Unidos por el destino

Capitulo 35

Las palabras de mi madre me cayeron como un balde de agua fría. La verdad que me habia olvidado totalmente de Anna

Desde que nos conocimos, habíamos sentido mucho interés el uno por el otro y sin mucho preámbulo, una cosa llevó a la otra.

Duramos unos meses saliendo, y pues Tania...  Bueno, Tania había sido un accidente. Un hermoso accidente el cual ame desde el primer momento en que la tuve en mis brazos.

Decidimos estar juntos para formar una familia estable para Tania, pero unos días antes de comprometernos la descubrí en la cama con mi primo José. No quería saber de ella pero era imposible no saber de ella y estar atento de mi hija.  Así que tuve que tragarme mi orgullo y tratar a Anna como si no hubiera sucedido nada.

Anna tuvo que viajar por cuestiones de su profesión. Pero cada vez que podia hablaba con mi hija.

Sin embargo, en las reiteradas ocasiones que nos vimos, las cosas estaban claras. Ya no podíamos seguir juntos como pareja.

Razón por la cual no vi necesario decirle mi estatus actual.

Me sentí repentinamente culpable en ese momento.

Sabia que era lo correcto por hacer, pero el simple hecho de pensar en hacerlo me hizo creer que quedaría como todo un imbécil si al final terminaba mi no-relación con Anna y Rocío terminaba dejándome. Sobre todo al saber la verdad.

El sentimiento de culpabilidad seguia allí, pero igual estuve pensándolo durante unos segundos y llegue a la conclusión de que no era necesario decirle a Anna. A fin de cuentas desde que comenze a salir con Rocío, ya no sentía la misma atracción por ella.

-Por tu largo silencio asumo que ni siquiera habías pensado en que debías decirle - dijo mi madre trayendome de regreso a la realidad.

-No la verdad es que no lo había pensado. -admito.

-¿Y qué piensas hacer si Anna llegara a aparecerse en casa con Tania y se encuentra con Rocío?- pregunta mi madre con toda la sabiduría que puede reunir alguien que ya ha vivido un montón de cosas.

En realidad ella había sido un ángel con mi padre y lo había perdonado en varias ocasiones todos los errores que había cometido, sus reiteradas traiciones y malos tratos. Pero eso no quería decir que ella no tuviera un carácter que hiciera correr a todo el mundo cuando se enfadaba.

Mi padre sabía que la perdería por esos errores, algunos tan estúpidos como el que yo podía estar a punto de cometer al no hablar con Anna y decirle la verdad a Rocío.

-No debería causar un problema porque realmente ella y yo ya no tenemos nada... Lo único que nos une es nuestra hija.

-¡Por favor! ¿Cómo me vas a decir eso? si estuvieron a punto de comprometerse. Y si no fuera porque esa víbora te engaño con tu  primó estarían casado en estos momentos - me interrumpe con indignación.

-Madre todo esto es más difícil de lo que crees ... Y créeme cuando te digo que, si algo estoy considerando en este momento, es que a pesar de todos los problemas que pueda tener con Rocío; es real lo que hemos estado viviendo.

-Espero que así sea....porque eres mi hijo pero no estaré tapandote tus burradas a cada momento... ah por cierto...  El domingo será el cumpleaños de tu hermana espero que no falten

-Hay estaremos

-Bien...y  tu padre quiere hablar contigo.

-¿Que querrá ahora?

-Hijo No quiero que lo odies por lo que ha pasado entre nosotros. Recuerda que aún así es tu Padre y le debes respetó. Ve a ver qué quiere. Lo está intentando. Y nunca es tarde para ser mejor persona. Hace lo que puede.

-No te lo prometo. Aún no Entiendo como puedes hablar así de él después de todo lo que te hizo.

-Mí amor.- se acerca hasa mi tomándo mi rostro entre sus manos - tu padre no fue el mejor esposó y Padre. Pero si me dio el mejor  regaló del mundo. Y ese fue el privilegio de tenerlos a ustedes cariño.

La abrazo. Y le doy un beso en frente.

-Te amo madre. No se qué haría sin tus consejos.

-Y yo a ti también te amo mi cielo, a los tres. No sabes cuánto me alegra verte feliz. Y ver qué tienes a alguien que de verdad te quiere.

-Y que me odiara cuando sepa la verdad- agregó con pesar.

-Cariño todo saldrá bien- dice. Besa mi mejilla y camina hasta la cocina - bueno vamos a preparar algo delicioso para comer.

Sonrei.

-Está Bien.