Destinos Entrelazados

Estoy para Ti

Sorry cualquier error qwq

La noche anterior, Rusia se había enterado por su hija de la situación por la que estaban pasando México y su hermano, al parecer algún pariente del Sudaméricano los quiere separar… El semblante del Sovietico se torna molesto por dos razones, la primera, ese imbécil que está molestando a los omegas no sabe con quien se acaba de meter, Amerus le dijo que ese supuesto tío es alguien influyente y de dinero, él también lo es, y bastante, ni siquiera su ex suegro UK se le compara, Rusia no es alguien que guste de “mover contactos o influencias“ pero si tiene que hacerlo por México lo hará sin pensarlo dos veces. Y lo segundo ¿Porque su Такито no le dijo nada sobre lo que ocurría con su hermano? ¿Acaso no confiaba en él…? No, definitivamente no era esa la razón, tal vez el de escudo de águila no lo deseaba preocupar. Dio un suspiro y miró la hora en su dispositivo móvil, eran cerca de las seis de la mañana, ya era hora de ponerse de pie para así poder alistarse y preparar el desayuno, quizás Canadá tenía redundancia, no era tan mala la idea contratar un poco más de servidumbre además de la que va cada dos días a limpiar, sólo deberá de cerciorarse que sea gente totalmente de confianza, ya que no le gusta meter a cualquiera a su casa por la seguridad de su princesa, con algo de pereza se levantó y estiró un poco, para luego caminar hacia el baño con el que cuenta su recamara, para fortuna del de ushanka, él era alguien sumamente ordenado, por lo que desde una noche antes siempre tiene ya listo lo que se pondría, incluso su ropa ya está colgada en la pared del baño. Sin perder más su tiempo se dispone a desvestirse para así iniciar a ducharse mientras tararea alegremente, con sumo cuidado talla su fornido cuerpo, y sin desearlo llega a su mente el evento en el que México participará este fin de semana, a veces piensa que se está preocupado más él que su Такитоy ¿Y como no? Si la competencia lo podrá admirar en linda lencería, y no sólo la “competencia” romántica sino también la laboral, pero aunque quiera, no puede hacer absolutamente nada al respecto, ni modo que les saque los ojos a esos buitres… No, no, lo que quiso decir es que ni modo que no transmitan la pasarela en vivo, solo tendrá que cuidar que nadie se intente sobrepasar con el omega, estará a su lado todo el tiempo si hace falta. Tras unos minutos finalmente termina su aseo personal para posteriormente secarse y ponerse su traje marca Fuchi. Sintiéndose un poco más renovado gracias al agua caliente, Rusia sale del baño y se dirige con rumbo a la habitación de su princesa,al ingresar al lugar puede ver a su pequeña, la cual ya se encontraba también bañada y lista, únicamente le faltaba colocarse su nueva ushanka, el ruso agradeció que su hija sea una niña tan autosuficiente, por lo que juntos van para comer los alimentos más importantes del día. Mientras padre e hija degustan sus sagrados alimentos, el mayor piensa si es buena idea decirle a México que ya se enteró de su problema, aunque algo muy dentro de él teme que Bolivia se moleste con Amerus por “venirle con el chisme” negó mentalmente, no volverá esto un círculo vicioso de silencio y mentiras blancas. Apenas estén solos en su oficina, hablara con el norteamericano para decirle que está al tanto de todo, no le piensa recriminar la falta de confianza, pero si le dejará más que claro que no están solos él y su hermanito.

De manera discreta y mientras come sus Waffles, Amerus mira a su progenitor, puede percatarse que está bastante pensativo y con sus pupilas algo dilatadas, de seguro está pensado en lo que le contó ayer, eso la hace sonreír un poco, pues sabe que su padre podrá ayudar a su adorado señor México y a Bolivia, a quien incluso ya está viviendo como a un tío, o mejor aún, como a un hermano mayor. La menor da un último bocado a lo que comía para luego bajar de su silla y llevar su plato al lavavajilla, Rusia al notar que su pequeña le había ganado en desayunar se apresura hasta finalmente también acabar e imitar la acción de la infante.

-Gracias por la comida, Папа, estuvo delicioso como siempre.-

-No es nada mi princesa, me alegra que te haya gustado ¿Ya no te falta nada? -