*POV Lauren
Nunca quise tanto que una broma acabara volviéndose en realidad, una parte muy grande de mi quería eso, y lo necesitaba, estar segura de que todo lo que vivimos no va a terminar junto al intercambio. Que todo en lo que me convertí no se vaya con ella. Y creo que ese es mi mayor miedo, cuando no la tenga cerca, no tendré más el impulso de querer ser mejor, aunque todavía no me haya logrado alejar completamente de las drogas.
Drew: LAUREN. -gritó, en mi oído, sacándome de mis pensamientos.-
-si!? -dije lentamente.-
Drew: hace media hora que te estoy llamando. -comentó.- estabas en la luna?
Taylor: sólo si esa luna sea de México y tengas los ojos cafés. -murmuró, riendo.-
-discúlpame. Qué querías? -pregunté, ignorando a mi hermana.-
Drew: te estaba sugiriendo que pasáramos por un helado, al final la tarde está caliente hoy. -asentí, cambiando el rumbo hacia la heladería.-
Camila: ay, buena idea Drew. -elogió, sonriendo.- realmente está muy caliente. -concordó, mientras recogía su cabello.-
La miré desde un lado de mis ojos y estiré mi mano para tocar la suya.
Camila: las dos manos en el volante, Lauren. -me imitó como hablé más temprano, haciéndome reír.-
En poco tiempo llegamos a la heladería. Tomamos los sabores que queríamos y nos sentamos en una de las mesas en la parte de afuera del local.
Taylor: yo amo el chocolate. -comentó.-
Camila: creo que me di cuenta de eso cuando te vi tomando cinco bolas de ese sabor de helado. -dijo riendo, mi hermana le sacó la lengua.-
-ih, ya te ensuciaste. -comenté, mirando a Camila.-
Camila: en dónde? -preguntó.
-aquí. -me acerqué a ella, pasando mis labios a un lado de los suyos.
Taylor: ah, ahora se supone? Y en público? -preguntó, burlándose.- finalmente. -sonrió.- puedo decirte cuñada?
Camila: Taylor, come que te ves más bonita. -respondió, riendo.-
*POV Camila
Más tarde dejamos a Drew en su casa y regresamos a la nuestra. Lauren tiró las llaves del carro sobre la mesa, mientras Taylor subía a tomar un baño. La miré un momento, estaba tan callada desde que llegamos de la heladería.
-pasó algo? -pregunté, tocando su hombro. Ella se dio la vuelta hacia mi, negando con la cabeza.-
Lauren: porqué? -me vio, confundida.-
-no sé, estás medio quieta... -mordí mi labio inferior.-
Lauren: sólo me quedé pensando en algunas cosas... -se sentó en el sofá.- ...ven aquí. -me llamó. Fui hasta ella, pero cuando me iba a sentar a su lado, me tomó en su regazo, me sujeté en su cuello y recosté la cabeza en su hombro, sus manos envolvían mi cintura. Ella apoyó su barbilla en mi hombro.- no te incomoda cuando Taylor te dice cuñada? -preguntó, tomándome de sorpresa.-
-no. -dije sincera.- es un juego suyo, una forma de burlarse de mi.
Ella asintió, mientras depositaba un pequeño beso en mi cuello, dejándome erizada.
Lauren: Wesley me envió un mensaje temprano... -me contó, con calma.- ...invitándome a una fiesta con él esta noche.
-y...? -pregunté, levantando la cabeza para poder verla.-
Lauren: no sé. -suspiró.- simplemente no puedo decidir ahora.
-porqué? Es prohibido intentar alejarse de lo que te hace mal? -pregunté, con la voz un poco alterada. Esos "amigos" suyos me ponen furiosa.-
Lauren: Camila, no puedo simplemente dar el pie,hace años que compro las...er...-drogas, si, prosigue. La miré, dándole a entender que había entendido.- ...él cuenta con el dinero, no soy solo yo.
-y si desapareces él que va a hacer? -pregunté.
Lauren: algo parecido a lo que Keaton hizo. -se encogió de hombros.
-Lauren, de una vez por todas, porqué te metiste en eso?
*POV Lauren
Sé lo importante que es para ella saber lo que me llevó a usar drogas, pero todavía me bloqueo muy fuerte cuando me preguntan sobre eso.
-discúlpame. -fue todo lo que respondí, con la voz más baja que lo normal.-
Camila: aun no confías en mi lo suficiente como para hablar de eso, no es así? -preguntó, con el mismo tono de voz que el mío.-
-no confío ni en mi misma para hablar de eso. -respondí, sincera.- fue algo muy idiota, un pequeño motivo, estupidez, diría. -conté, por encima.- que me llevó por un camino prácticamente sin regreso.
Camila: no digas eso. -dijo un tanto enojada.- yo no voy a dejar que te destruyas por causa de las drogas. Y ni por nada.
-está bien, disculpa. -decidí no oponerme. Aunque tuviera mis dudas en cuanto a eso.
Cerca a la media noche, ese mismo día, caminé nerviosa por mi habitación. Sé que está mal, pero no puedo simplemente dejar de ir al club. No quiero más problemas con personas que tienen el mismo estilo de Keaton. No quiero hacerle esto a Camila otra vez. Wesley sabe ser un buen amigo, pero se olvida de eso cuando se trata de negocios. De venta. Necesito aparecer para que él vea que aun estoy con él, aunque no compre nada. Sólo que el problema es aguantar el vicio