*POV Camila
-y si nadie quiere hablar conmigo? -pregunté, nerviosa-
Taylor: por Dios Camila, las personas te hablarán. Cálmate.
-no puedo. -me levanté, caminando por la habitación- estudié con las mismas personas desde mi primer año, no sé hacer amistades.
Taylor: no sabes hacer amistades? Viniste a un país desconocido, sola, a la casa de completos extraños y me dices que no sabes hacer amistades? -carcajeó- Ay Camila, discúlpame.
Mordí mi labio inferior, ya lastimado de tantas veces que lo hacía. Me alisté para dormir, pero terminé con insomnio, todo por los malditos nervios, bajé para tomar un vaso de leche, con la esperanza de traer el sueño, me llevé un susto cuando me tropecé con Lauren al doblar para entrar a la cocina.
-AY -choqué con ella, derramando el agua que ella llevaba, sobre su camisa- disculpa, no te vi.
Lauren: todo bien. -continuó frente a mi, impidiendo que entrara totalmente a la cocina-
-con permiso?
Ella me miró unos segundos, entonces dio un paso a un lado, dejándome pasar.
Tomé un vaso y la leche, sirviéndome.
Lauren: insomnio?
Me limité en asentir, ella suspiró.
Lauren: hasta cuándo vas a seguir fingiendo que existo? -la escuché acercarse-
-no estoy fingiendo que no existes.
Lauren: pero me estás ignorando. -se detuvo, más cerca de lo que debería-
-de hecho.
Lauren: todavía por causa de aquella discusión ridícula? -solté el vaso que tenía en mis manos, dejándolo en el fregadero-
-ah, además de todo fue ridícula para ti? Por Dios, ya crece niña! -intenté pasar por ella, pero Lauren sujetó mi brazo, impidiéndome seguir- qué quieres?
Lauren: si no te importara tanto, no sentirías tanta rabia por mi. -intenté no mirar directamente sus ojos-
-la discusión fue importante para darme cuenta de la persona baja que eres. Y yo nunca dije que no me importaba, tú eres la que dice que no me debería de importar. Y eso es lo que estoy haciendo.
Lauren: yo... -me miró- ...yo creo que fui un poco grosera. -suspiró-
-vaya, tardaste dos meses para darte cuenta de eso?
Lauren: por favor Camila, coopera.
-yo no voy a facilitar las cosas para ti Lauren, ya no más. Me lastimaste físicamente hace un tiempo atrás y te lo perdoné. Me lastimaste con diferentes palabras y también te lo perdoné. Ahora ya basta, no voy a perdonar tan fácil. No quiero lastimarme nuevamente. -ella me soltó- sabes por qué? Porque hoy eres un amor, mañana estarás ignorándome o diciéndome que nunca debiste haber hablado conmigo.
Lauren: cuanto te duele. -negó con la cabeza-
-sigue con el juego. Sigue ignorando las palabras de quien te quiere ver bien.
La miré unos segundos y entonces volví al cuarto, muy molesta como para conseguir dormir.
En la mañana siguiente estaba con los ojos pesados, el sueño golpeándome y cero ganas de salir de la cama, pero no podía faltar a mi primer día en el teatro. Bajé, tomé café con Clara, ya que Taylor ya se había ido a la escuela.
-cómo hago para llegar a mi curso?
Clara: Lauren te irá a dejar, querida. -me congelé-
Asentí callada. Droga.
Un tiempo después ella apareció, lista para irme a dejar a mi curso. Entramos al carro calladas y nos quedamos asi hasta llegar al lugar.
-hm, gracias. Lauren, la puerta está cerrada.
Lauren: lo sé. Digamos que yo cobro peaje.
Ella viró su rostro, señalando su mejilla, volteé los ojos y me crucé de brazos.
-yo no voy a hacer eso. Lauren, abre la puerta, ahora!
Nada...
Suspiré y le di un beso rápido en su mejilla, para librarme rápido de eso, entonces ella abrió el seguro de la puerta.
Lauren: buena chica.
Salí del auto escupiendo fuego.
El curso fue genial, todo el mundo fue amable conmigo, puedo decir que me gustó mucho. Cuando salí del lugar vi a Lauren recostada en el carro, fingí que no la vi y seguí caminando, en lo que un silbido cortó el aire, me volví, sabiendo lo que me esperaba y ella levantó la mano, haciendo un gesto.
Fui hasta ella con mala voluntad.
-qué haces aquí?
Lauren: estoy ganándome una nota para ser tu chofer. -respiré hondo, entrando en el auto.
Ella hizo lo mismo, nos quedamos en silencio hasta que noté que había algo extraño en el camino, puedo no saber muchas cosas, pero ella está yendo por un lugar contrario al que me trajo.
-Lauren, a dónde vas?
Lauren: hm, vamos a dar un paseo.
-que paseo ni que nada, llévame a casa.
Lauren: yo dije que: Vamos a dar un paseo.
-detén el carro, yo me voy sola hacia casa.
Lauren: hm... -miró por la ventana, como analizando algo- ...no estoy yendo tan rápido, si quieres, abre la puerta y te tiras.
-estás jugando. Lauren, no quiero pasear contigo.
Lauren: entonces finge que esto es un secuestro y cállate la boca.
-Ja Ja que chistosa. Puedes decir, por lo menos, a dónde vamos?
Lauren: no. -cerró el asunto-
-por Dios Lauren, estamos yendo hasta China?
Lauren: aprovecha el paisaje. -dijo simplemente, sin darle mucha importancia a mis reclamos-
-no te entiendo, sabías? Porqué quieres salir conmigo? Aun diciendo que soy una desconocida, una idiota de intercambio.
Lauren: no dije idiota. -respondió, dejándome más brava-
Suspiré y me di cuenta de que era imposible mantener una conversación con Lauren. Tardó mucho tiempo hasta que ella estacionó el auto.
-ah que genial, un estacionamiento. Ahora vamos a cuidar los carros y ganar dinero para que te vayas a meter a algún bar por ahí?
Lauren: nosotras vamos a caminar ahora.
-caminar? Yo no voy a ningún lugar. -me negué a bajar del carro- va a saber qué quieres hacer conmigo.
Ella suspiró, le dio la vuelta al auto, abrió la puerta de mi lado y se quedó ahí afuera, sujetó mi rostro y lo volvió hacia ella.
Lauren: crees que seria capaz de hacerte daño? -tragué seco- yo no te voy a hacer nada Camila. -dijo calmada- ven. -estiró su mano- deja que te muestre una cosa.
Miré su mano y me negué a tomarla, salí sola. Caminamos calladas hasta la entrada de un parque, en segundos mis ojos se abrieron completamente, encantada con el lugar. Flores y más flores, de todos los colores, tipos, por todo lado, un sendero, con bancos en el camino, pasaban entre ellos, las personas se sentaban en medio de las rosas o corrían entre las margaritas. Jadeé.
-porqué? -miré a Lauren- porqué me trajiste aquí?
Lauren: es inaceptable que no vengas a conocer esto. -señaló el lugar- solo creí que te gustaría. -se encogió de hombros-
Terminé sonriendo, no tenía como no hacerlo estando en un lugar tan bello como este.