EL NINJA

LOS CELESTIALES | Capítulo 20

Judith y Fred seguían platicando, hasta que se les une Jane quien les pregunta.

_¿De qué hablan chicos?
_ah, no nosotros estábamos hablando sobre Randy.
_ay es verdad, porqué no le dijiste que nos acompañara.
_Um... Él...
_él está ocupado. No sabemos cómo está, por eso hablábamos de él_ dice Fred interrumpiendo a Judith.
_ah ya veo. Bueno pues... La próxima vez le dices que nos acompañe, así ya seríamos dos parejas.
_*ríe* si no te preocupes, yo le aviso la próxima.

Los tres deciden acercarse a las otras tres chicas que estaban delante de ellos. En eso, Judith mira el cielo y les dice a sus amigas.

_oigan chicas. Creo que ya debería los irnos.
_¿Por qué Judith?_ pregunta Jane.
_miren el cielo. Está totalmente nublado, parece que va a llover. Así que... Es mejor no arriesgarse.
_Judith tiene razón. Mejor deberíamos irnos. Otro día nos volvemos a reunir.
_si es buena idea_ responde Kenia.
_bueno chicas. Yo ya me voy, estaré en contacto con ustedes.
_okey Judith, hasta luego_ le dice cada una de sus amigas, las cuales se iban marchando cada una a su casa.

Fred en cambio, decide acompañar a Jane hasta su casa, y después él irse a la suya.

Nueva York

Aquí la batalla entre Drunssen y los celestiales seguía.

Wolfred y Flint se encontraban algo heridos. En cambio Zínder y el ninja, quienes estaban frente a Drunssen, aun estaban con energía.

_no es fácil acabar con él_ susurraba el ninja.
_de eso no tengo dudas, pero no me voy a rendir.
_no ni yo.

Por otro lado. Alan, quien seguía con Snayder, se percata que de la herida de éste estaba emergiendo una brillante luz verde. Esto sorprende tanto a Alan, que se levanta de inmediato y se queda observando a Snayder, quien al parecer seguía inconsciente.

Mientras eso pasaba con Snayder, los celestiales seguían enfrentándose contra Drunssen, a quien no podían vencer fácilmente.

_ya me cansé de esto_ decía Drunssen_ los voy a matar uno por uno. Y luego recolectaré las esferas. Eso hará el trabajo más fácil.

Drunssen empieza a emitir energía oscura desde sus manos. Lo que e verdad estaba haciendo era recargarse de energía aumentando su fuerza y velocidad.

Después, los celestiales empiezan a correr hacia él, pero sorpresivamente; les lanza energía oscura a todos. Esto hace que todos ellos caigan al piso algo débiles.

Drunssen camina hacia ellos, y en el trayecto se agacha para coger su gran lanza. Él se cola frente al ninja, quien se quejaba un poco al intentar levantarse. Drunssen pone si pie encima de su pecho, impidiéndole que se ponga de pie; para después colocar la punta de su lanza sobre su cuello.

_hasta aquí llegaste ninja. Pensé que eras más fuerte.

Al decir eso. De la punta de la lanza empezaba a salir energía oscura, la cual estaba matando al ninja.

Alan al ver todo eso, no sabe que hacer realmente. Y al voltear a vdr6a Snayder, se da cuenta que él no estaba en el lugar que lo había dejado. Alan muy preocupado, decide mirar a todos lados con la esperanza de verlo, pero simplemente no lo veía.

Cuando Drunssen estaba a punto de matar al ninja, éste se percata que una lanza dorada se dirigía hacia él. En el intento de bloquear el ataque, el ninja logra reincorporarse, lo que hace que pueda sostener a Drunssen para que no se moviera, y así aquella lanza dorada logra impactarle en todo el pecho.

Después de ese sorpresivo ataque. El ninja se levanta, y ve como la lanza iba hacia las manos de quien la había lanzado. Al voltear a ver de quien se trataba su sorpresa es notable, ya que el poseedor de la lanza era Snayder, quien no parecía estar herido. Al verlo, el ninja le dice.

_¿Snayder?¿Tu no estabas... Inconsciente?
_*ríe* qué pasa Randy. ¿Sorprendido de verme?
_si... Demasiado.

Snayder camina hacia él, y se coloca a su costado. Mientras los otros superhéroes se levantaban asombrados por la aparición de Snayder. Drunssen les decía a medida que se levantaba.

_miren quien decidió atacar. ¿No crees que fue muy tarde?
_eso no importa. Estas acabado; ya no puedes más.
_*ríe* crees que no lo sé.

A medida que hablaban, el ninja logra ver su katana de fuego. Así que decide atraerla hacia él. Ya en sus manos decide lanzarle todo el poder que hacia en ella. Eso hace que la armadura de Drunssen se destruya en su totalidad, y que su energía simplemente desaparezca.

Él había impactado contra la pared de una vivienda, para después quedarse en el piso sin fuerzas para levantarse.
Los celestiales, caminan hacia él, entre ellos también decide acercase Alan, quien no puede creer que Snayder se haya curado tan rápido.

Todos ellos estaban frente a Drunssen, quien no podía hacer nada más que sonreír.

_*ríe* al final lo lograron. Ganaste ésta batalla Snayder. Pero no creas, que será la última.
_pues estamos preparados para las siguientes. Esta sólo fue la primera de muchas batallas.
_si... Bueno. Mátame de una vez, y finaliza; lo que empezó. Peor antes... Déjame... Decirte una última cosa.
_se rápido.
_*suspira* hay alguien... Que está observando todo. Y ese alguien... Y alguien muy poderoso, más que yo. Ese ser... Es quien me envió en busca de las esferas. Sólo... Prepárate para lo que se viene, no será nada fácil. Ese sujeto, es mas despiadado, es peor que yo.
_pues cómo te dije. Estamos preparados para lo que sea.
_todos creen estarlo, pero al final siempre fallan. No hay exenciones.

Después de que Drunssen diga eso. En un fuerte ataque de ira, Flint forma con su fuego una especie de espada, la cual la incrusta en el pecho de Drunssen, traspasando su cuerpo y matándolo al instante. Esto deja sin palabras a los celestiales quienes sólo miraban a Flint, quien les dice.

_perdóneme, pero... No soportaba seguir escuchándolo.
_no te preocupes. No pasa nada, ya todo está resuelto. Por ahora.

Después de matar a Drunssen, el cielo se despejaba lo que mostraba un sol ardiente. Esto les permitía a los celestiales poder respirar aliviados después de la larga batalla.

_¿Y ahora Snayder?¿A dónde vamos?_ pregunta el ninja.
_... A casa.

Esto apenas es el inicio. Es la primera de muchas victorias. No te pierdas el próximo capítulo de...

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