“El ajedrez tiene tanto misterio como las mujeres” - Purdy.
En la mañana siguiente Emily se dirigió a su primer día de trabajo en la UAC, estaba nerviosa, y aunque no era de mantenerse en ese estado de ánimo por mucho tiempo, sabía que no sólo el empezar algo nuevo era lo que la tenía así, había algo más que le hacía morderse las uñas una y otra vez, o más bien, alguien.
Cuando llegó a Quantico, se dirigió de inmediato a la sala de reuniones, era increíble que ya hubiera otro caso, sabía que este trabajo le ocuparía la mayor parte de su tiempo, y era algo que agradecía inmensamente.
Conoció a Jennifer Jearau o como todos la llamaban, JJ, ella era el enlace de comunicación del equipo, y era la que se encargaba de presentarles los detalles de los crímenes en primera instancia. Junto a ella se encontraba otra despampanante rubia que para nada parecía agente del FBI, la analítica Penélope García, tenía mucha gracia natural, era de las personas que siempre lograban robarle el corazón a Emily, sabía que las tres serían buenas amigas. También se presentó al Doctor Reid, un joven genio, con una inmensa cantidad de títulos que Emily apenas recordó, el chico le pareció tierno e incluso le pareció que no encajaba en aquella unidad, ninguno de ellos tres, de hecho, notaba lo buenas personas que eran, y sabía de primera mano la felicidad que podía robarles ese trabajo.
Se sentó a leer el expediente del caso y en un rato levantó la vista para encontrarse con la mirada fugaz de Aaron Hotchner que venía acompañado de otros dos hombres; el mayor era Jason Gideon, lo reconocía del día anterior y además sabía que era uno de los fundadores de la UAC; y el otro era más joven, quizás de su edad, un mulato de cuerpo increíblemente atractivo.
- ¿Todos conocen a la agente Prentiss?- Preguntó Hotchner.
- Tenía previsto incluir su presentación en el protocolo.- Explicó JJ.
- Derek Morgan.- La saludó el mulato extendiendo su mano.
- Emily... Prentiss.- Se puso de pie y le devolvió el saludo, a la vez que sonreía.
- Podemos dejarlo para luego. ¿Qué tenemos?- Aclaró Hotch, por un momento le molestó que Derek se hubiera lanzado a saludarla con tanto entusiasmo.
Emily escuchó atentamente como debatían el caso, y se sintió totalmente cómoda compartiendo sus conocimientos con ellos, especialmente con el joven Doctor Reid que le hablaba directamente a ella. Incluso, se sintió por un segundo muy orgullosa de saber hablar con fluidez el árabe, ya que había dejado a algunos con la boca abierta y a otros con una sonrisa cuando había hecho la traducción de un mensaje que habían escrito los terroristas, pero lo que más esperaba era la reacción de Hotch, cosa que no pudo descifrar porque él simplemente mantuvo su atención en los papeles que estaba leyendo.
Cuando todos salieron de la reunión Hotch caminó en dirección a la oficina de Gideon, involuntariamente miró hacia Emily, quien se encontraba sentada en una de las mesas del bullpen, estaba enfrascada aún con los detalles del caso. Pensó un momento en acercarse, pero ni siquiera tenía un buen argumento para entablar una conversación.
- Creo que deberías llevar a Prentiss a Guantánamo. Podría ser de ayuda.- Le aconsejó a Gideon.
- No sé mucho de sus habilidades.
- Yo tampoco sé de que es capaz, pero tendremos que averiguarlo antes o después.- Le dijo mientras se apartaba de la puerta para que Gideon saliera.
- Es un interrogatorio, no un ejercicio de entrenamiento.- Emily los vió y se paró junto a su mesa.
- Es el único miembro del equipo que sabe árabe con fluidez.- Explicó Hotch.
- Hay más traductores.
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❝𝐼𝑛𝑒𝑣𝑖𝑡𝑎𝑏𝑙𝑒𝑠❞
Fanfiction¿La Reina del Hielo puede derretirse lo suficiente como para vivir en el infierno de una bestia? ¿Puede la bestia convertir su corazón en un bonito copo de nieve? ⊱⋅ ──────────── ⋅⊰ ♡・゚:*。.:*・゚ ¿ǫᴜé ᴘᴀsᴀ ᴄᴜᴀɴᴅᴏ ʟᴀ ᴛᴇɴᴛᴀᴄɪóɴ ʏ ʟᴏ ᴘʀᴏʜɪʙɪᴅᴏ...