CAPITULO 24 - ZONA DE PAZ

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Zona de paz

Antonio

Siempre me imaginé que el sexo con ella sería diferente a todo lo que había experimentado, pero jamás pensé que sobrepasaría mis expectativas. Estoy acostumbrado a un tipo de mujeres que forman parte de mi mundo, sin embargo, siento que lo hice con un ángel. Es tan calida y delicada que su piel se marca con mi toque, su calor estremece la mía.

Para alguien que está acostumbrando a no sentir nada, ella es una flama que en cierto sentido me quema. No saco de mi mente la imagen de sus mejillas rojas cuando la hice mía una y otra vez hasta que se asomó la luz del amanecer nublado, no aguanto mi ritmo y termino quedándose dormida.

Observó a la criatura con la que me he encaprichado dormir en mi cama boca abajo con la espalda descubierta, dándome la sexi imagen de sus tatuajes y mostrando sus jugosos pechos aplastados con su cuerpo que aún así se alcanzan a ver. Su cara refleja un rostro angelical que me embelese al igual que cuando me veo en esos ojos cafés. Sus curvas son líneas peligrosas que amenazan con hacerme perder la cordura y si no tengo cuidado terminare haciendo algo que no quiero.

Alcanzo a ver el collar dorado que siempre carga y el enojo aumenta cuando evoco los recuerdos del día anterior...

La gala ha terminado dando paso a culminar la presencia del personal en el edificio. Todos comienzan a retirarse, quedando solamente los más allegados que continúan con las felicitaciones. El grito de alguien no se hace esperar y es cuando el desorden comienza.

Todos quedan impactados cuando la noticia del cadaver de Nadja llega hasta nosotros que solo nos encontramos los miembros de familias nobles. Los integrantes se muestran preocupados y tienen incredulidad con respecto a lo qué pasó. Nadja era una directora importante al igual que un pilar destacable en mi sociedad.

—¡¿Pero como es posible?!—exclama el señor Crawfor que está encargado de la seguridad del edificio.

—No tenemos idea señor, al parecer Nadja se había creado enemigos y este ha sido rápido con su ejecución ya que el cuerpo está carbonizado como si hubiesen usando una especie de lanzallamas.

—¡Revisen las cámaras!—ordena.

—Lo hemos hecho pero no hay nada inusual señor—explica—no muestran absolutamente a nadie entrar o salir de su oficina que no sea ella.

Me empino mi copa de Champagne al igual que Beniel, Cecilia y Daniela que tampoco dicen nada al respecto y fingen sorpresa.

—Los forenses y especialistas ya vienen—digo atrayendo la atención de todos—estudiarán el área para dar con el culpable.

—Señor no es necesario que manche su imagen con este escándalo tan grosero —espeta la madre de Daniela.

—Me concierne—aclaro dejando la copa en la bandeja—después de todo ha sido bajo mí presencia y no puedo dejarlo pasar por alto.

Todos asienten y después de un rato terminan retirándose cuando las noticias empiezan a correr y los medios tratan de obtener detalles, pero mi personal los termina echando.

Conocidos míos y de Beniel se acercan a nosotros por motivo de celebración y honestamente no me queda más opción que acceder para seguir con los planes ya que mis sospechas de que tienen algo que ver con lo que busco se hacen más grandes y me conviene tenerlos despreocupados pensando que solo me reúno con ellos como siempre. Les pido que se adelanten y esperen por mi en casa con Beniel antes de darle claras órdenes que los mantenga alejados de Clare.

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