Bea, 8 años.
Hay tantas voces hablando a la misma vez que me cuesta seguirle el hilo al tema y por momentos me quedo completamente perdida. Ya ni recuerdo por qué empezó la discusión, lo que sí sé es que todo en el remolque vibra con cada grito y con cada cosa que se hace añicos contra el suelo.
Escucho algo romperse en el pasillo y es la señal que necesito para darme prisa con mi tarea. Dejo de lado el cuchillo y me saco una de las horquillas que llevo en el cabello sosteniéndome el flequillo para introducirla en la cerradura del gabinete, la giro suavemente, le hago un poquito de presión y de repente «clic», mi arduo trabajo de días rinde frutos. Un golpe en la pared tras de mí me hace dejar de respirar y no mover ni un solo pelo, cuando los gritos y golpes se alejan, vuelvo manos a la obra.
Te metiste con las chicas equivocadas, Mike.
Deslizo el gabinete hacía afuera y el tesoro del tarado de Mike queda a mi merced. Aprieto aún más fuerte la linterna con los dientes y a tientas busco la mochila, cuando la encuentro la meto y empiezo a empacar todo lo que se me atraviesa y que puede prestarme alguna utilidad en el futuro, al terminar vuelvo a cerrar el cajón, con la horquilla intento acomodar un poco la cerradura y luego me deslizo fuera.
— ¡Changos!
Me masajeo la zona de la cabeza en dónde las tablas de la cama me golpearon. Agarro la mochila, me la cuelgo y trepo rápidamente sobre esa cómoda de madera, abro la ventana, me asomo y miro de lado a lado. Todo despejado a pesar del escándalo. Me quito el bolso, lo arrojo y luego me mando de cabeza hacía el vacío, por suerte caigo sobre las bolsas de la basura, me levanto, recojo la maleta y me echo a correr para llegar al auto.
— ¡Betty! — Me doy vuelta y veo a mamá salir del remolque, — ¡¿Betty, en dónde estás?!
Saco el juego de llaves que encontré en el gabinete e introduzco la única llave plateada en la cerradura, la puerta abre y me meto rapidísimo al lugar del piloto, luego me agacho, de nuevo inserto la llave y el motor ruge.
¡Eureka!
Me levanto, toco el claxon dos veces y mamá gira hacía aquí, cuando me ve tras el volante el alma parece volverle al cuerpo y también ser muy feliz al darse cuenta por qué no estaba en el lugar en que me dejó hace un rato antes de que ese cretino apareciera. Corre hacía el coche y me paso al lugar del copiloto para que ella tome el volante, da reversa y luego presiona el acelerador a fondo, mientras nos alejamos del remolque volteo a ver hacía atrás y encuentro a Michael corriendo tras la estela de polvo que hemos dejado.
Me moriría por ver su cara cuando se dé cuenta que las llaves de su amado auto no fue lo único que agarré sin su permiso.
Sé que no me va a ver, pero igual levanto el dedo corazón en su dirección. Desde que lo conocí había querido hacerlo y hoy al fin se me hizo el milagro.
— ¿Quieres ir a cenar? — Mamá voltea a verme confundida y noto ese rastro de sangre seca que tiene en la comisura de la boca, — yo invito, luego podemos buscar un lugar lindo para pasar la noche.
— ¿Betty?
Abro el cierre de la mochila y dejo a la vista todos esos billetes arrugados que tomé como recompensa por haber soportado a ese idiota por tantos meses y por todas las veces que hizo llorar a mi mami.
—Tú y yo siempre seremos un equipo, Betty, jamás olvides eso.
—Siempre un equipo.
Entrelazo mi pequeña manita con la suya y solo eso necesito para volver a sentirme segura, para saber que ya no habrá otro padrastro idiota gritándome o haciéndole daño a mi mami. De nuevo somos solo ella y yo contra el mundo.
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Hola, Chicuelxs.
Esta es una nueva historia que empezaré a publicar, pero antes de hacerlo debo advertir que tendrá lenguaje fuerte, escenas aún más fuertes y tocará temas sensibles, en ese orden de ideas la clasifiqué como +18. Así que si deciden leerla, es bajo su propia responsabilidad ;) eso no significa que no haya romance, drama, salseo, es lo que nos gusta, obvio.
El primer cap ya está disponible, así que vayan a leer y no olviden dejar mucho amor por allá.
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El club de las niñas mal: Bea Libro I 🩷 [TERMINADA]
Fiksi RemajaBeatrice Ramírez es sinónimo de caos. Problemática, impulsiva, rebelde e ingobernable. Son muchas las opiniones sobre Bea, pero todas coinciden en algo: Bea es una niña mal.