*POV Lauren
Es increíble como desde que ella llegó viene intentando poner todo en orden, resolver todos nuestros problemas, cuando debería ser todo lo contrario, nosotros tendríamos que acogerla y cuidar de ella.
-no tuviste mucha suerte al decidir hacer este intercambio. -comenté de repente, ella me vio algo confundida- elegiste a la familia más llena de problemas en todo Miami.
Camila: pues no estoy de acuerdo. -su expresión era suave- aprendí más con ustedes aquí que en todos mis años de vida.
-qué aprendiste? -levanté una ceja-
Camila: yo era ese tipo de chica que siempre tiene la protección de sus padres en todo lo que hacía...-comenzó a contar-...yo daba un paso y ahí estaban ellos, para guiarme. -la miré, curiosa- cuando llegué aquí me sentí perdida y por un momento pensé que no iba a poder sola. -suspiró- pero a partir de ahí comencé a apegarme a ustedes. -sonrió- tus papás me acogieron como una hija...-asentí-...tu hermano me ayudó a seguir siendo una niña...-contó...Taylor se volvió mi mejor amiga...-me vio- y tú...-suspiró, mientras sonreía. Mordí mis labios, nerviosa.-...tú me enseñaste a ser fuerte.
-cómo? -pregunté, sin creerlo-
Camila: Lauren, tú eres muy fuerte. -tocó mi mano- más de lo que crees. -sus ojos marrones mirándome- eres independiente, libre...-se encogió de hombros-...aprovechas la vida...-luego completó-...cuando no estás haciendo alguna mierda, claro. -sonreí de lado- me di cuenta de que perdí mucho tiempo encerrada en mi mundo. -y entonces concluyó- aprendí a ser dueña de mi propia vida y eso vale mucho.
*POV Camila
Podía hacer una lista de todas las cosas que he aprendido todo este tiempo durante el intercambio y principalmente lo que aprendí con ella.
Sabes Lauren, por primera vez tuve un amor, y un amor de verdad, alguien que puede hacer latir mi corazón muy fuerte, tambalear mis piernas y hacer mis manos sudar. Pero sabes cuál es el problema? No? Te voy a contar, ese mismo puede ser tan idiota como adorable, no sé si es correcto amarte o no. Y ahí está una cosa más que aprendí, el amor no se elige, se siente y se calla la boca, digámoslo así.
Alguien chasqueó los dedos frente a mi cara y salí de mi trance.
-si? -la miré, parpadeando varias veces seguidas.-
Lauren: viajando? -levantó su ceja.-
-no, siempre hago eso cuando el asunto me aburre. -bromeé con ella, quien hizo una cara póquer.- estoy bromeando Lauren, jajaja ahora es el momento en donde te ríes. -expliqué- por Dios mujer, un poco de humor cae bien a veces.
Lauren: yo soy la persona más chistosa del mundo. -se defendió- conoces la nueva broma del no ni yo?
-no. -qué diablos de nueva broma!?
Lauren: ni yo. -respondió, dejándome con la misma cara de póquer de ella hace unos segundos atrás.- ahora es el momento en el que te ríes.
Un tiempo después de la super broma de Lauren tocaron el timbre, cuando abrí la puerta me encontré con Harry y mis amigas del curso.
Simone: Chica, que perdida nos dimos para poder encontrar tu casa. -comentó, dándome un beso.- Harry es tan inútil que se perdió.
Harry: mírala, no es mi culpa si las damas vienen charlando todo el tiempo. -se defendió- terminé confundiéndome.
Carolina: siempre perdido. -lo empujó levemente del hombro, luego me dio un beso en la mejilla.- venimos a ensayar. -aplaudió, sonriendo- a tu casa, porque ya que nunca recibimos una invitación formal, tuvimos que venir por cuenta propia.
-está bien, pasen. -sonreí, cerrando la puerta cuando todos entraron.- ella es Lauren. -indiqué con la mano hacia donde ella estaba.-
Simone: cuando dijiste que era bonita no estabas bromeando. -socorro, que vergüenza. Carolina le dio un codazo.-
Carolina: comentario innecesario. -intentó ayudarme. Sonreí.-
Lauren: Hola! -se levantó y vino a saludar.-
Harry: en dónde podemos ensayar? -preguntó, viendo hacia todos los lados.-
-allá en el jardín. -fui caminando hasta el lugar.-
Simone: hey, llama a tu hermana. -pidió- necesitamos una opinión.
-claro. -sonreí.- Lauren, ven con nosotros! -ella asintió un poco confundida, pero terminó viniendo.- ok, por dónde comenzamos?
Carolina: hm...-le echó un vistazo al libreto.-...aquí, Harry y yo tenemos que ensayar esta parte melosa. -indicó la parte, asentí. Me senté al lado de Lauren para ver.-
-con el tiempo vas a terminar apegándote a ellos. -sonreí.- están un poco locos, pero son buena gente.
Lauren: puedes estar segura que tus amigos son más normales que los míos. -obviamente se refirió a las personas del antro.-
