Capítulo 13

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-San...Santiago, espera -digo colocando mi mano en su pecho para alejarlo un poco de mi.

-¿Que pasa?

-Yo.. no Puedo hacerlo.- evite su mirada.

-¿Hize algo mal? ¿Te lastime?

-No Santiago, es que yo...-no pude terminar la palabra. No sabía que dedicarle. Que iba q decir? ?Que la última vez que actúe bajo impulsó quede embarazada?

¡Por Dios!

Me levantó del sillón y camino a la habitación. Necesitaba despejar mi mente.

-Creo.. creo que iré a recostarme.

-¿No vas a cenar?

-Hace un momento Pensabas en convertirme en tu cena.

-Yo.. Lo...lo siendo. Me dejé llevar.

-Siempre.

-Como no hacerlo, si cada vez que Estoy Serca de ti... -se aserca a mi en una sola sancada, toma unas de mís manos y la coloca coloca en su abultado paquete dejándome boca abierta, por lo que estaba tocando mis manos

¡Por Dios!

-Santiago...

-Vas...a dejar así...- toma mi cintura asercandome a el nuevamente. Para empezar a besarme.

-Santíago...

-No te are dañó... Solo... confía en mi. Pôr favor

Lo miró haciendo una fuerza sobre humano para no dejarme envolver en aquéllos hermosos ojos claros cuando dice aquellas palabras muy Serca de mis labios.

-No puedo permitir que pase de nuevo.

-¿De Nuevo?

Desvío la mirada. No quería que mis ojos me delatan.

-Rocio, mirame-le hago caso

-No soy como piensás.-toma mis manos enredando mis dedos con los de él.

Resopló.

-Ya he escuchados esas palabras muchas veces.

-No te are dañó. Como podría lastimarte si yo..

En ese momento escucho el llanto de Gabriela. Com rapidez llegamos a la habitación. Santiago llega primero que yo y la toma en brazos calmandola

-Sssh ya princesa hermosa. No llores. Papi está aquí.

Sus palabras me dejaron congelada. Lo miró con mala cara. El solo me mira y sonríe.

-¿Que?

-Santiago prefieria que no me iluciones a mi hija por favor. No quiero verla acostumbrarse a alguien que no estará presente en su vida todo el tiempo.

-¿Quién dice que no estaré?

-Santiago, no es el momento ok- me acerco y tomo a Gabriela en brazos. Me acuesto con ella en la cáma para darle el pecho para calmarla. Ya que aveces se despiertaba inquieta cuándo quiere comer.

-Te vez tan hermosa- dice el mirandome con una expresión que no logre desifrar.

-No quiero cursilerías- digo de mala gana.

-¿Tanto te molestan que diga lo que pienso?

-Solo veo que usas unas raras técnica para..

-Sssh silencio cariño que no dejas domir a la bebé - me interrumpe colocándome un dedo en los lábios para luego darme un tierno beso en el, y seguidamente darle un beso en la frente a Gabriela que llasia dormida en mis brazos para luego salir de la habitación dejándome sin palabras.

¿¿Cariño??

-No dejes que se enfrie tu cena-dice con naturalidad miestras cerraba la puerta tras de sí.

Unidos por el destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora