Príncipe Mehmed. (Gay) (Reescribiendo y Corrigiendo)

"Protección" (2x05)

Iskender Aga

Los hermanos de Iskender se habían marchado del palacio del Sultán Ahmed pocas horas atrás. Iskender estuvo pensando, de pie junto a la laguna. Tuvo que sentir los pies congelados para decidir entrar al palacio en busca de calor.

Se cruzó sin querer con el Príncipe Osmán en uno de los pasillos.

–Necesito hablar contigo. —Llamó la atención de Iskender.

–Buenas noches, príncipe, ¿Necesita algo?

   –Seré breve. Supe que tu matrimonio con Ayse no va bien. ¿Eso es cierto?

Tragó saliva con pesadez. Temió por un momento que el príncipe Osmán se hubiese enterado de Gokhan y él en la arboleda. Se quedaron viendo a los ojos en completo silencio. Iskender no supo qué contestar por estar sumergido en sus pensamientos, pero Osmán, lo tomó como una ofensa.

Tomó a Iskender por el cuello de la ropa y lo empujó contra la pared del pasillo.

   –No te permitiré ofensas hacia cualquiera de mi familia. Vas a cuidar a mi hermana Ayse como si tu vida dependiese de eso. No está muy alejado de la realidad, ¿Verdad? No me obligues a desenfundar mi daga en tu cuello. Si vuelves a lastimarla, las primeras consecuencias vendrán de mis propias manos.

Estaba intentando liberarse de las manos del príncipe, pero su fuerza era superior. Sintió la desesperación al no poder respirar, las venas en su cara se estaban marcando y se estaba enrojeciendo. Intentó hablar pero solo liberó un penoso sollozo.

El príncipe Osmán lo jaló con fuerza hacia la otra pared y lo arrojó al piso. Iskender tosía y jadeaba mientras lloraba.
Para cuando levantó la mirada, el príncipe ya se había ido.
Las manos le temblaban con exageración, respiraba agitado y casi no pestañeaba al tener la vista perdida en la pared. Estaba tumbado en el frío piso del palacio, llorando. Era un espectáculo vergonzoso para cualquiera que se lo encontrase.

Fue en ese momento cuando terminó por sentirse completamente devastado, mientras recordaba el viaje a caballo de regreso al palacio con el Príncipe Osmán, a quien consideró su amigo. Podía sentir cómo sus planea fracasaban antes de si quiera ponerlos en marcha. Cerraba sus ojos con frustración y se repetía lo ridículo que era.

Lo habían removido de su cargo como confidente del Príncipe Mehmed, también del Príncipe Osmán, se había casado a escondidas con una sultana de nacimiento. Estaba deshecho pensando en todos los fracasos que estaba acumulando. Su corazón estaba más que lastimado.

No pudo evitar culpar a Gokhan Aga de todos sus males. Estaba deseando que nunca hubiese llegado al palacio. Lo consideraba el principal productor de aquellos problemas que lo estaban atormentando. Iskender solo quería estar en paz.

Escuchó unos pasos detenerse junto a él. Cuando miró hacia arriba se encontró con el príncipe.

   –¡Solo quiero estar en paz, Mehmed! —Gritó mientras se levantaba del piso.

Escuchó que el príncipe le había respondido mientras se iba por el pasillo. Se sentía un cobarde por haber escapado de Mehmed, sentía que lo estaba abandonando nuevamente.

Era medio día, los príncipes se encontraban practicando combate con arco, su maestro les daba instrucciones y ellos acataban cada una de ellas. Se encontraban lejos de sus espectadores, aún así se podía distinguir quién era quién.