Atom.

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No sabe exactamente el momento en que dejó de llorar. Recordaba que aún era un niño, pero no la edad exacta. Era muy perspicaz para notar que las lágrimas no servían de nada, contra su padre, no había ninguna debilidad. Todo lo contrario, las lágrimas de él provocaban en su padre más coraje, más furia; parecían un detonante más, un motivo más para golpearlo. Así que dejó de hacerlo. Reprimió sus lágrimas, aunque se sintiera muy triste, aunque le doliera el cuerpo entero, aunque su madre y su padre lo despreciaran él no lloró, ni una de esas gotas saladas escapó una sola vez. Cuando Phersephone murió, sintió debilidad, casi estuvo a punto de ceder... era débil, por lo que, cuando estuvo a salvo lloró, lloró y lloró hasta que el alma le dolía, hasta que sintió su corazón romperse. Su destino siempre iba ser el mismo: solo.

Y luego sucedió que Ronan Lynch lo besaba, lo besa torpemente, lo besaba con un sentimiento cargado de emociones; sintió que del corazón le brotaban pequeñas flores que indicaban esperanza. No estaba solo.

A su alrededor orbitaba Gansey, Blue, Ronan. Ahora, también, Henry.

En ese tiempo la serie de eventos desafortunados no había finalizado. La más impactante para Adam y para Ronan todavía iba a ocurrir, todavía estaba formándose para dejar una marca, un hueco en cada uno de sus corazones.

"—No es tan fuerte como se ve." Dijo Gansey.

"—No le rompas el corazón o te romperá la nariz". Bromeó Blue

"—Ya decía yo que algo se tenían ustedes. Codeó Henry.

"—Te confío a Ronan. Eres un chico listo, lógico y racional, es lo que necesita." Declan le dio una palmada en el hombro.

"—¡Ya era hora!". Matthew estaba muy feliz por Ronan.

Si Phersephone estuviera con él ¿qué le habría dicho? ¿le diría algo que no entendería en el momento, pero que después iba a tener sentido? Asintió cada vez que alguien le hablaba, Adam iba a cuidar de Ronan... pero... Adam ¿era realmente fuerte como se miraba para que nadie le dijese nada a él? Realmente no llorar en situaciones críticas y sentimentalistas lo hacían fuerte, ¿realmente lo era?

Sueños, sin pesadillas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora