Príncipe Mehmed. (Gay) (Reescribiendo y Corrigiendo)

"La Granja" (3x15)

Tarkan Iskender Aga.

Mehmed me observaba en silencio analizando la situación, y como si no se atreviera a darme una respuesta.

   –Vamos, Iskender, ¿Por qué querría huir de aquí? Este es mi hogar. —Responde apenado.

   –Solo estoy explicándote que lo que sucede entre nosotros es nada normal, pero yo no estoy dispuesto a dejarte, Mehmed, luego de todo lo que ha sucedido yo quiero que estés siempre conmigo.

Me senté junto a él en la cama para intentar tener un ambiente un poco más relajado, tiene mi mano sostenida y hablamos mirando hacia el balcón.

   –Aquí en este Palacio, que yo sé que es tu hogar, nunca estaremos en paz, hay muchos problemas y constantes amenazas.

   –¿Qué amenazas hay ahora? Gokhan murió, Safiye vive en el Antiguo Palacio, lejos de aquí, Osmán y Meleksima simplemente nos ignoran, y Dilruba ha estado fuera del Palacio todos estos días.

   –No confíes en Dilruba, ella podría caminar sobre la nieve sin dejar rastro.

   –Lo sé, Iskender, solo digo que cada problema que Alá nos ha presentado, lo hemos sabido superar, tú y yo, juntos. —Gira su cabeza hasta verme de frente. Hago lo mismo. –Te prometo que si todo se pone muy mal y no veo cómo solucionarlo, nos iremos, ¿Si? Podemos comprar una granja lejos de este Palacio, podemos llevarnos algunas joyas, nos cambiamos de apariencia y también los nombres para que jamás alguien nos encuentre. ¿Estás de acuerdo?

   –Si, lo estoy. Pero aún así tengo miedo de perderte, Mehmed.

   –¿Perderme?

   –Tú sabes bien que el próximo Sultán que ascienda, debe seguir la tradición.

   –Ese Sultán seré yo, recuerda que mi Madre es la Sultana Kösem, ella nunca permitiría que Mustafá tome el trono. —Responde molesto.

   –¿Y qué hay sobre Osmán?

   –Bueno... Pues dudo mucho que mi Madre lo ascienda, yo soy su hijo mayor.

   –Osmán y tú son casi de la misma edad, pero él ha destacado en muchas áreas de aprendizaje.

   –Si viniste a ofenderme mejor te vas. —Dice serio y con las cejas apretadas. Lo veo en silencio esperando una reacción suya pero nada.

   –¿Aún continúas con tus celos por Osmán? Pero Mehmed. —Me interrumpe con un grito.

   –!Basta! ¡Soy superior a Osmán y yo ascenderé, no quiero volver a oírte decir que mis hermanos o yo moriremos, por que no lo permitiré!

   –¡Deja de gritarme, Mehmed!

   –¡Eres tú el que vino a insultarme!

   –Te estoy ofreciendo una salida a todo el dolor que puedo ver en nuestro futuro, Mehmed, nosotros no seremos felices si nos quedamos.

   –Pero de qué rayos me estás hablando Iskender.

   –Tu Padre el Sultán está... —Me veo interrumpido por las puertas que se abrieron tras sonar dos golpeteos previos, mismos que ignoramos por completo.