Capítulo 36: Cambio

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"Realmente eres una buena conductora Irene", dijo Seulgi efusivamente mientras Irene estacionaba frente a la escuela de Seulgi. "Siempre sabes cómo evitar el tráfico."

"Oh, es solo que llegamos temprano", dijo Irene alegremente. "Si piensas a futuro, llegarás a los lugares más rápido."

"Hablando de eso, debería irme. Necesitas ir al gimnasio también", sonrió la maestra mientras recogía sus bolsas.

"Sinceramente, tengo ganas de saltarme el gimnasio hoy. Creo que todavía estoy digiriendo la cena de anoche. Estuvo tan buena, sí puedo decirlo." Irene hizo un espectáculo de quejidos y palmaditas en su estómago y se deslizó hacia abajo en su asiento, sonriendo cuando escuchó a Seulgi reír.

Se encontró saliendo de su zona de confort y comportándose más abiertamente con la joven maestra, disfrutando la risa de Seulgi y sintiéndose muy complacida de haber logrado provocar tal reacción. Irene no era famosa por su sentido del humor— Somi y Lisa llamándola abuela y burlándose de sus modales conservadores era prueba suficiente de que era demasiado mayor para que la vieran como algo más que una mentora. Jennie era más cercana a ella, pero nuevamente, la chica más joven la miraba como un modelo a seguir e Irene se sentía responsable por ella.

Con Seulgi, Irene finalmente sintió que había encontrado un igual, o al menos alguien que estaba al mismo nivel que ella. Podría ser una de las razones por las que hicieron clic tan rápido después de que se conocieron— Seulgi parecía estar un poco asombrada por ella, siguiendo a la mujer con una expresión atenta y aturdida mientras Irene estaba ocupada asegurándose de que Seulgi se las arreglará bien después de averiguar que nunca había cocinado más que fideos. Pero aparte de eso, las dos mujeres se llevaron bien, compartieron historias de su vida y se ofrecieron un oído atento o bromearon e intercambiaron comentarios divertidos cuando se quejaban de sus trabajos.

"Mi familia es gente muy acomodada, así que podía permitirme comprar comida para llevar todos los días mientras estaba en la universidad, o viajar de regreso a casa y pedirle a alguien que cocinara algo para mí", explicó Seulgi tímidamente, "pero decidí que tengo que ser independiente, ponerme en contacto con el mundo real y valerme por mí misma. Fue... emocionante pero también un poco aterrador. Tenía... tenía que seguir preguntándole a mi vieja empleada doméstica cómo hacer algunas cosas..." 

Irene quedó impresionada. Para alguien como Seulgi, que nació en cuna de oro y había sido atendida de pies a cabeza toda su vida, mudarse y valerse por sí misma debe haber sido una decisión difícil, especialmente cuando se trataba de aprender habilidades y tareas domésticas. Pero también fue una elección valiente y buena, aventurarse fuera de la comodidad y experimentar la vida.

Seulgi parecía haber sobrevivido hasta ahora, pero Irene se había ofrecido a enseñarle cómo lavar la ropa, planchar y cocinar correctamente, a lo que Seulgi había accedido con entusiasmo. Irene se sintió halagada por los elogios que Seulgi le dio, nunca antes en su vida se había sentido más apreciada que por su nueva amiga.

Se había convertido en una rutina, con Irene insistiendo en llevar a Seulgi al trabajo con la excusa de reducir la contaminación (Irene disfrutaba viendo los adorables pequeños bostezos y las sonrisas torcidas de Seulgi temprano en la mañana mientras se tambaleaba en dirección al auto de Irene). Luego, después del trabajo, Irene pasaba por el gimnasio en el que Seulgi hacía ejercicio todos los días. Irene la recogería y conduciría a casa, tal vez deteniéndose en algún café para tomar algo rápido y charlar. Si no estaban demasiado cansadas, Irene invitaría a cenar a Seulgi con el pretexto de mostrarle algún plato nuevo o para que Seulgi practicara sus habilidades de ama de casa.

En realidad, Irene disfrutaba sinceramente tener a la mujer más joven cerca— su casa se iluminaba con sus risas y se quedaba en un silencio ensordecedor cuando Seulgi se iba. El silencio que antes era tan reconfortante ahora comenzaba a sofocar a Irene, para su sorpresa.

The Tiger King (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora