Parte 217

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Lo que la población del reino draconico necesitaba escuchar por parte de los seres supremos había sido dicho. Las lágrimas y los festejos hacían imposible que algo mas fuera anunciado sin estropear lo ya conseguido.

Draudillon pensó que quizás sus amos fueran conscientes de que la población estaba ya en la palma de sus amos, y no se sorprendió cuando Ainz abandono el palco junto a sus compañeros. Entonces, Draudillon desactivo el hechizo y dio el mensaje por terminado.

Tal como habían hecho con los demi-humanos, los conquistadores... no, los emperadores atacaron poderosos sin darle oportunidad a los otros de defenderse.

En una noche derrotaron a los demi-humanos. En unos segundos conquistaron al reino draconico.

Se resguardaron al interior del castillo Momonga y sus amigos, seguidos por la reina.

-¡Maravilloso, Ainz-sama!- Expreso conmovida Clementine con lágrimas manchando su hermosa y cálida sonrisa. 

Aura y Pandora's Actor se limitaron a aplaudir. La primera porque encontraba en esa acción una  forma correcta de demostrar su admiración en presencia de estos humanos, y Pandora's Actor porque no quería arruinar su disfraz gritando con la voz de Nishiki Enrai.

Demiurge se inclinó y mostro sus respetos.

Ulbert y TouchMe tocaron el hombro de su amigo, como diciéndole "Buen trabajo" con ese simple gesto.

La reina por su parte, se arrodillo y el primer ministro, quien estaba aterrado, imito a su señora.

-Festejo la gloria de los tres emperadores- Dijo Draudillon. -Y aseguro que mi gente ya no tendrá protesta con este cambio. Pero mis señores, ahora que tanto los demi-humanos como mis compatriotas han sido apaciguados ¿Qué es lo que esta sirviente deberá hacer?- pregunto, auténticamente sin saber qué nuevo paso debía llevar acabo.

-Que la población celebre este día, con las pérdidas que sufrieron los demi-humanos estarán demasiado temerosos para atacar- dijo TouchMe. –Manda al ejército a las ciudades, en grandes números para evitar que los demi-humanos exploradores en las ciudades maten a  alguno, y que traigan todo lo valioso que encuentren-

-Una vez obtenidos los recursos y con los civiles contentos, empezaras la construcción de granjas de ganado y una revitalización del campo, seguirá un fortalecimiento de las tropas para mantener el orden entre la población. Ahora que la guerra termino, los mercenarios se quedaran sin trabajo y es menester frenarlos antes de que se organicen y comience la actividad criminal- agrego Ulbert.

-Las prioridades son: Alimentar a la población, mantenerlos seguros y desintegrar a cualquier grupo que practique el secuestro y esclavismo- Dijo TouchMe, haciendo énfasis en lo último. –Tienes nuestro permiso para comerciar con el imperio si hay problemas con los alimentos. Pero asegúrate de guardar el 80% de lo obtenido del botín de las ciudades como un ahorro para los problemas que vengan a futuro-

Tanto Draudillon como el ministro supieron lo peligrosas que eran aquellas declaraciones. Comerciar con el imperio mientras estaban bajo las órdenes de los emperadores, podría llegar a ser problemático. Pero también, gracias a esa instrucción, Draudillon pudo imaginarse un escenario en el que los emperadores conquistaban el imperio o establecían una alianza con ellos.

Aunque más aterrador era ver, que pese al poder que ostentaban, estos hombres no pedían una sola moneda del botín de guerra. A pesar de haber sido ellos quienes purgaron esas ciudades, no reclamaban las riquezas que se encontraran, y en cambio las destinarían todas al reino Draconico para un crecimiento acelerado.

Algo no estaba bien. La reina se repetía una y otra vez que algo no estaba bien con las acciones de sus nuevos amos. Y en verdad le asustaba pensar en lo que harían después con esta nación.

-Tenemos asuntos importantes que atender en Carne- dijo aquel hombre que con solo tres palabras conquisto el corazón de una nación. –Volveremos inmediatamente-

-Lo entiendo, Ainz-sama. Me asegurare de llevar acabo sus órdenes antes de que nos brinden su presencia nuevamente- respondió la reina.

-Eso esperamos. Aun que te veremos antes de volver al aquí. Serás llamada durante los siguientes días- dijo Ulbert. –Así que asegúrate de tener listas tus mejores ropas- agrego.

Draudillon formo una pequeña sonrisa en su rostro. Creyó que por fin había encontrado algo de lógica en las acciones de sus nuevos amos. Pues se imaginó a si misma  siendo llamada durante la noche para saciar a los emperadores. Y baso su teoría en la voluptuosa figura de la santa, y en la infantil y poco desarrollado cuerpo de la niña vestida de como un hombre que estaba junto a los otros seguidores.

Ahora la reina se preguntaba si era bueno decir que podía cambiar su figura a una más madura... pero antes de decidirse si arrebatar esto o no, los emperadores le hicieron darse cuenta de su error-

-Serás llamada con 30 minutos de anticipación. Después de eso enviaremos a alguien por ti para que estés presente durante nuestra reunión con Ramposa- dijo Momonga.

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Un héroe regreso de la oscuridad, y lo primero que alcanzo ver ante sus ojos, fue a un enemigo.

Un demi-humano con forma de perro, un creatura extremadamente rara en este mundo se encontraba frente a él. Instintivamente, Cerebrate intento moverse para ganar distancia del enemigo, pero en el momento en el que lo intento, sintió como su cuerpo entero estaba atrapado. Al mirar vio gruesas raíces en su cuerpo.

-Hmm, funciono bien, guau- dijo el demi-humano y se alejó.

Aquel ser extraño... ahora que Cerebrate podía verlo bien, no parecía un demi-humano sino un demonio con apariencia animal. Esto debido  a su esbelta figura, muy parecida a la de una verdadera mujer.

¿Qué había pasado? ¿Fue capturado? ¿Estaba prisionero? Pero de ser así ¿Por qué era un demonio lo que veía al despertar? Todo ello pasaba por la mente del guerreo que luchaba inútilmente por liberarse.

-Buen trabajo, puedes retirarte- dijo una joven niña.

Cerebrate busco a la persona poseedora de esa voz. Y seguramente si en el no viviera aun la imagen de sus compañeras decapitadas, se hubiera embriagado en las bellezas que encontró.

Una pequeña niña elfo oscuro que sostenía un báculo de madera, y una doncella pálida con un pecho exagerado para su pequeño cuerpo.

Confundido, Cerebrate siguió buscando por la habitación, y se encontró a un hombre, un humano con apariencia demacrada, que de no ser por sus ojos, abría jurado que se trataba de un no-muerto.

La demonio salió de la habitación, de esta lúgubre y fría habitación donde Cerebrate había despertado.

-Se bienvenido de nuevo a este mundo, héroe- dijo Shalltear irónicamente, pues al ser una valkiria era irónico que le hubiera sido encargado recibir a este humano tras su resurrección.

Por las palabras de esa joven, Cerebrate se dio cuenta de lo que habia pasado. Lo ultimo que recordaba era haberse lanzado para proteger las cabezas de sus compañeras de una lluvia de flechas...

Había muerto, y por alguna razón estas personas le habían revivido.

-¿Quiénes son ustedes?- pregunto más tranquilo Cerebrate, al darse cuenta de que si estas personas le habían revivido, no deberían tener la intención, al menos por ahora, de matarlo de nuevo.

La chica formo una amplia sonrisa.

-Mi nombre es, Shalltear Bloodfallen, guardiana del primero al tercer piso y sirviente de aquellos que tú debes conocer como los conquistadores- dijo abiertamente, revelando su verdadera identidad.

Así fue como la vampira de sangre pura, condeno al héroe del reino draconico, Cerebrate.

Overlord: Trinidad Caps 170-???Donde viven las historias. Descúbrelo ahora