Overlord: Trinidad Caps 170-???

Parte 307

Síganme en la pagina de Facebook: [Yo nunca juego con cerillos] donde también se sube overlord Trinidad.

--------------------------------------

Drauko se convirtió pronto en un nombre olvidado, reemplazado por un título. El lord dragón de la brillantez. Pero aun si el mundo olvidaba a menudo que los dragones poseían un nombre, dentro de su corazón el seguía siendo Drauko y jamás dejo de serlo. Hijo de un antiguo emperador que gobernó el oeste del continente; nacido tiempo después de la muerte del dios dragón, y criado en un mundo donde los dragones ya no eran los gobernantes sino un objetivo.

Drauko recordó a su padre, quien fuera asesinado por un grupo de jugadores, a los cuales Drauko y sus hermanos dieron muerte, tan solo días después de ocurrida la tragedia. Y quizás fue ese día, con la sangre de los jugadores en sus garras que se dio cuenta de lo distanciado que se encontraba de los demás miembros de su raza. Pues mientras sus hermanos se embriagaban con su victoria, Drauko lloraba al padre que le habían arrebatado, lloro por aquel anciano que con desprecio lo nombro una desgracia.

"¿Cuándo fue que todo comenzó?" Se pregunto el dragón mientras navegaba por sus recuerdos. ¿Cuándo fue que dio la espalda a lo que su raza llamaba "Orgullo"?

Según su padre y hermanos, ese día fue en el cual una sirvienta humana entro a la sala donde descansaba, vestida con pequeños harapos que dejaban al descubierto la mayor parte de su figura.

Según sus congéneres, ese día Drauko había abandonado el orgullo por su sangre, al infructuosamente intentar de concebir una descendencia con aquella raza inferior. Dio la espalda al orgullo de dragón, el día que dio rienda suelta a sus extrañas fascinaciones y enfermizos deseos.

¿Pero que tan cierto podía ser eso? ¿Por qué era un error intentar mezclar su sangre con la de otras razas? ¿Qué no había sido un humano quien dio muerte al dios dragón? ¿No fueron esas mismas razas inferiores quienes llevaron a los dragones al borde de la extensión? ¿Por qué era malo vivir libre de aquel estúpido orgullo?

Sus hermanos vivieron orgullosos de ser llamados dragones, y ebrios por el poder de su propia naturaleza, avanzaron sin planes ni conocimiento a una guerra que perdieron, y en la cual murieron. ¿De que servía ese orgullo si Drauko era el único que había logrado mantener con vida a tantos hijos y durante tanto tiempo?

¿De que servía el orgullo?

Al mirar frente a él, a los demonios amenazando su vida y la de sus hijos, supo para que servía dicho orgullo.

-"Baja la cabeza, y rinde ante nosotros"- dijo Drauko a Aureole, quien no cambio su expresión, pese a que el dragón acababa de decir justo lo que ella estaba por decirle. -¿Si lo hago me dejaran vivir? ¿Si lo hago permitirán que yo y mis hijos nos marchemos, a condición de que les sirvamos?-

-En efecto- respondió la sacerdotisa.

El dragón dejo salir un largo suspiro. ¿Cuántas veces no había escuchado que dragones habían muerto tras escuchar esa misma propuesta? ¿A cuantos hermanos no perdió, por jugadores que solicitaban eso mismo a cambio de sus vidas?

-Arue, Tanisla, Crem...- el lord dragón de la brillantez nombro a sus tres hijos mayores. Sus queridas niñas y su primogénito...

La descendencia que tuvo con un demonio, un ángel y un espíritu, le miraron desconsolados. Nunca en la vida habían escuchado hablar de esa manera a su padre, tan triste... tan distante.

-Mis queridos hijos... ¿Estarían dispuesto a morir junto a su padre?-

-¿Hm?-

Aureole torció el rostro, sorprendida. Los hijos de Drauko, los mayores que se encontraban inmediatamente detrás suyo, con lagrimas y sonrisas en sus rostros, respondieron con un fuerte "Sí"