No importaba mucho que Opal hubiese estado mirando a Ronan y a Adam discutiendo todo el viaje por una palabra. Porque la palabra en sí era graciosa y humillante para Ronan, en cambio para Adam significaba tanto. Así que todos metidos en el BMW disfrutaban una anhelada armonía. Adam hablando con Blue al teléfono, Gansey riendo a carcajadas, un bebé alegre, Rory balbuceando y mordiéndole la mano a Opal, la música de Ronan al fondo, Ronan de vez en cuando gruñendo, maldiciendo y echándose a reír. Opal amaba esos momentos, excepto que Rory estuviera mordiéndole la mano y tirando de su cabello.
El camino no lo conoce muy bien, Opal podría perderse fácilmente, pero ella sabía cómo llegar del apartamento de Adam a Los Graneros; justo en ese momento no estaban yendo a Los Graneros ¿iría a... Cabeswater? Ella ya no quiso jugar con Rory por lo que la pequeña azabache dio un grito de disgusto. Adam volteó rápidamente.
—¿Qué ocurre? —pregunta preocupado. Opal cruzó los brazos, infló las mejillas como esa ardilla roba nueces. Vio hacia Adam y luego hacia su ventana. —¿Opal? —Adam está por desabrocharse el cinturón, pero Ronan grita que no debe hacerlo, Adam reprocha: —Supéralo, fue sólo un sueño. No es como si fuera una premonición, Ronan. Tú sacas objetos, no ves el futuro.
Opal quiere explicarle a Adam, pero Ronan está maldiciendo y jalando a Adam para que regrese al asiento y evitando que las manos de Adam desabrochen el cinturón.
—¡Opal no quiere ir a Cabeswater!
Adam y Ronan detienen su jaloneo.
—¿Vamos a Cabeswater? —pregunta Adam, dejando a Opal algo extrañada.
—No.
—Bueno, entonces ¿por qué tanto misterio, Lynch?
Rory demanda atención, comienza a molestarse por lo que sonidos de un comienzo de rabieta salen de su pequeña boca.
—Tienes que detener el auto, Lynch.
—Lo estoy haciendo, lo estoy haciendo.
Cuando Rory está en los brazos de Adam, Opal no baja del auto por si se trata de una trampa.
—Ustedes... niña, vamos con Blue y Gansey ¿de acuerdo?, Adam esa explicación va para ti también. —sentencia Ronan, pero Opal no le cree y al parecer Adam tampoco.
—¿Por qué vamos con Blue y Gansey?
—Porque dejaremos a estos condones rotos.
Opal no tiene ni idea de lo que Ronan dice, pero la cara de Adam propone que es algo ofensivo.
—¿Por qué? —insiste Adam.
—Maldición, Parrish, eres un genio, averígualo.
Rory termina su biberón, Adam hace que Ronan le cambie el pañal, es el castigo que se merece.
Al llegar a la mansión que tiene Blue y Gansey, Opal se siente intimidada; no quiere estar ahí, esa casa podría comerla.
—No puedes venir aventar a tus hijas sólo para tener un poco de diversión. —recibe la "señora Gansey".
—Blue. —dice Ronan con veneno entre sus labios.
—Ronan. —contrataca Blue.
—Hola, sí... que bueno que nos invites a pasar Blue, voy a usar el baño, Opal puedes explorar si quieres, anda, conoce la casa. —Opal niega totalmente a lo que Adam le invita, ella no puede, todo parece tan brillante que le lastiman los ojos, se aferra a la camiseta de Adam. —Bien, entonces... oh, Gansey, que bueno verte ¿quieres cambiar a Rory? Tengo que atender a Opal, tu estúpida casa no podría ser más intimidante. —Adam le entrega a Rory a Gansey mientras que Opal y Adam entran aún más a esa boca de dragón.