Capitulo 66

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A la mañana siguiente....

Después de dejar a Tania en casa de su madre fuimos a sasa de Dina.

En cuanto llegamos todas las miradas fueron a parar en nosotros. La mayoría reprimió una risita, Dina llevó una mano a su pecho con una amplia sonrisa en su rostro, Henry solo asintió y brindó disimulado con San que solo asintió. Pero la mirada burlona y a la vez orgullosa de Alex, fue la más atrayente. Ya me podría imaginar las infinitas ideas de este, para molestar a su amigo.... Oh si; ya lo veo venir.

- Buenas tardes - salude y ya me podría imaginar mi rostro rojizo por la vergüenza de que imaginaran que estuvimos  haciendo Santiago y yo por no llegar la noche anterior. Me obligue a avanzar y saludar a cada uno como correspondía.

-Rociooo - una efusiva Nicole me estrechó en sus brazos y lleno de besos mi rostros.

En estos últimos días nuestros trató ha cambiado muchísimo.

- Ya basta Nicole, asfixias a Rocío  - la reprendio Mónica, logrando que la otra se alejara-  hola cariño creí que no vendrían - sonrió maliciosa - y creeme solo por hoy también  estaba dispuesta dejarlo pasar - me guiño un ojo y eso causó más mi color rojo en mi cara.

- Hola señora Mónica - correspondi su abrazo y su beso.

- Solo Mónica cariño, ya te lo he dicho - era verdad se empeñó desde un principio que la llamara de esa forma. Pero me negaba a ser irrespetuosa . Sonreí antes de apartarme para saludar a Dina.

- Dina - saludo, correspondiendo a su abrazo.

- Hola hermosa, es un placer verte cariño- regreso a ver a su hijo quien saludaba a los demás aún con Gabi en brazos-y tan bien acompañado- sonrió picara - ¡Dios!... Creo que traigo un cartel en la frente, que dice; Recién reconciliados"

Y como no si hago el mejor esfuerzo para caminar sin molestias. No es un dolor exagerado, nada de eso; es más como un ardor y mis muslos que esos si que estan adoloridos. Como si hubiese corrido un maratón de 15 kilómetros, Y es que el tener ese cuerpazo sobre mi casi toda la noche me tiene mis piernas adoloridas.

- Hermosa, que tal te trato la noche- Samanta estaba midiendo terreno y pero sin ser tan obvia.

- Muy bien - apreté mis labios - espero que la tuya haya sido igual - le hable en el oido justo cuando la abrazaba.

-Oh tenemos mucho de que hablar- sonrió abiertamente y me abrazo nuevamente.

-Tengo que aplicar la técnica de Samanta para acaparar tu atención - como siempre una muy divertida Giselle se acercó a saludarme cuando Samanta  se hizo a un lado - hola cariño se acerco a mi oído -caminas estupendo, solo quita esa cara de dolor al hacerlo -¡Rayos! si se dieron cuenta.

- Tan obvia soy - dije sarcástica ganándome una risa por parte de ella.

- Rocío- el guapo de Henry me saludo con un beso en la mejilla.

- Hola guapo.

Me acerque a saludar a Álex quien me observó de arriba a abajo con sus manos en sus bolsillo.

- Te quedarás solo observandome o me saludaras de una vez.

- Ven acá preciosa... - me abrazo muy fuerte- es solo que hoy luces más preciosa con ese hermoso rojo en tu rostro - beso mi frente y se alejó cuando el carraspeo de San se escuchó tras de mi- me la puedes prestar un par de minutos, la tuvistes toda la noche y toda la mañana a tu lado, y ¿aun asi la quieres seguir acaparando? - arqueo una ceja mientras Santiago lo mirá molesto.

- No le hagas caso Alex -les reste importancia -- está celoso por que tambien necesita uno de tus abrazos.

-A pues, lo hubiera dicho antes - dice este acercandose a su amigo para abrazarlo.- Ven aquí precioso también hay abrazos para ti, no te preocupes nene que siempre serás  el primero  en mi vida.- dice haciendonos reír a todos.

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Días después....

El cumpleaños de Gabriela fue muy hermoso, al parecer Santiago lo recordaba y con su ayuda pudimos  celebrarlo. Debo abmitir que fue un lindo detalle de su parte. Estuvieron toda la familia de San y parte de la mía por supuesto y algunos amigos más cercanos.

En estos momentos vamos de camino a la clínic , pues temia una consulta.

Al llegar a la clinica nos sentamos a esperar nuestro turno. Cuando el doctor que iba atenderme llegó vi a Santiago un poco incómodo.

-Vamos, es mi turno, - dije tomandolo de la mano para avanzar. Pero el me detiene.

-No, mejor esperamos a la doctora de en frente- dijo, señalando a la puerta del consultorío que estaba frente a las sillas del área de espera.

-Me estás avergonzando, ese pobre anciano no iba a...-  comienzo a decir indignada, pero de pronto vemos pasar a una mujer y ambos vemos al ginecólogo  mirar de forma lasciva a la embarazada, quien caminando hacia el interior del consultorio no se dio cuenta de nada.

-¿Así que te avergüenzo, eh? - preguntó molesto.

Tuvimos que esperar más de lo que pensabamos al principio, pues la doctora tenía una lista larga de pacientes.

Para el momento en que consiguimos entrar a la consulta, ya me sentía hambrienta y estaba segura de que San había escuchado dos o tres veces los rugidos de mi estómago.

La doctora era una mujer joven, guapa y muy rubia, cosa que no me pasó desapercibido, ni la forma en la que miraba a Santiago.

Uno minutos después ya estaba tumbada en una camilla con mi barriga descubierta. Mientras la rubia movía en él, el aparatito con el que se hacía la ecografía y co.enzaba a hacerme preguntas de rutina.

-¿Ya podemos saber el sexo del bebé? - preguntó Santiago.

La mujer asiente. Casi media hora después  ya estábamos saliendo de la clínica, con una ecografía en mano. Salimos cuando ya toda la clínica parecía dormir, todos los pasillos estaban en un silencio total

La reacción de Santiago durante la noticia ha sido guardar silencio y mantenerse apacible, lo que me tenía profundamente preocupada. Pues no sabia que pensaba referente al sexo del bebé y tampoco me lo hizo saber.

Las palabras de la Doctora se repetían una vez más en mi mente.

Acompañados del silencio, veia cómo Santiago manejaba un poco más lento de lo normal, como si ese viaje a casa necesita ser más largo, y  más lento.


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Hola amoreees.
Desculpem el tetraso de la atualizacion.  Estaba sin telefono y todavia tênia que abrir mis cuentas y esas cosas en el nuevo telefono.
Mais será temporalmente este telefono.
En fin queria decirlês que gracias por si paciência amorea. Y por leer. Espero les aya gustado este capítulo.  Hasta el próximo

Xoxoxoxo

Unidos por el destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora