Habían pasado dos semanas desde la última vez que había hablado con él esa noche en su oficina. ¿Cómo era posible que siguiera igual de enfadada? Bueno, la respuesta era bastante sencilla, el hecho de que Hotch no le hubiera dirigido la palabra a nivel personal en todo ese tiempo había contribuido al aumento de ese insoportable sentimiento.
"Mierda" susurró Emily al entrar a las oficinas y ver a su madre, la Embajadora, en el despacho de Hotch.
Estuvo esperando impacientemente a que Elizabeth saliera de aquel lugar, su presencia allí solo le confirmaba que aquel día estaba por empeorar.
- Em.- Su madre la saludó con un efusivo abrazo, demasiado tiempo había pasado desde la última vez que había tenido ese gesto con ella. Ni siquiera podía recordar la última vez que la había abrazado de aquel modo, quizás no lo había hecho desde su niñez.
- ¿Qué pasa?- Preguntó Emily con cansancio.
- ¿Es que acaso no puedo venir a visitar a mi hija sin que tenga que acabarse el mundo?- Hotch desde la ventana sonrió al reconocer ese gesto que hacía la Embajadora con las manos mientras hablaba, era el mismo gesto que hacía Emily casi siempre que intentaba explicar sus argumentos.
- Es que te ví en la oficina de Hotch, pensé que sucedía algo.
- Bueno, sí sucede... Sucede que tú y yo nos vamos a ir a cenar juntas hoy en la noche.
- No sé si pueda, tenemos mucho trabajo aquí y...- Intentó excusarse, pero su madre la detuvo.
- He hablado con el agente Hotchner, por cierto, sigue siendo tan amable como siempre... He hablado con él y me dijo que posiblemente no tengan ningún caso para hoy, así que no acepto un no por respuesta.
- Me lo pensaré.- Intentó ser amable, pero, lo que menos le apetecía era irse a cenar con su madre a uno de esos restaurantes elegantes que nada combinaban con ella, y mucho menos en el estado de ánimo en el que se encontraban.
- Eso es un no.- Dijo Elizabeth a modo de afirmación.
- Eso es un "me lo pensaré".
- Bueno, ¿qué tal si invitamos a el agente Hotchner?
- No.- Contestó Emily rápidamente mientras abría los ojos. Por supuesto, esa expresión asustada no pasó desapercibida para la Embajadora.
- ¿Qué sucede?
- Nada.
- Emily, te conozco, más de lo que a ti te gustaría reconocer...- Esperó el resoplido por parte de su hija que había pronosticado, a veces resultaba tan predecible como impredecible.- ¿Pasa algo entre ustedes dos?- Emily amplió aún más sus ojos.- Quiero decir, a nivel profesional.- Rectificó rápidamente.
- No, simplemente.. no creo que a Hotch le apetezca cenar con nosotros, creo que prefería cenar con su familia, en su casa.- Por alguna razón había tenido la necesidad de dejarle claro que él ya estaba comprometido, quizás para recordárselo a sí misma una vez más.
- ¿Está casado?- Susurró Elizabeth con una pequeña sonrisa.- Bueno, no me extraña es un hombre increíble... Como sea, me tengo que ir, pero, te mandaré la dirección del restaurante donde cenaremos.- En un abrir y cerrar de ojos su madre ya había desaparecido por una de las puertas.
Para su desgracia no llegó ningún caso ese día, lo que suponía que efectivamente, tendría que dirigirse al restaurante donde su madre había reservado una mesa.
Su escritorio era un desastre, intentó recogerlo un poco antes de irse y al final lo único que consiguió fue que casi todos sus adornos terminaran en el piso.
ESTÁS LEYENDO
❝𝐼𝑛𝑒𝑣𝑖𝑡𝑎𝑏𝑙𝑒𝑠❞
Fanfiction¿La Reina del Hielo puede derretirse lo suficiente como para vivir en el infierno de una bestia? ¿Puede la bestia convertir su corazón en un bonito copo de nieve? ⊱⋅ ──────────── ⋅⊰ ♡・゚:*。.:*・゚ ¿ǫᴜé ᴘᴀsᴀ ᴄᴜᴀɴᴅᴏ ʟᴀ ᴛᴇɴᴛᴀᴄɪóɴ ʏ ʟᴏ ᴘʀᴏʜɪʙɪᴅᴏ...