*Pedri*
Cerré la maleta bajando al piso de abajo desganado y en la entrada mi vista se paró en mi reflejo del espejo. Tenía los ojos hinchados y rojos, me escocían y mi rostro...no había un ápice de felicidad en él.
Se había esfumado todo, y yo solo quería desaparecer unos días.
Suspiré mirándome dándome pena de mi mismo, y abrí la puerta de casa para meter la maleta en coche, salía en dos horas para el aeropuerto.
Pero en cuanto abrí, Dani estaba preparada para tocar el timbre. Nos miramos y ella no dudó en abrazarme a ella mirándome preocupada.
-Pedri...dios mío-suspiró con la voz cogida-esto es tan injusto Pedri...-me dijo al separarnos y yo no dije nada, no sabía que decir.
-¿Cómo está ella?-fue lo único que le pregunté, al menos que hubiese vuelto a casa por favor.
-En casa-me dijo y yo asentí soltando un suspiro de tranquilidad.
-Bien-le dije a Dani asintiendo y ella negó mirándome con pena.
-No Pedri, no. Nada bien-me dijo y yo agaché la mirada, yo ya sabía que nada estaba bien- Aitana está tan destrozada como tú, no sale de su habitación, no come, no duerme, solo llora-me miró-y a juzgar por tu aspecto no creo que tu estés mejor-me dijo y yo negué mientras miraba al suelo y unas lágrimas se me escapaban.
-Yo....-sollocé-lo siento Dani, lo siento-lloré mirandola-yo solo quiero que ella esté bien de verdad, lo hago por ella, todo lo hago por ella-le dije entre lágrimas-yo...Le di a Gavi la dirección de la burbuja para que fuese a buscarla, le dije que solucionase las cosas con ella, lo siento-repetí-siento haberme enamorado de ella y haberle hecho todo este daño y que ahora pase esto pero...-ya tuve que romper a llorar porque no podía ni hablar.
Dani me abrazó, y yo no pude sentirme peor.
Había destrozado a mis mejores amigos, y había destrozado a Aitana.
Lo había hecho todo mal. Todo.
-Escuchame Pedri-me dijo ella secando mis lágrimas mientras nos sentábamos en el sofá-agradezco mucho que pienses en Gavi y no quieras hacerle daño, pero tú no has hecho nada malo, en el corazón no se manda y el no puede mandar ni en tu vida ni en la de Aitana por mucho que quiera él-me dijo dejando una caricia en mi mejilla- si la quieres, no la pierdas Pedri o te vas a arrepentir siempre-me dijo y yo llevé las manos a mi cara.
No podía ni aguantar las lágrimas, ¿qué narices me pasaba? Yo no era así.
-Se lo he prometido a Gavi-le dije y Dani me miró haciendo una mueca-ella tiene dieciocho años Dani, es joven y es preciosa por dentro y por fuera, va a encontrar a alguien-le dije- seguro que lo hará y....y será feliz-acabé.
Solo de pensar ver a Aitana con alguien más me rompía, pero no me quedaba otra. No me quedaba otra.
-Te estas equivocando, estas pensando en tu amigo y te lo valoro, pero no estas pensando en ti y eso no es justo pedri-me dijo acariciando mi espalda-y yo...entiendo a mi hija y te entiendo a ti, se que lo haces por ella pero yo vivi lo que está viviendo ella cuando Gavi me dejó porque era lo mejor para mi y...no era lo mejor, lo mejor para mi era tenerlo a mi lado y él también tiró la toalla-me dijo.
No dije nada, no sabía que decir.
-Pedri, que Pablo ya tiene su vida hecha, pero quizá por su egoísmo va a acabar con la felicidad y vosotros Dos, a veces te sirve más perder a un amigo o a un padre-me dijo ella.
-¿Y si por algo sale mal?-le dije- ¿Qué hago? ¡¿Me cargo la estabilidad familiar de Aitana y que dentro de dos años esto se acabe porque se fije en otro de su edad, o por lo que sea, mil cosas Dani?! Mil cosas. Yo no puedo ser tan egoísta con ella, no puedo ni quiero serlo, es mi princesita no puedo hacerle eso-le dije entre lágrimas y ella suspiró.
-Pues lo más importante para tu princesita es tener a su príncipe azul a su lado Pepi, y obviamente puede salir mal como cualquier pareja, pero créeme que a veces merece la pena intentarlo porque si sale bien puedes ganar mucho, te lo dice una que empezó a salir con su mejor amigo cuando él le pidió ayuda para limpiar su imagen-me dijo y yo la miré en silencio.
-Lo siento-le dije negando en rotundo y ella suspiró levantándose.
-Piensatelo, y come algo, tienes muy mala cara-me dijo-me tienes para lo que necesites-me dijo dejando un beso en mi mejilla antes de salir de casa.
Por mucho que dijese Dani, yo sentía que estaba haciendo lo correcto.
Ella acabaría olvidándose de mi con el tiempo, estaría bien con su familia, yo no la iba a olvidar nunca, pero ella sí podía y aunque esa idea me doliese, sabía que era lo mejor que le podía pasar.
Yo tenía que alejarme.
*Gavi*
-Aitana cariño, ¿no vas hoy tampoco a la uni? Se te han pegado las sábanas o que-le dije pegando a su puerta, pero no obtuve respuesta-¿Aiti?-pregunté entrando y la vi aún tumbada en su cama, en la misma posición que la habíamos dejado su madre y yo ayer.
-Estoy mala, no voy a ir hoy-me dijo con la voz entaponada y me acerqué, no podía ser. Seguía llorando y su aspecto era incluso peor que el de ayer.
Estaba pálida, no se cuanto tiempo llevaría sin probar bocado porque ayer no había querido comer en todo el día y sus ojitos...los ojitos de mi niña no parecían ni los de ella.
Me mataba verla así.
-Aitana, el mundo no se acaba-le dije poniendo mis brazos en jarra suspirando.
-El mío si, déjame sola porfavor-me pidió y yo suspiré.
-Aitana, esto no funciona así cariño, tienes que levantarte y tienes que seguir con tu vida, venga, levántate-le pedí quitándole la colcha de encima.
-¡Qué me dejes! ¡Qué me dejes por lo menos llorar en paz! ¡Déjame! ¡Si he vuelto a casa ha sido por mamá, no por tí, déjame aunque sea llorar! ¡Solo te pido....llorar!-me dijo cogiendo su colcha de nuevo para taparse y me quedé petrificado al escucharla rota, completamente rota-¡Sal de mi habitación! ¡SALTE!-me dijo y le hice caso para que no se alarmase más.
En cuanto cerré la puerta Dani subia las escaleras.
-¿¡Qué son esos gritos?!-me recriminó abriendo la puerta de Aitana- Aitana-la llamó a ella que si que abrió los brazos para que su madre la abrazase llorando.
Las observé desde el pasillo y tenía el corazón encogido.
Joder. ¿Acaso me estaba equivocando?
-Tranquila, llora todo lo que necesites, llorar esta bien, voy a bajar a hacerte una tila estas muy nerviosa cielo....si...una tila si...-discutía Dani con Aitana abrazandola mientras mi hija lloraba...sin consuelo.
El amor dolía, y ella sí que estaba enamorada.
Dani la dejo en su cama cerrando la puerta y me miró seria y enfadada, con las lágrimas casi saltadas.
-No vuelvas a entrar en la habitación de tu hija hasta que ella te dé permiso, te lo advierto Pablo-me dijo bajando las escaleras.
-Mi amor...-empecé yo intentando excusarme, solo quería lo mejor para ella.
-¡Mi amor nada!-me dijo ya abajo desesperada-¿¡La estas viendo?! ¡La estás destruyendo! Eso por no hablar de pedri, no se cual de los dos está peor porque vengo de su casa, estas siendo un egoísta, incluso tenía una maleta, ¡una maleta! Es que no te entiendo Pablo, no te entiendo ni te entenderé jamás en esto, te estás pasando mucho, muchísimo, ¿¡Quien te crees que eres para mandar en sus vidas y en su felicidad?! ¿¡Quién?! -me dijo y yo suspiré, me dolian sus palabras.
Pero no dije nada y ella negó mirando con decepción en sus ojos.
-Pedri te esta demostrando una lealtad que tu no estás cumpliendo. Él lo hace por ti, la deja por ti, se aleja por ti. Y a ti te da igual destrozarlos a ambos, y más te vale que ninguno haga ninguna tontería porque entonces me vas a conocer Pablo, me vas a conocer de verdad-me dijo sacando la tila para subirsela a Aitana pasando por mi lado de mala gana.
"Más te vale que ninguno haga ninguna tonteria"
Cogí las llaves del coche y salí de casa, tenía que ver a Pedri a ver si era verdad eso de que estaba tan mal...
(CONTINUARÁ...)
Os leooo❤️✨️
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Murmullos-Pedri González y Aitana Páez
FanfictionSECUELA DE JURAMENTO ETERNO DE SAL-PABLO GAVI Donde Aitana, la hija de Gavi y Dani está enamorada de Pedri, el cual le saca ventidos años y es el mejor amigo de su Padre. Pedri deberá ser el responsable, Aitana la que reprima sus sentimientos por el...