5:00 p.m
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Louis vestía un lindo overlol de mezclilla clara, con una camisita verde oscuro debajo y unos converse negros cubriendo sus piecitos que intentaban mantenerse de pie por el temblor que tenían sus débiles piernitas, arrinconado en una esquina en el baño de aquel restaurante al que habían decidido ir a merendar todos juntos. Mantenía sus ojitos asustados bien abiertos y su boquita dejaba escapar suspiros temblorosos al escuchar los gritos y gruñidos de aquel alfa que había entrado al baño de omegas junto a su pareja.
Su terror había comenzado cuando le pidió a su alfita ir al baño, asegurándole que podía ir él solito mientras todos los demás esperaban por sus platillos en la mesa, levantándose de su lugar para encaminarse al pasillo donde estaban los baños mientras sentía la protectora mirada de su alfa siguiendo sus pasos hasta desaparecer por la puerta.
Había entrado al baño, buscando algún cubículo vacío para poder entrar y hacer sus necesidades con algo de prisa para poder regresar a donde su alfa, entrando al penúltimo para luego cerrar con seguro y desabrochar su lindo overol con más facilidad que antes pues ya había aprendido como hacerlo. Cuando terminó, salió del cubículo y se encaminó hasta la puerta para poder salir del baño, deteniéndose cuando recordó que debía lavar sus manitas para luego regresar y acercarse al lavamanos.
Se paró de puntitas para poder alcanzar el dispensador de jabón y guió sus ojitos hacia el frente cuando escuchó la puerta del baño abrirse, viendo por el reflejo del espejo delante suyo entrar a una omega un tanto apurada y soltando feromonas de ira y desesperación que le hicieron fruncir su naricita cuando quedaron rondando por el aire.
Abrió el grifo del lavamanos y metió sus manitas debajo del chorro de agua mientras tallaba muy bien sus palmas y entre sus deditos como le decía su alfa, sacando la punta de su lengüita en señal de concentración. Sus ojitos brillaron al ver la espuma que el jabón había creado y sin querer terminó jugueteando un poco con las burbujas que salían de ella antes de enjuagarlas por completo y cerrar el grifo para luego poder secarlas.
Caminó unos cuantos pasitos para acercarse al dispensador de toallitas secas para sus manitas y tomó una, secando muy bien todo rastro de humedad mientras volteaba de vez en cuando a ver a la omega que ya había entrado al último cubículo y solo se podían notar sus pies que se movían de un lado a otro debajo de la puerta al igual que podía escuchar su voz pues al parecer hablaba con alguien por teléfono.
Hizo bolita la toallita con la que se secó y se dirigió a tomar la manija de la puerta para poder salir, siéndole imposible cuando inconscientemente pareció abrirle la puerta a aquel alfa que entró con pasos tan acelérelos que no le dió tiempo de pensar cómo actuar, por lo que cuando entró y casi choca con él, le hizo trastabillar unos cuantos pasos hacia atrás y le vió con sus ojitos bien abiertos.
El alfa parecía echar humo por la nariz, con una mueca de enojo marcada en sus facciones que hacían las aletas de su nariz expandirse y mostrar sus ojos casi negros.
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Vanilla Milk
RomanceSimplemente la vida del pequeño Louis y su amado alfa, Harry. O donde Louis es un risueño, bonito y tierno omega que adora las burbujitas, los conejitos y biberones con leche de vainilla calientita, siendo mimado y protegido por su adorado alfa. 🧸...