Reaccionando a "Niñeros por obligación"

Capítulo 93

-PETER! PETER! PETER! – exclamaron repetidas veces todas las niñas que corrían hasta el susodicho que acariciaba la espalda de una dormida Drew que optó por tomar una siesta en su pecho.

-Tch, ya vienen a estropear mi dulce momento-se quejaba Jessica en voz baja ganándose una mala mirada de alguna compañera

Motivo por el cual todas ellas guardaron silencio al verlo llevar su dedo índice derecho a los labios para después señalar a la pelinegra de pijama rojo con patrones amarillos. El señalador que sobresalía entre las últimas páginas del libro sorprendió mucho a las adolescentes e infantes, ya que había comenzado a leer esos estudios desde el momento en que la pequeña Janet estuvo dibujando, dándoles a entender que Peter realmente deseaba aprobar ese examen que tomaría.

-Qué pasa chicas? Ocurrió algo? – sin dejar de jugar con el pelo negro de la niña británica, el tótem quiso saber al mismo tiempo que se incorporaba con cuidado para no despertar a su dormilona inquilina.

Ellas negaron con sus cabecitas despeinadas, sonriendo por dentro ante lo tierna que su amiga lucía roncando levemente y con sus bracitos intentando envolver a Avenger pero fallando. El castaño notó la diversión en sus caras, por lo que también decidió tomarle el pelo a su "esposa de trabajo" como solía decirle solo para que ella se enoje, haciendo girar su menudo cuerpo de tal forma que terminase acunada entre sus piernas para que las demás piquen sus mejillas o incluso muevan sus párpados.

-La traición!-exclamaba la autoproclamada nueva esposa a tiempo completo de Spiderman

-Te lo mereces-decia la Danvers con una sonrisa a su amiga

-No sean tan bruscas. A ustedes no les gustaría que les hicieran lo mismo, cierto? – recomendó el hombre araña, teniendo que atraparle las piernas a la rejuvenecida Spiderwoman que casi patea por reflejo a Bobbi.

-Perdón- murmuró Julia por lo bajo, siendo ella que se dispuso a hacerle cosquillas en la planta del pie derecho a su colega.

-Descuida. Solo tengan cuidado, no quiero que se lastimen- emitiendo una suave mueca comprensiva que iluminó tanto a adolescentes como niñas que lo amaban, pidió el Parker que tomaba el papel que su hija le tendía mientras dejaba que se sentase en el apoyabrazos a su lado.

Lo puso a una altura considerable para que todas las presentes, menos Jessica, pudiesen verlo sin necesidad de ponerse en puntas de pie o sujetarse a hombros de otra. Ellas le oyeron murmurar por lo bajo de manera incomprensible, provocando temor en sus corazones al punto que incluso las telépatas se negaban a sondear los pensamientos del tótem por miedo a descubrir que no le gustó para nada el regalo.

-Mmh…- como si estuviese debatiéndose algo en su mente, generó ese sonido con su boca el vigilante.

-Papá/Peter? – todas las niñas y adolescentes cuestionaron, ya que les fue imposible el leer el rostro impasible del héroe.

-Qué? – fue todo lo que dijo el castaño sin dejar de mirar la hoja.

-No te gustó, verdad? – triste por no esperar que él reaccionase como esperaba, una mini Janet Van Dyne indagó, esbozando una mueca de tristeza en su carita.

-No- determinó Peter, bajando la hoja por completo para ver que la pequeña que protegía parecía estar al borde de las lágrimas.

-Peter!

-Peter Benjamin Parker...

-Bub, no me lo esperaba de ti

-¿Q-que tal si dejamos acabar la escena?-preguntaba Peter