Pilar Brillante [Concluida]

Cap 6. Nuestro Inicio

- ¿Te vas...? ― dijo Kana, e la cual había escuchado la plática entre Oyakata-sama e Izuku.

- ¿Ka... nae-san? ¿Lo escuchaste...? ― preguntó Izuku, un poco preocupado.

- ¿Ibas a decírmelo? ― preguntó ella, viéndolo a los ojos.

- De hecho tú ibas... ― dejó de hablar al ver la expresión de su cara ― ... No, quería irme sin decirle nada a nadie ― dijo, bajando su rostro.

Ella se acercó quedando cara a cara con él.

- ¿Por qué aceptaste? ― preguntó ella.

Ciertamente, ella no tiene ningún tipo de atracción hacia Izuku, pero aún así lo quiere.

Izuku estaba pensando en qué debería decirle a ella.

Ella era la persona que quería, estaba enamorado de ella. Aún siendo casi tres años mayor que él, eso no impidió que el joven desarrollara esos sentimientos. Cualquiera que pasara mucho tiempo con ella caería ante sus encantos, es amable, siempre muestra una sonrisa cálida que te transmite el sentimiento de seguridad, ella es valiente y fuerte como ninguna, con un cabello negro y largo, un cuerpo esbelto y unos ojos hermosos, era perfecta para la vista de Izuku y para cualquier persona.

Izuku se apartó hacia un lado, dando espacio para que ella entrase a su habitación para poder hablar más cómodamente.

- ... Luego de haberme enterado de que la familia de mi amigo de la infancia fue asesinada por un demonio, yo me sentí completamente inútil. Entrené desde los cinco años, todos los días con un objetivo en mente, el cual era brindar seguridad... Pero luego cambió, mi objetivo ahora era asesinar a todos los demonios sin ninguna pizca de lástima hacia ellos. Protegería a todas las personas y a sus seres queridos para que no sufrieran lo que yo pasé... ― decía Izuku, con melancolía.

- ¿"lo que tú pasaste"? ¿A qué te refieres? ― preguntó ella.

- Hace mucho tiempo, cuando tenía ocho años, casi nueve, yo tenía una amiga. Su nombre era "Aya". Tenía ojos cual carmesí ― relataba Izuku, la nostalgia en el ambiente era evidente ―. "Aya" era una chica que hablaba sin descanso de la noche a la mañana. Con ella pude confirmar que el mundo que veía era diferente. Nadie más podía ver el cuerpo transparente de las criaturas vivientes. Por primera vez, no sentía que me faltaba algo. En tan poco tiempo pude querer a una persona que no era de mi familia como nunca... Pero este hermoso mundo está putrefacto, villanos, asesinos y... Demonios. Un día me dirigía a la casa de Aya a dejarle algo que mi madre había preparado. Cuando llegué y abrí la puerta, pude ver lo más horrible que he visto en mi vida ― el tono en el que relataba pasaba de ser melancólico a ser un tono con furia ―. Aya y su familia yacían en el suelo en un charco de sangre. Un demonio había asesinado a todos... Lloré como nunca. Abrazaba el cadáver de la persona que fue la más importante en mi vida como si me la fueran a arrebatar ― decía ―. Horas después, un cazador, el cual estaba persiguiendo al demonio, llegó a la casa de Aya. Lo insulté y le dije que por su culpa la familia de mi amiga había muerto. Ataqué al cazador. La rabia del momento y la sed de venganza me estaban consumiendo... Antes de poder tocar al cazador, este me noqueó por un golpe en la nuca. Luego de eso, mi padre llegó preocupado porque su hijo no llegaba. Luego de eso, entrenaba con mucha más determinación. La primera vez que asesine a un demonio, me di cuenta del enorme potencial que poseía y... De que había nacido solo para asesinar demonios. Así que... Kanae-san, ya sabes lo que me impulsa, lo que hace que me levante cada día, la razón por la cual esta marca es tan grande ― decía, mostrando sus marcas de cazador ―. Ese objetivo no cambiará por más lejos que este. Me iré y despejaré mi mente, pero ten por seguro que un día, las lunas superiores van a empezar a caer, una por una, y cuando ya solo queden tres y dos suplentes, Muzan Kibutsuji vendrá con sus lacayos para acabar con los pilares, pero se encontrará con su perdición. Yo mataré a Muzan Kibutsuji y pondré fin a todo el sufrimiento que causan los demonios ― dijo.

Mientras decía esas últimas palabras, las marcas crecían hasta su punto más largo

Kanae no tenía palabras para decir algo. Tan sólo le dirigió una mirada de lástima para luego salir de la habitación.

- Hm ― sonrió tristemente ―. aunque esto te aleje de mí, espero que en un futuro puedas perdonarme. Lucharé cada día para crear ese mundo sin demonios para que podamos vivir en paz, y si el precio es que te alejes de mí, lo aceptaré, por más que me duela.

Preparó todo y se fue a dormir

*****

6:30 AM

Izuku caminaba con una maleta en su mano.

Llevaba puesto ropa para el frío. Era febrero por la mañana, los -10°C eran evidentes.

Llegó hasta un coche blanco, metió la maleta en la parte trasera del coche y la cerró.

- Que tengas buen viaje y la pases bien allá donde tú vas, Izuku. Te doy las gracias desde el fondo de mi corazón por brindar tu fuerza y apoyo a los cazadores y haber protegido a toda esa gente de los demonios ― decía Oyakata-sama, haciendo una pequeña reverencia.

- ¿¡Eh?? ¡N-No baje la cabeza, Oyakata-sama! ― exclamó Izuku ―. Yo soy quien debería darle las gracias por acogerme y darme la oportunidad de pertenecer a los pilares ― decía, haciendo una reverencia ―. Aún sino estoy en la sede, seguiré protegiendo mi área de los demonios. Y no lo olvide, cuando me necesite, estaré ahí sin falta ― dijo.

- Lo tendré en cuenta. Amane ya informó al director que tú aceptaste ir. Ellos te darán las llaves de un apartamento para que puedas alojarte ― informó, Oyakata-sama.

- Muchas gracias. Bien, me marcho ― dijo Izuku, encendiendo el auto.

- Que tengas buen viaje, nos vemos ― dijo Oyakata-sama agitando la mano.

Se podía ver como Oyakata-sama junto con su esposa e hijos se despedían de Izuku con la mano, Kanae miraba todo desde una ventana.

- ¿Este es un nuevo inicio, eh? ― pensó Izuku, con una sonrisa triste.

*****

En una montaña muy alta donde el oxígeno era mucho menor que en la superficie, habían dos personas, un hombre mayor y un joven adolescente

- ¿Qué hacemos aquí? Urokodaki-san ― preguntó el joven.

- Aquí, Tanjirou, empezarás tu entrenamiento para ser un cazador de demonios. Tu meta es llegar vivo antes del amanecer al pie de la montaña, yo cuidaré de tu hermana, puedes estar tranquilo ― dijo el hombre, desapareciendo en la niebla

- ¿Aquí empieza... Mi nueva vida...? ― se dijo a si mismo en su mente.

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