Príncipe MehmedEncontrarse con el Príncipe Phelippe junto a Tarkan hizo que sintiera fuego en su interior. Su impulsividad era tan letal, que no le importaría tener conflictos diplomáticos con los reyes de España y Portugal con tal de hacerle saber a su príncipe heredero, que no debía poner sus manos en Tarkan.
–¿Qué hacen aquí? Juntos. —Miraba fijo a Tarkan.
–Tarkan y yo entrenaremos juntos, hoy. —Le sonreía con elegancia.
–¿Y por qué yo no sabia sobre esto? Nadie me informó.
–Si el príncipe heredero no es bien informado, algo malo debe estad haciendo. —Sacudía su cabello con altanería. –¿No cree usted, príncipe heredero?
Mehmed bajó la mirada con incomodidad. Pensó en el error que había cometido al no aclarar ese cruce erróneo de información. La mirada del príncipe estaba sobre él, lucía enérgico.
–Heredero... yo... bueno, yo... —Titubeaba con nerviosismo.
–¿Lo llamé "príncipe heredero"? Lo lamento, debo haberme equivocado, usted y el Príncipe Osmán se parecen bastante. —Se burló. Ya era consciente de quién era Mehmed realmente. Era sarcasmo cuando mencionó el parecido, se había informado bien sobre los parentescos en la familia imperial. –Tendremos una lucha de espadas junto a Tarkan, veremos quién dura más.
Ambos pudieron darse cuenta de la ironía del Principe Phelippe, pues estaba burlándose de Mehmed. La mirada de Tarkan le decía que tenía que tranquilizarse, y así lo hizo.
–Podrías acompañarnos, Mehmed. Los tres podemos hacerlo juntos.
Jennet Kalfa se encargó de correr la voz por el palacio, de que los príncipes, junto a Tarkan Iskender, entrenarían en el jardín privado. Habilitaron un sector plano, tenía césped recién cortado, estaba junto a la laguna, desde allí se veía la arboleda junto a las murallas.
No pensaron en que eso podría ocurrir. Mehmed comenzó a sentirse nervioso a medida que iban llegando miembros de la familia imperial. Se fueron ubicando uno por uno bajo las carpas para protegerse del sol.
Habían guardias custodiando el jardín, pues estaban reunidas las personas más importantes de la capital. Entre ellas, estaban incluidas las sultanas Halime, Dilruba y Humasha, además de los príncipes pequeños.
El Rey de España y Portugal estaba ubicado en una carpa especial para él, estaba sentado con sus fieles acompañantes, junto al Sultán Ahmed. La Sultana Kösem se unió a ellos mientras les entregaban las armaduras de entrenamiento.
Tarkan recibió sus implementos y comenzó a vestirlos. El Príncipe Phelippe se acercó sonriéndole.
–¿Tendremos espectadores, eh? —Se sacudía el cabello. Tarkan pudo ver una vez más los reflejos dorados en sus rizos. –¿Te gusta mi cabello? Podrías usarlo largo, como yo.
Mehmed estaba viéndolos fijo, estaba un poco más alejado. Pudo ver cómo ambos se sonreían, y cómo el príncipe ibérico le tocaba el cabello a Tarkan. Apretaba la mandíbula y los puños con coraje.
El Príncipe Phelippe ayudaba a Tarkan a ponerse el equipo de protección, y luego él lo ayudó.
–No tengo idea de cómo se enteraron. De todos modos no es primera vez que presencian un entrenamiento. —Señalaba a las sultanas con su mentón.
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Príncipe Mehmed. (Gay) (Reescribiendo y Corrigiendo)
Teen Fiction(Reescribiendo y corrigiendo) Iskender, es un joven arrebatado de su hogar y llevado como esclavo a un mundo de opulencia y peligro. Su encuentro con el arrogante Príncipe Mehmed marca el comienzo de una relación turbulenta, marcada por la violencia...