The Tiger King (Traducción)

Capítulo 81: Y eran compañeras de cuarto

Previamente:

Después de escapar de varias experiencias cercanas a la muerte orquestadas por Jinyoung (el asesinato de los padres de Jisoo, la explosión de la casa y el asalto en el bosque por parte de sus ex yoongi y taehyung, quienes se revelan ahora como sujetos del experimento Tiger King), Jennie y Rosé son encontradas por Jackson, traicionando así a Jinyoung.

Después de una breve llamada telefónica con Jinyoung, quien revela que Jennie ahora está siendo considerada una terrorista (incriminada por el atentado) y se entera de la muerte de Momo, Jennie y Rosé se sienten arrinconadas y deciden visitar a Hani, la reina de la mafia del clan Dasoni que quiere reclamar a Tiger King y derrotar a Jinyoung.

Jennie llega a un acuerdo contractual para ser miembro del clan, a cambio de que Hani la ayude a ella y a Rosé a recuperar a Lisa y Jisoo después de llegar a un acuerdo de que Hani no usará a Tiger King, sino que harán que el mundo crea que Tiger King ya no existe y por lo tanto, Lisa pueda caminar libre. Uno de los secuaces de Hani, Youngdeuk, escucha este cambio de opinión y no está de acuerdo.

Basada en la información de Jackson, el plan de Hani es extraer a Tiger King durante un próximo espectaculo extremadamente secreto de Jinyoung, donde mostrará las maravillas de Tiger King a inversores y amigos.

Hani le pide a Rosé que use su conocimiento sobre Yang y Jinyoung para encontrar información sobre el espectaculo, porque su equipo sigue tropezando con callejones sin salida. Hani le pide a Jennie que se prepare físicamente entrenando en peleas, ya que la quiere en el campo para la extracción de Tiger King.

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Ubicación desconocida, Laboratorios de Investigación JYP, aproximadamente a mediados de la década de los 2000...

"¿Por qué no pensamos en un nuevo nombre para ti?"

El sujeto 327 levantó la cabeza y miró desconcertado al Dr. Brushweiler, que sonreía expectante.

Siempre había sido un médico extraño en comparación con sus médicos anteriores. Decía cosas extrañas que hacían que el Sujeto 327 se detuviera y mirara correctamente al médico cuando normalmente dedicaba solo un escaso porcentaje de su atención a su presencia. Renunció a sus bagels de desayuno, diciendo que no tenía hambre, aunque sabía perfectamente que podía meterse en serios problemas— los candidatos a Tiger King estaban en un régimen estricto con poca o ninguna comida para maximizar la ingesta y absorción de drogas en su cuerpo. El sujeto 327 cedía ante el olor del tocino, salivando patéticamente tan pronto como escuchaba pasos acercarse por las mañanas.

Al Dr. Bruschweiler le gustaba sentarse junto a los barrotes de su celda, hablando sin siquiera tener un sujetapapeles encima para tomar notas. El Sujeto 327 lo había observado cuidadosamente, pero a diferencia de algunos de los astutos médicos anteriores, tampoco había señales de que estuviera grabando en secreto sus conversaciones con algún dispositivo de grabación oculto. Más extraño aún, incluso a veces venía en la oscuridad de la noche a hablar y contar historias de sus sobrinos, solo porque no podía dormir y tenía ganas, según él.

Era extraño, pero al Sujeto 327 no le importaba, más allá de sentir un poco más de frío cuando el doctor tenía que irse.

"Un nombre," repitió el Sujeto 327.

El médico sonrió y asintió con entusiasmo, sus gafas brillando bajo las luces fluorescentes.

"¿Por qué necesitaría un nombre? Ya tengo uno", dijo el Sujeto 327 aburrido y señaló su pecho. "Sujeto 327."

El Dr. Bruschweiler frunció el ceño, con la boca caída en las comisuras. Sacudió la cabeza. "Ese no es un nombre. Deberías tener un nombre hermoso, como Pranpriya—"