The Tiger King (Traducción)

Capítulo 56: Despertar

Como un reloj, Dahyun se despertó con el mensaje de texto matutino de Jackson. Antes de las nueve, como indicaba la hora en su teléfono, él siempre le enviaba un breve pero lindo mensaje.

Y cada vez, Dahyun suspiraba, ignoraba el aleteo que amenazaba con estallar en su estómago, escribía una respuesta y continuaba con su búsqueda de un apartamento adecuado en Incheon, preferiblemente situado cerca de Rkive.

Incluso tenía la intención de echar mano de los fondos de emergencia de su familia para esta compra, arriesgándose a hacerlos enojar. Siempre habían expresado su desaprobación por su elección de carrera, dejando en claro que ella era la decepción de la familia.

La chica que era antes cuando se enredó con Momo y todo este asunto podría haberse sentido ansiosa, pero ahora a Dahyun ya no le importaba lo que pensara su familia. Si había algo bueno que había aprendido de Momo y Jackson, es que debería ir a por las cosas que quería sin escuchar a los que la retenían.

Y eso es exactamente lo que estaba haciendo, sola.

Porque al final, nadie estaría ahí para ella, sino ella misma.

Dahyun se debía a sí misma terminar lo que había comenzado, satisfacer su curiosidad y descubrir los malditos secretos que se escondían a simple vista antes de que más atrocidades cobraran vidas inocentes que desaparecerían para siempre de la faz de la tierra.

Su plan para investigar el establecimiento estaba tomando forma lentamente y no tenía tiempo que perder pensando en su tibio e incómodo estado de amistad con Jackson. Nunca había mencionado los cuadernos hasta ahora, aparentemente solo quería mantenerse en contacto genuinamente.

Dahyun podía mantenerlo a raya por ahora, manteniendo el pretexto de seguir siendo la chica ingenua que soñaba con el fotoperiodismo y tomaba fotos para su página de Instagram. Se había vuelto competente en la actuación. Jackson no era más que una pequeña molestia por ahora, mantenidolo a distancia. No volvería a caer en su trampa.

No estaba segura si debía contarle a Momo sobre sus próximos movimientos.

Por un lado, quería alejarse de todos los recuerdos que aún persistían en el borde de su conciencia, pero por otro lado, aventurarse en situaciones potencialmente hostiles significaba ser vulnerable. Sería prudente que alguien estuviera al tanto de lo que estaba haciendo en caso de que algo sucediera.

Tendría que decidirlo cuándo llegara el momento.

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Cuando Jennie se despertó, lo primero que registró fue lo cómodo que estaba su colchón ese día, tanto que sintió ganas de hundirse en él y no despertar nunca más. Jisoo acurrucada junto a ella era una ventaja.

Espera ¿qué?

Y luego, como en un sueño, recordó, y su rostro se encendió con un sonrojo mientras su noche haciendo el amor se reproducía en su cabeza.

Jennie actualmente yacía desnuda debajo de las sábanas que ellas mismas se habían puesto encima en algún momento en las primeras horas de la mañana. Sus piernas desnudas estaban enredadas y la cabeza de cabello negro azabache de Jisoo le hacía cosquillas en la nariz a Jennie mientras dormía, acurrucada con su pecho presionando el costado de Jennie.

Sus mejillas se calentaron al ver una marca roja prominente en el hombro de Jisoo.

Hice eso, y quién sabe cuántos más, Jennie tragó saliva. En la luz gris de la mañana, pudo distinguir varias prendas de vestir esparcidas por el suelo de la habitación y sus mejillas se sonrojaron de nuevo.

Su cuerpo se sentía gomoso como si no tuviera huesos, como si hubiera sido derretido sobre un fuego poderoso y luego moldeado de nuevo como arcilla. Su cabeza estaba sorprendentemente clara y tranquila; estaba segura, cómoda, libre de dudas o remordimientos.