A Francisco le encantaba dormir, porque sus sueños eran para él la realidad y su vida despierta nada más que un monótono sobrevivir.
Nada más la oreja en la almohada pegar, se sumergía en un mundo maravilloso, donde todo era reír y jugar.
En los sueños se encontraba con sus amigos dormidos y ellos nada tenían que ver con los despiertos, ya que estos no eran nada más que unos individuos enfermos.
Entonces los despiertos, llenos de envidia por su felicidad, eliminaron su capacidad de soñar y al cabo de unas noches sin sueños, Francisco se convirtió en uno de ellos.
ESTÁS LEYENDO
Las 900 vidas
FantasySabela es una muchacha de 18 años que ha vivido toda su vida alejada de la civilización, en una cabaña junto a su padre y a su hermano, dedicándose día sí y día también al aburrido trabajo de cortar árboles. Aunque ella no quiere ser una leñadora pa...