Capítulo 27

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Todos fueron muy amables con nosotras cuando Santiago nos presento, no se separó de nosotras ni un minuto. Pero sin embargo, su cuerpo estaba un poco tenso y con su mirada fulminaba a uno de sus primos cuando beso mi mano como saludo, y Nicole su hermana que no dejaba de mirarme con aire de superioridad.

En la cocina estaba su madre Dina, Tres mujeres más que no conocía y Giselle la esposa de Alex.

Y como sabía que era la madre de Santiago,  pues, en unos de nuestros últimos encuentros Dina habia llegado al departamento de Santiago y nosotras estabamos ese dia en su casa.

Pude ver su cara de sorpresa al vernos hay. Sin embargo nos caímos bien desde el minuto uno. Era muy elocuente. Me recordaba a mi madre.

-Oh que bueno que ya están aquí.

Dina corrió hacia nosotros y me dio un ligero abrazo, para luego tomar mi mano y acercarme al pequeño grupo de mujeres.

-Madre, Samanta, Natalia ella es Rocío, la novia de Santiago- casi me a tragante con la saliba al escuchar esa palabra ¿Novia?- Y está hermosa bebé su hija.- continua.

La tres mujeres sonrieron y me abrazaron tal y como Dina lo había echo. Sonreí devolviéndole el abrazo tratándo de esconder mi sorpresa

-Es un gusto conocerte querida- dijo la mayor de el grupo de mujeres.

-El gusto es mio señora.

-Oh nada de señora, yo soy Monica-su mirada paso de la mía, seguido de Gabriela a la de Santiago- oh que grande estas San, ven a darle un abrazo a tu abuela.

-Abuela no puedo respirar - dice Santiago.

Contengo las ganas de reír.

-Hola Rocío. Que bueno verte.

-Hola Giselle , es bueno verte también-  repondi correspondiendo a su abrazo.

-¿Y cuál es el nombre de esta pequeña ?- dice Mónica tomando la manito de Gabriela que la miraba un poco seria. Mi hija hacia eso cuando no conocía a la persona.

-Gabriela- respondo.

- Que lindo nombre. Cuantos meses tiene.

- hoy está de 9 meses .

-Oh que maravilla. Una compañerita para Tania.

- ¿Tania?- pregunte.

Mónica sonrie

-Si querida. La hija de...

-Madre, Dejemos las pláticas para después de la Cena- Interviene Dina rápidamente sacándola de la sala de estar, nos mira - chicos empezaremos a cenar.

Sin mirar a Santiago seguí los pasos de Dina. No quería sacar conclusiones, pero no pude evitar sentir que me ocultaban algo.

*******
El pavo estaba delicioso pero apenas probé un poco, no tenia hambre, mi apetito había desaparecido, Santiago platicaba con los hombres a mi lado pero pude notar como me miraba con preocupación de vez en cuando, Dina, Natalia y Mónica fueron muy amables conmigo y me incluyeron en sus conversaciones.

Nicole y Samanta estuvieron hablando todo el tiempo sobre algo que no escuche, pero de seguro relacionado conmigo por la forma en que me miraban, incluso Samanta me sonrió en un momento, como si quisiera... ¿darme animo?

Si lo anterior no hubiera ocurrido hubiera sido una gran cena, y no estaría con miles de preguntas sin responder como ahora.

Al terminar el postre esperamos a que sean las doce, brindamos y nos deseamos una buena navidad.

-Feliz Navidad nena - dice Santiago Serca de mis labios.

-Feliz Navidad.- sonrió aceptando su beso.

Salimos al patio trasero a disfrutar de un gran espectáculo de fuegos artificiales, la tía de Santiago se llevo a Gabriela a jugar con los demás niños que corrían por todos lados. me costó mucho déjarla ir con ella pero Giselle me aseguro que estaría con ellos.

Santiago y yo salimos al jardín donde todo tipo de flores hermosas se alsaban orgullosamente hacia el cielo. Faroles  de colores verdes y rojos colgaban de los árboles que allí se encontraban. Los rodeaban algunos adornos davideños. Había una pequeña piscina que se iluminaba con la luz de la luna y las luces de los falores. Todo era tan hermoso.

No podia dejar de mirar aquel hermoso jardín. Sobre todo los tulipanes. Santiago pareció notarlo ya que me lleva hasta el banco situado frente a este. Nos sentamos uno al lado del otro sin dejar de mirarnos. Juro que estábamos casi babeando en ese momento.

No me puedo resistir, le doy un beso, un tierno y suave beso que el corresponde perfectamente, sus tiernos labios besan los míos tan delicadamente, con su mano aparta unos mechones de mi cabello que se interponen entre nosotros y los lleva detrás de mi oreja llevando su mano a mi cuello, y luego la baja hasta mi espalda baja, me estremece, tomo su cuello con mis dos manos manteniendo el ritmo suave del beso que se siente tan bien, me gusta su aroma, mucho más sus besos, su forma de besar tan apasionada y al mismo tiempo juguetona, que muerde mi labio inferior y sonríe, yo también sonrío, toma mis dos manos y entrelaza sus dedos en los míos con nuestras narices rozándose. Ambos nos miramos a los ojos, tan intensamente.

-¿Chicos porque no se quedan a dormir?- escuchamos de pronto.

Unidos por el destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora