Capítulo 40: Comprensión

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"...tres dos uno— ¡CAMBIO!"

Lisa dejó caer las pesas y pasó a la siguiente estación: cuerdas.

Movió sus brazos rápidamente en sincronía mientras movía las cuerdas como látigos, el Baúl resonaba con los golpes ensordecedores cuando golpeaban el suelo. Apretó los dientes, el sudor goteaba de su frente mientras trabajaba con más fuerza en sus brazos. Sus músculos le daban un escozor delicioso con cada movimiento y su frente estaba empapada en sudor.

Jennie merodeaba detrás de ella, escudriñando la forma de Lisa y ladrando palabras al azar que Jisoo no podía descifrar desde su puesto en un banco.

Era el día de la noche de apertura de la purga y la tensión estaba en aumento para las hermanas— ni Jennie ni Lisa mostraban signos de disminuir la velocidad a medida que pasaba el tiempo.

Jisoo apareció en la mañana como de costumbre para encontrar el Baúl como un hervidero de actividad que consistía en Lisa corriendo por el gimnasio mientras saltaba de una estación a la siguiente en rápida sucesión, con Jennie ladrando órdenes.

"Se están preparando para esta noche", había completado Irene.

Jisoo se puso de pie y miró, frunciendo el ceño ante el espectáculo que tenía delante. "Pero, ¿no debería Lisa tomárselo con calma? Pasta lo dijo. Además, podría lastimarse y estaría cansada."

"¿Crees que no traté de decirles eso?" Irene suspiró y apunto en dirección a Jennie. "Si quieres intentarlo, tal vez Jennie te escuche a ti." Ambas se giraron para mirar a las hermanas.

Tanto la entrenadora como la boxeadora vestían camisetas sin mangas, y se formaban globos grises de sudor debajo de sus axilas dejándole saber a Jisoo que habían estado haciendo los ejercicios implacables durante algún tiempo.

Por lo demás, el Baúl estaba vacío, a excepción de Matthew— Jisoo sabía que las otras chicas que solían entrenar también debían comenzar sus exámenes hoy. Su presencia habría sido útil en este momento cuando Jisoo tragó saliva y se acercó tímidamente a la entrenadora morena.

"¡Sigue así! Si te veo holgazaneando, serán otras tres rondas de pesas más, ¿me oyes?" Jennie gritó antes de volverse hacia Jisoo con una sonrisa tensa. "Buenos días Chu. Lo siento, estoy un poco ocupada hoy, puedes ir a empezar y pasaré a verte pronto."

"Jendeuk, está bien. Pero no crees que deberías—"

"Espera un segundo." Jennie giró la cabeza hacia atrás para gritarle a Lisa. "¡Salta más alto! Levanta la pierna más alto, ¡vamos, trabaja esos muslos, babosa perezosa! ¡Los quiero duros como rocas y listos para esta noche!"

Luego se volvió hacia Jisoo con una leve tos. "Ughh, dolor de garganta. Lo siento, ¿estabas diciendo?"

"Uh, suenas como mi profesor de educación física", Jisoo se rió nerviosamente, con voz aguda  y chillona. "Oye, aquí tienes una idea... Lisa va a estar muy cansada esta noche, así que ¿qué tal un descanso?"

"No."

"Un diminuto pequeño descanso—"

"No."

"...¿ni siquiera un pequeñito descanso?"

"Nada Jisoo. La Purga es esta noche y se enfrenta a Shadow. Tiene que estar lista, Shadow no es una adversaria fácil. La quiero preparada", respondió Jennie, haciendo que Irene se estremeciera en su rincón.

Pero Jisoo estaba acostumbrada a los ladridos y gritos de Jennie, así que ni siquiera se inmutó. "Oh, pero ¿esto no la cansará? Y se enfrenta a Shadow... ¿Esta Shadow es rápida alrededor del ring?, como su nombre lo indica, entonces Lisa debería conservar su energía—"

The Tiger King (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora