Simplemente la vida del pequeño Louis y su amado alfa, Harry.
O donde Louis es un risueño, bonito y tierno omega que adora las burbujitas, los conejitos y biberones con leche de vainilla calientita, siendo mimado y protegido por su adorado alfa.
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3:00 p.m
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-Tomen una pareja, vamos, vamos.- dijo Oliver aplaudiendo unas cuantas veces para hacer a los omegas moverse, viendo a la mayoría acercarse a los demás jugadores para pedir ser sus parejas.
Hoy, en la segunda clase de aquel omega de ojitos azules que estaba paradito en su lugar mientras jugaba nervioso con sus manitas, habían juntado el equipo de alfas y betas junto al de los omegas para que pudieran tener un "mentor" y resolver sus dudas personalmente con personas que tenían más experiencia en el deporte.
Seguían divididos de la misma manera que el primer día, seis omegas con el profesor Cristopher y otros seis contando al ojiazul con el profesor Oliver, siendo ahora doce en cada equipo pues se habían sumado seis alfas/betas a cada uno.
-¿Y con ustedes que sucede? Vamos a buscarles una pareja para que puedan trabajar, a ver...- dijo Oliver acercándose a Louis y otro omega quienes estaban en su lugar sin moverse, tomándolos de la manita para buscarles un mentor.
-Veamos, tú irás con Miguel, y tú Louis... ¿Qué tal con Michael?.- dijo el entrenador dejando al omega con su pareja mientras se llevaba a Louis para acercarlo a la suya luego de buscar al rededor a alguien solo.
Louis caminaba a pasitos cortos de la manita con su entrenador, vistiendo su mismo uniforme excepto que esta vez llevaba su camisita celeste al igual que sus calcetas. Jugueteaba con sus deditos en la tela de la camisa, nervioso por conocer al equipo de los alfas y betas que lucían aterradores.
-¡Michael! Mira que buena compañía traigo para ti... quiero que le aclares todas sus dudas y enséñale todo lo que sepas porque aquí entre nos... es de los mejores de la clase.- dijo Oliver palmeando la espaldita de Louis quien veía con sus ojitos bien abiertos a aquel alfa con cabello rojo y ojos claros, viendo que también tenía aretitos como los suyos solamente que algo las grandes.
-Déjamelo a mi Oli, trabajaremos juntos para mejorar nuestra técnica, cierto ehm...- dijo el alfa mientras veía al mayor, esperando que le dijera el nombre del chiquillo.
-Oh, Louis, su nombre es Louis pero a mi me gusta llamarlo Louigi, es gracioso.- dijo Oliver riendo distraído cuando escuchó que llamaban su nombre a lo lejos, caminando apresurado hacia aquellos omegas que discutían por algo sin sentido.
-Así que Louis, ¿cierto?.- preguntó Michael sonriendo hacia la pareja que había obtenido, viendo al omeguita encogerse en su lugar y asentir mientras veía repetidas veces hacia las gradas donde esperaban algunas personas, buscando a alguien con su mirada.
-Oye, ¿te parece si empezamos estirando un poco? Hay que preparar nuestro cuerpo para el trabajo de hoy.- dijo de nuevo el pelirrojo teñido, tomándose el atrevimiento de despeinar un poco el cabellito del menor con su mano.
-Q-quiero ir con mi a-alfita...- dijo Louis en un susurro que apenas fue audible para Michael, formando un pucherito mientras se alejaba unos cuantos pasitos y buscaba con su mirada a su alfa rizado.
