasta el momento solo nos hemos topado con demonios débiles!.

-Tenemos que estar alerta....

Giyuu miro detrás de si, solo note su cambio de expresión al verme.

-¡¡Cuidado!!.

El salto sobre mi y rápidamente saco su espada. La sangre salpicada en mi ropa me hizo imaginarme lo que alguna vez estuvo detrás mío.
Giyuu no tuvo algún problema al caer,    aterrizó como una pluma y guardó su espada.

-Casi te atrapa uno de ellos.

-Gracias.

-Vámonos.

De nuevo retomamos el camino, pero no sabríamos a dónde nos llevaría la mujer del biwa.

Mientras las puertas se abrían una tras otra y sin titubear un momento nos encontramos en la siguiente.
El suelo comenzó a temblar como si en cualquier momento todo se viniera abajo.

El techo fue destruido por alguien que emanaba una presencia monstruosa.

-Ha pasado tiempo, estoy completamente sorprendido de que sigas con vida. Siendo tan solo una debilucha.....

Mis ojos se abrieron, note que era el. Ese demonio que casi asesina a Rengoku y que fue tan cobarde que escapó.

-¡¡KAMADO NEZUKO!!.

El suelo fue destrozado por la fuerza de mi oponente, se lanzó directamente a mi.

-¡¡AKAZA!!

Un ataque directo con su puño me alertó.

-Danza del dios del fuego: rueda de fuego.

Un salto fue lo que me hizo seguir con vida, mi espada dió un giro junto con mi cuerpo ocasionando que cortará uno de los brazos de Akaza.
Al Acer me distraje un segundo y al girar la cabeza el puño de Akaza estaba esperándome a un costado.
Sentí la brisa del aire en mi mejilla derecha, estando tan cerca de acabar conmigo actúe.

-Danza del dios del fuego: arcoiris parhelion.

Me desplazé enseguida a las espaldas de Akaza. Siento como mi corazón late con fuerza, como si se fuera a salir de mi pecho.
Me coloque en guardia mientras el me miraba sobre su hombro.

Su rostro comenzó a sangrar.

-Ahora admito que Kyojiro tenía razón, te subestime demaciado. Te haz ganado mi respeto...

Mis ojos miraron sus movimientos, desplegará una técnica.

-La fiesta comenzará-dijo con una sonrisa.

(Narra Tanjirou)

Mientras Douma comenzaba a tener las cosas bajo control. Llegó una nueva cazadora.
Al parecer era la tsuguko de la pilar.

Ella estaba tan enojada que intento liberar a su maestra. Pero Douma se apartó del techo.

-¿No aceptas mi reto?¿Será por qué esa pilar te hizo señas con las manos?- pronunció con su caracteristica sonrisa -Te dijo algo acerca de mi poder, es impresionante que solo les tomo un segundo. Me sorprende que siendo tan inutil aún se sigue esforzando.

La joven estaba en silencio, un notorio dolor salía de ella.
Douma termino de comer a la pilar y paso con la chica recién llegada.

-Parece que hoy será una buena noche, festín tras festín sigue llegando.

Douma logro quitarle el prendedor de mariposa a esa mujer, lo tenía en sus manos.

La chica guardaba la compostura, pero estoy seguro que para ella era insoportable guardar tanto odio.

Después de casi treinta minutos sentí que algo cambio, pero no era de aquí.
Sentía calidez y felicidad.

-¿Akaza-dono murió?- dijo Douma.

¿Murió? ¡¿Eso no puede ser?!.

Mis manos temblaron un poco. Escuchar eso fue algo que me impresionó a tal grado que me perdí de la batalla.

-Se sintió extraño por un segundo, debo de saber sido yo. Se sintió como si se tratara de una criatura diferente.

Douma comenzó a reír.

-Bueno está muerto no podré preguntarle....volviendo al tema¿En qué estaba?..¡Pregunté tu nombre!.

Aquella tsuguko estaba cansada de pelear pero jamás apartaba la vista de Douma.

-Soy Kanao Tsuyuri....hermana menor de Kanae Kocho y Shinobu Kocho.

-¡¿De verdad?!, a juzgar por tu carne no estar relacionadas por sangre con ellas- dudo el -bueno da igual, la mayoría de la jóvenes son deliciosas de cualquier forma.
Ahora que estamos hablando de mujeres, la derrota de Alza era inevitable...

¿Que demonios está diciendo? ¿Acaso piensa que no estoy aquí?.
Eso es mentira, no puede ser cierto que el....que el...llegara a tal extremo.

-Despues de todo a él nunca le agrado comer mujeres, se lo dije muchas veces ¡¡Las mujeres tiene más nutrientes en sus cuerpos por que llevan bebés en sus vientres!!. Pero Alza siempre se nego a comerlas e incluso a asesinarlas, fue injusto que el señor Muzan le permitiera hacer eso. Akaza siempre recibió un trato especial por ser desplegado para porpositos en concreto.

Mi odio crece hacía Douma a cada minuto.

-Pero el murio....es muy triste, el era mi mejor amigo.

Douma esta llorando, su olor dice lo contrario....

-Deten tus mentiras ahora- pronunció Kanao.

Ella lee mentes.

-¿Que?.

-Cada palabra que sale de tu boca no son más que balbuceos, ni siquiera sientes un poco de tristeza. Tu rostro no ha cambiado en lo más mínimo, tu"mejor amigo"está muerto sin embargo la sangre no ha fluido de tu rostro y tus mejillas ni están enrojecidas por la ira.

-Bueno, eso es por qué soy un demonio- recalco él.

-Se que los ojos de un demonio siempre están húmedos así que por eso no parpadean. Pero la sangre circula por sus cuerpos como el de los humanos por lo que el color de sus rostros cambia.

Ella me sorprende cada vez más. Parece ser que ha estudiado por mucho tiempo a los demonios y sabe perfectamente sobre nuestros cuerpos. ¿Pero por qué yo parpadeo?
Será por la costumbre que siempre tuve cuando aún era un humano.














Un nuevo futuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora