*POV Lauren
Estaba distraída hablando con unos amigos en internet, mientras escuchaba música, máximo volumen, con mis audífonos. Por eso, obviamente, noté que ya no estaba sola, lo descubrí cuando alguien tocó mi hombro, mi di vuelta, dando de cara con Camila, me quité los audífonos, dejándolos caer sobre mis hombros.
-si? -giré la silla, quedando frente a ella-
Camila: cena. -apuntó hacia atrás, señalando la sala-
-ah... -asentí, quitándome completamente los audífonos- me están llamando hace mucho tiempo? -pregunté, volviendo a quedar frente al computador, para cerrar las páginas abiertas-
Camila: más o menos. -respondió, se inclinó, pasando sus brazos sobre mis hombros y apuntando algo que había en la pantalla del computador- hey, qué canción es esa? -preguntó, con su rostro prácticamente sobre el mio-
Respiré hondo, conteniendo los escalofríos que sentía por tener sus labios tan cerca a mi cuello.
-hm... no sé pronunciar eso.
Camila: Lauren, bajaste una canción mexicana? -preguntó, completamente sorprendida-
-si... -respondí, aún sin reacción, coloqué la mano en mi cabello, enredándolo- ...yo quería. -me enredé- ...ver... -tragué seco- ...una cosa.
Camila: aun estás intentando aprender sola español? -preguntó, volviendo su rostro en mi dirección, casi rozando sus labios en mi mejilla, asentí, incapaz de hablar- quieres que te enseñe algo? -preguntó con una voz tierna, asentí nuevamente, avergonzada- está bien, hoy, después de comer. Claro, a no ser que tengas algún compromiso...
-todo bien, profesora. -le guiñé, levantándome-
Ella comenzó a reír y luego nos dirigimos fuera de la habitación, yendo a comer.
*POV Camila
Después de cenar, volvimos al cuarto de Lauren, para comenzar mis clases improvisadas de español.
-está bien, te diré como se pronuncian algunas palabras y tú repites, está bien? -ella sintió, mientras, así como yo, se sentaba en la cama, frente a mi- vamos a comenzar por aquí. Presta atención en lo que yo toco y luego en la palabra, ok? -asintió nuevamente. Toqué la cama- cama. -hablé lentamente- repite.
Lauren: cama. -habló, obediente. Sonreí, ella pronunciaba muy lindo aquel acento-
-eso, muy bien. -me levanté, me paré frente a su cómoda y toqué el teléfono-teléfono. -pronuncié nuevamente. Era interesante hacer eso, por más que esas palabras a mi me parezcan obvias, para Lauren eran toda una novedad-
Lauren: Eh? -preguntó, sus ojos verdes mostraban confusión-
-repite en partes. Escúchame. -Me senté nuevamente frente a ella- Te. Repite.
Lauren: Te. -habló, como un loro-
-Le. -dije en seguida, ella repitió- Fo. -una vez más capturó las palabras y las pronunció. No. -cerré. Ella también- ahora dímelo todo junto.
Lauren: tefolone. -Habló, nerviosa-
-si, ya casi. -sonreí, tierna- vamos a seguir...
Lauren: Camila, podemos hacerlo de una forma diferente?
-cómo quieres hacerlo?
Lauren: yo te pregunto y tú me respondes. -concordé-
Entonces ella se acercó más a mi y llevó las manos hasta mi cabello, enredándolos en sus dedos y mirándolos, al mismo tiempo.
Lauren: cómo se llama? -señaló mi cabello, sus ojos tenían una mezcla de curiosidad con ternura-
-cabello. -respondí, nerviosa con la proximidad-
Lauren: cabello. -repitió, sin trabarse y llevó la mano a su propio cabello- mi cabello. -sonreí, ella parecía una bebé-
-eso, es correcto. -la impulsé a seguir hablando- qué más quieres saber?
Sus manos, tomaron las mías, con su dedo hizo un cariño circular en ellas, mientras las miraba.
-quieres saber el nombre de eso? -pregunté, mirando nuestras manos, ella asintió- Una mano. -la levanté, para que ella pudiera ver- dos manos. -levanté la otra, soltando nuestros dedos y haciendo un dos con ellos-
Lauren: Manos. -repitió, obediente, sonreí, asintiendo- Cabello. -tocó nuevamente mi cabello, acariciándolo- y manos. -apretó nuevamente mi mano- y eso como se llama? -preguntó, tocando mi mejilla, delicadamente-
-mejilla. -hablé, ignorando la corriente eléctrica que recorrió mi cuerpo-
Lauren: que gracioso. -me rio, acabé riendo con ella- mejilla. -repitió, sin dejar de reír- hey y eso cómo se llama? -indicó mi sonrisa-
-sonrisa. -hablé, todavía riendo-
Lauren: sonrisa. Extraño -hizo un gesto-
-puede ser. -me encogí de hombros, todavía sonriendo- y qué más?
Lauren: y eso? -señaló mis ojos- cómo se dice?
-ojos. -respondí, sintiendo su mano todavía en la mía-
Lauren: ojos. Y eso? -sus ojos se penetraron en los míos, mientras su dedo se posaba en el contorno de mis labios, automáticamente los entreabrí, quedando completamente perdida.
-labios. -mi voz no sonó más alta que un susurro, debido a la proximidad de nuestros cuerpos-
En cuestión de segundos su dedo fue sustituido por la suavidad de sus labios, la respuesta fue inmediata. Cerré los ojos, puse mis brazos alrededor de su cuello y la dejé invadir mi boca, nuestras lenguas se entrelazaban, el beso estaba lleno de ternura, tranquilo, a pesar del claro deseo que teníamos de que eso pasara. Sus brazos me acercaban, como si fuera capaz de salir de ahí. Lauren chupó mi lengua, levemente, torturándome, haciendo que la necesidad que seguir con sus labios en los míos creciera. Mi corazón latía descoordinado, mientras sentía que nada más tendría sentido, a no ser aquel momento. Cuando el aire era necesario cerré el beso con una leve mordida en su labio inferior, seguido por un delicado beso en sus labios. Abrimos los ojos, nos quedamos un tiempo en silencio, estaba completamente en sus ojos verdes, hipnotizadores. Lauren tocó mi rostro, acariciándolo.
Lauren: y eso que acaba de pasar, cómo se llama? -preguntó, con calma, su voz pesada, mientras nuestras respiraciones intentaban normalizarse-
-beso. -respondí en un susurro tímido-
Lauren asintió, coloqué mi mano sobre la de ella que estaba en mi rostro, en el mismo instante en el que ella la sujeto y la llevó directo hasta su corazón, que latía acelerado.
Lauren: y esto? -preguntó, con sus ojos llenos de cariño-
-corazón. -dije, después de recuperarme y del choque que debió ser para ella hacer eso-
Entonces, lo que vino en seguida, acabó con cualquier expectativa que tenía. Ella miró lo más profundo de mis ojos y comenzó a hablar.
Lauren: me gusta tu cabello tanto como tus manos, adoro la forma en la que tu mejilla se enrojece cuando te elogio y como es amplia y radiante tu sonrisa. Tus ojos son encantadores, así como tus labios suaves. Y encima de todo estoy loca por tu beso. -a esa altura mis ojos ya lagrimaban- y encuentro extraño como mi corazón se acelera cuando llegamos al final de el.
