Príncipe Mehmed.
El día comenzó ya hace bastante, y con el Sol indicando que es medio día. Me dispongo a ir a visitar a Iskender y Ayse. Salgo de mis Aposentos cerrando las puertas tras de mí y camino con calma.
Es en el tercer o cuarto pasillo que doblo, que mi camino se ve bruscamente interrumpido por dos Agas obstruyéndome el paso.
–¡Hola Príncipe! —Saluda.
Hago un recorrido entre ambos y señalo al más pequeño.
–¿Eras Bulent? —Y luego señalo al alto. –Y tú Yigit.
–Exacto. —Sonríe viéndome hacia abajo.
–¿Y qué es lo que están haciendo aquí en el Palacio? ¿Quien los dejó pasar?
–Venimos a preguntarle algo al señor Tarkan.
—Responde la voz infantil.–Debe estar con mi hermana aún, ¿Saben dónde están mis Aposentos? —Ambos afirman.
–Espérenme allí, pronto iré con Iskender.Cabe recordar que es más que obvio que saben dónde están, ya que ellos treparon los muros con Tarkan, aquella noche. Es gracioso que el primer lugar que a él se le ocurrió, fue hacerlo por mi balcón, llegando a mis Aposentos, y demostrando así toda la vulnerabilidad del Palacio en un simple acto. Cualquier rufián que logre burlar a los guardias podría llegar hasta mí, o incluso hasta el Sultán.
–¡Señor Tarkan! —Yigit saluda a Iskender.
–Hola chicos, me da gusto verlos.
—Responde somnoliento.–Veníamos a invitarlo a hacer algo.
–¿Qué planean chicos? —Me entrometo.
–Tarkan aún continúa convaleciente por sus heridas del otro día.–Estoy bien, Mehmed, lo estoy. —Dice calmado. Se dirige a ellos. –¿Qué querían hacer?
Solo Alá sabe si era buena idea escapar del Palacio con Iskender aún herido.
–Estaremos bien, Mehmed, ya deja de lamentarte.
Iskender va delante mío, y llegando a lo más alto de la colina, logra divisar a los dos muchachos del otro lado haciendo gestos con sus manos.
–¿Ir de cacería los cuatro? —Continúo quejándome. –¿Cómo se les habrá ocurrido?
–Te recuerdo que uno de ellos nos vio besándonos, lo más probable es que ya ambos lo sepan, así que te conviene ser amigable.
—Dice sonriente mientras nos acercamos a ellos.–¡Príncipe, Tarkan! Conocemos un lugar en el que podremos encontrar un montón de animales.
–Espero que no sea la granja de alguien.
—Responde Yigit.Comenzamos la caminata, avanzando sendero tras sendero, llegando a unos bosques con malezas casi irrompibles, usamos las dagas para cortarlas y abrirnos camino.
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Príncipe Mehmed. (Gay) (Reescribiendo y Corrigiendo)
Teen Fiction(Reescribiendo y corrigiendo) Iskender, es un joven arrebatado de su hogar y llevado como esclavo a un mundo de opulencia y peligro. Su encuentro con el arrogante Príncipe Mehmed marca el comienzo de una relación turbulenta, marcada por la violencia...