Como siempre perdón por cualquier error
México apretó con fuerza los ojos esperando la mordida del alfa, sin embargo ésta jamás llegó, únicamente sentía la respiración ajena y una muy pequeña presión, pero no al punto de atravesar su piel, más de un momento a otro pudo escuchar un Jadeo ahogado, seguido de lo que parecía ser el sonido de cerámica estrellándose y rompiéndose.
-Agggggg. -
Aún con temor, el latino se atrevió a abrir uno de sus ojos, pudiendo notar entonces como China se tambaleaba de un lado a otro para posteriormente y de manera pesada caer al suelo de espaldas, eso provoca que México retroceda apenas un paso mientras lleva una mano a su cuello, para su tranquilidad no había marca, y eso lo hizo suspirar ligeramente. Más su atención va a dar al frente de él, allí de pie puede ver a Italia sostenido de manera firme lo que parecía era una lámpara, parte del objeto se había roto en varios pedazos por la fuerza del impacto. El europeo tenía una cara de temor y molestia, más rápidamente dejó caer lo que sostiene para así ir lo más rápido que su movilidad se lo permitía hasta el otro omega, al cual toma de los brazos para poderlo revisar.
-¡Dulzura, por Dios! ¿Estas loco? No me vuelvas a asustar así. -
El latino está por dar su respuesta, lamentablemente se ve interrumpido por un jadeo de dolor del alfa, el cual mueve ligeramente la cabeza en señal de estar volviendo de la pequeña inconsciencia en la que cayó. Sin tiempo que perder, Italia tomó de la mano a México para así poder salir de allí a cualquier lugar, les costaba creer que ese tremendo golpe que le dio a China no lo haya dejado totalmente noqueado, solo algo aturdido… ¡Y lo peor era que ya se estaba recuperando!
-V, vámonos de aquí. -
Con terror ambos omegas vieron como el de cinco estrellas se comenzaba a incorporar poco a poco mientras los busca con la mirada, la cual estaba inyectada en furia, de manera enérgica China sacudió la cabeza para intentar reponerse, por lo que los tricolores apresuraron el paso un poco más, aunque el pobre italiano sentía bastante dolor con cada paso.
-C,corre, México… Ugggggg-
Un pequeño jadeo de dolor es reprimido por el tricolor europeo, eso obviamente México no lo pasa por alto y lo intenta cargar para así poder ayudarlo, pero Italia se niega pues sabe que si lo hace solo retrasaría al mexicano, aún así y a pesar de su dolor, el europeo los lleva a ambos hasta al tercer departamento contiguo al suyo, en cuya puerta comienza a dejar varios golpeas de manera escandalosa hasta que finalmente es abierta por otro omega con semblante ligeramente molesto.
-Italia por Dios ¿Que es ese escándalo? -
La voz de Lituania suena ligeramente indignada, pero su molestia se disipa al percatarse del estado tan lamentable del europeo, además de que tanto él como el joven que lo acompaña están bastante pálidos. Sin embargo no es capaz de preguntar nada, ya que algo, o más bien alguien capta la atención del mexicano, quien voltea rápidamente a ver al departamento de Italia .. China finalmente se ha recuperado y ha salido del hogar del europeo para poder atraparlos.
-¡Madres! ¡Por favor, cuida a Italia. -
Los europeos miran al omega sin comprender sus palabras por un momento, pero de un movimiento rápido empujó a Italia hacia los brazos del lituano, este afortunadamente reaccionó justo a tiempo y logró sostener a su vecino, lo siguiente que pueden ver es a México cerrando la puerta, pero no sin antes poner el seguro de esta.
China da un gruñido bastante gutural, no está para nada feliz con la agresión que recibió momentos antes, el escándalo provocó que algunas personas abrieran la puerta de sus hogares para poder asomarse, más al notar que afuera hay un alfa furioso, sin control en sí mismo y además armado, deciden que lo mejor es no interferir. México también retrocede algunos pasos sin perder de vista al asiático, el cual tras llegar a la puerta del hogar de Lituania comienza a golpear el objeto de madera con su hombro, pues intenta derribarla y acabar con ese maldito italiano.
ESTÁS LEYENDO
Destinos Entrelazados
FanficTras perder a su esposo América, Rusia se dedica en cuerpo y alma a criar a su hija, Amerus. Él tiene el firme pensamiento de que nunca jamás se volverá a enamorar. Pero todo cambia un fatídico día que por poco pierde a su hija. El eslavo "conocerá...