ADN CRIMINAL ⌖ JK +18

⌖③④⌖

┆ Jeon Jungkook┆

—¿Crees que he llevado una vida patética? —murmuré, casi en un susurro, apenas lo suficiente para que Eddi lo escuchara. Mis palabras se escaparon antes de que pudiera detenerlas, como si la duda y la inseguridad se hubieran filtrado desde lo más profundo de mi ser.

Eddi me miró con una expresión que mezclaba sorpresa y comprensión. Era raro para mí mostrar debilidad, pero ahí estaba, confesando lo que realmente sentía.

—No, Jungkook, para nada. De hecho, pienso que has tenido una vida admirable, mucho más que eso. Has enfrentado desafíos que otros solo pueden imaginar. Y esos desafíos, en lugar de derrotarte, te han moldeado para ser quien eres hoy. Fuiste un estudiante destacado, siempre con las mejores calificaciones, un hijo que cualquier padre estaría orgulloso de tener, un soldado excepcional que se ganó el respeto de sus compañeros, y ahora, un detective cuya reputación precede. Eres todo eso y más —subrayó Eddi, su voz firme y llena de convicción.

Sus palabras eran sinceras, lo sabía, pero no lograban disipar la nube oscura que se había instalado en mi mente. Ese sentimiento de insuficiencia, de no ser lo bastante bueno, seguía ahí, aferrado como una sombra.

—Y si esto tiene que ver con lo que pasó con Park —continuó Eddi, dándome una palmadita en el hombro—, déjame decirte algo: hay muchos más peces en el océano de la vida. No puedes dejar que esto te consuma. No te quedes estancado en un solo lugar, porque la vida sigue, y tú también debes hacerlo.

Quería creerle, quería aceptar ese consejo y dejarlo todo atrás, pero la verdad era que me sentía atrapado, incapaz de escapar de mis propios pensamientos.

—La verdad... —comencé, mi voz temblorosa—, no esperaba sentirme así. Jamás pensé que esta situación me afectaría tanto. Es solo que... —tragué saliva, sintiendo la frustración y el malestar arremolinarse en mi pecho—... soy patético, es la verdad. Ella tiene razón.

Bajé la cabeza, sintiendo el peso de mis palabras caer sobre mí. No era solo la situación con Park lo que me había llevado a este punto, sino algo mucho más profundo, algo que había estado evitando enfrentar.

—¿Park tiene razón al decir que eres patético? —preguntó Eddi, claramente confundido por mi declaración. Negué lentamente con la cabeza, sintiendo cómo la verdad comenzaba a emerger, amarga y dolorosa.

No era Park a quien me refería. Las palabras que realmente me habían herido venían de Nabi. Ella había tocado un nervio que ni siquiera sabía que tenía. Sus palabras, crudas y sin filtro, habían resonado en mi mente como un eco persistente, recordándome que, en algún nivel, creía en ellas. El pensar que Park me había visto como un premio de consolación, alguien a quien recurrir en su momento de necesidad, era un golpe directo a mi orgullo, a mi valor como persona.

—No, no fue Park... —dije finalmente, levantando la mirada para encontrarme con los ojos de Eddi, quien me observaba con una mezcla de preocupación y curiosidad—. Era Nabi. Ella tiene razón en parte. Lo que dijo... no puedo sacarlo de mi cabeza.
Eddi permaneció en silencio por un momento, procesando lo que acababa de decir, su mirada fija en el vaso mientras vertía un poco más de licor en el mío. Sabía que había soltado más de lo que debía al mencionar a Nabi, alguien de quien nunca le había hablado. Pero ahora que había abierto la puta boca no tenía más remedio que seguir adelante. Le conté sobre ella, cómo desde su llegada había trastocado mi vida, volcando todo lo que creía seguro y ordenado.

Eddi escuchó atentamente, asintiendo de vez en cuando, como si estuviera armando un rompecabezas en su mente.

—Bueno, no te culpo por sentirte así —dijo finalmente—. Tratar con alguien como ella no debe ser fácil, y si encima es una mujer... ya me imagino. Pero... —hizo una pausa, dejando que sus palabras colgaran en el aire por un momento antes de continuar—, no soy un experto en esto, pero te diré algo como hombre. Lo que más puede doler es cuando alguien pisotea tu orgullo, como parece estar haciendo Nabi contigo. Ahora, si realmente no te importara lo que ella dice o hace, simplemente lo dejarías pasar, te valdría una mierda. Pero, por lo que me cuentas, parece que la situación es más complicada. Y eso solo me lleva a una conclusión...